Descripción general:
Es la disminución anormal de la cantidad de pigmentos biliares en las heces.
Síntomas:
Heces de color pálido.
Causas:
La acolia es un signo de muchas enfermedades, como la hepatitis, siendo tríada patognomónica con la ictericia, la coluria y la obstrucción de vías biliares por múltiples enfermedades.
¿Cómo prevenirlo?:
Control médico de las causa desencadenantes.
Factores de riesgo:
Colestasis, colangitis esclerosante, hepatitis viral, Cirrosis biliar, Cálculos biliares (colelitiasis).Tumor de páncreas, medicamentos, estenosis de vías biliares, quistes, tumores benignos o malignos del sistema biliar o hígado.
Alteraciones congénitas de la estructura biliar. Hiperbilirrubinemia directa.
Descripción general:
Una alteración neuromuscular que consiste en la aparición involuntaria de interrupciones rítmicas de una contracción muscular voluntaria.
Síntomas:
Relajaciones repetidas de los músculos ocupados en movimientos o posturas voluntarias. Ocasionalmente pueden aparecer como movimientos espontáneos, pero en la mayoría de los casos se observa cuando se le pide al individuo durante una exploración intencional, a realizar movimientos musculares de tensión y sensación.
Causas:
Las causas exactas son desconocidas pero se supone que es producida a propósito de una deficiencia en el metabolismo del amonio.
¿Cómo prevenirlo?:
Estudio adecuado de los movimiento anormales.
Factores de riesgo:
Encefalopatía hepática.
Descripción general:
Es una masa llena de pus dentro o asociado al hígado.
Síntomas:
La fiebre es el signo inicial más frecuente del absceso hepático. Otros síntomas comunes, en especial en pacientes que tienen una afectación activa de la vesícula biliar, muestran signos y síntomas circunscritos en el hipocondrio derecho, tales como dolor, defensa, hipersensibilidad, escalofríos, anorexia, pérdida de peso, náuseas y vómitos. Sólo 50% de los pacientes con abscesos hepáticos tiene hepatomegalia o ictericia; de modo que la mitad de los pacientes carecen de signos o síntomas que dirijan la atención hacia el hígado. El 95% de los pacientes con un absceso amebiano tendrán síntomas en los primeros cinco meses.
Causas:
Las causas más comunes son las infecciones abdominales, tales como una apendicitis, diverticulitis, una enfermedad inflamatoria intestinal, un intestino perforado, infecciones sistémicas como una endocarditis bacteriana o la manipulación del tracto biliar.
¿Cómo prevenir?:
Tratamiento adecuado de las patologías que lo desencadenan.
Factores de riesgo:
Apendicitis, diverticulitis, una enfermedad inflamatoria intestinal, un intestino perforado, infecciones sistémicas como una endocarditis bacteriana o la manipulación del tracto biliar.
Tips para detectar la enfermedad:
Vigilancia adecuado de las patologías que lo desencadenan.
Descripción general:
El adenoma hepático o hepatocelular es un tumor hepático de naturaleza benigna que aparece fundamentalmente en mujeres en edad fértil y que se asocia especialmente a la toma de anticonceptivos orales. Es raro en varones. Generalmente, se trata de una lesión única que fácilmente alcanza los 5 cm de tamaño.
Síntomas:
Un 25-50% de los adenomas hepáticos causan dolor en el hipocondrio derecho (cuadrante superior derecho) o en la región epigástrica del abdomen. Ya que los tumores hepáticos pueden llegar a ser voluminosos (8-15 cm), los pacientes pueden llegar a notar una masa palpable. Son usualmente asintomáticos, y posiblemente sean descubiertos incidentalmente durante estudios de imágenes ordenados por alguna razón no relacionada.
Causas:
Noventa y nueve por ciento de los adenomas hepáticos se dan en mujeres de 20-40 años, la mayoría de las cuales usan anticonceptivos orales.Los adenomas hepáticos están relacionados con la enfermedad de almacenamiento glucogénico tipo 1, así como con el uso de esteroides anabólicos.
Cómo prevenir:
Control periódico cuando se consumen anticonceptivos, evitar el uso de esteroides anabólicos sin indicación médica y vigilancia periódica en los pacientes que tienen glucogenosis.
Factores de riesgo:
Anticonceptivos, uso de esteroides anabólicos sin indicación médica y glucogenosis.
Descripción general:
La aerofagia es un fenómeno fisiológico producido por la ingesta excesiva de aire en el tracto digestivo, especialmente durante las comidas.
Síntomas:
La aerofagia se manifiesta por una sensación de pesadez estomacal, sensación de hinchazón y problemas digestivos, los cuales llevan al eructo, que, junto con los gases, busca aliviar las molestias en la digestión. Cabe destacar que los síntomas de la aerofagia son muy similares a los de reflujo gastroesofágico. Los síntomas son:
- Distensión abdominal: causada por la presión de los gases.
- Dolor abdominal: En ocasiones el dolor se traslada a la zona baja del esternón al presionar el aire tanto al estómago como al corazón.
- Ruidos intestinales.
- Eructos (sin olor).
- Gases (sin olor).
Causas:
Normalmente, la aerofagia se deriva de un régimen alimenticio inadecuado, relacionado con el consumo excesivo de bebidas gaseosas y azucaradas o de ciertos alimentos. Incluso, puede causarse por algunos malos hábitos durante la comida, como comer demasiado rápido, favoreciendo la ingesta de una gran cantidad de aire.
También puede producirse debido a problemas de ansiedad como el estrés, y es frecuente en personas que no coordinan adecuadamente las funciones de tragar y respirar.
¿Cómo prevenir?:
Es recomendable mantener una dieta adecuada, masticar despacio y evitar ciertos alimentos que promueven la inflamación, como refrescos, dulces o goma de mascar, entre otros. Si la hinchazón se debe al estrés, hay que tener en cuenta los trastornos de ansiedad, afrontarlos con el tratamiento apropiado o reducirlos con la práctica regular de deporte y la relajación.
Los síntomas de la aerofagia suelen desaparecer espontáneamente, una vez aisladas y tratadas las causas responsables del trastorno.
Factores de riesgo:
Los pacientes con patologías mentales son más propensos a disminuir la coordinación al momento de tragar y masticar.
Tips para detectar la enfermedad:
Se establece el diagnóstico cuando los eructos son repetitivos y molestos, al menos varias veces por semana y se comprueba la ingesta de aire. El diagnóstico es básicamente clínico, objetivando la ingesta de aire.
Lo fundamental en el diagnóstico es descartar patologías orgánicas subyacentes que pueden ser muy variadas: enfermedades del tracto digestivo superior, sobrecrecimiento bacteriano o alteraciones de la motilidad, entre otros.
Descripción general:
La alopecia es la pérdida anormal del cabello, es decir, cuando una persona pierde más de 100 cabellos diarios.
Síntomas:
- Molestias en el cuero cabelludo que se manifiestan por el enrojecimiento o por picores.
- Encontrar con frecuencia muchos pelos en la almohada al levantarte.
- Si al cepillar y lavar el pelo se cae en gran cantidad.
- Exceso de caspa o grasa.
- El acné o el vello facial en el ciclo menstrual.
- Calvicie en barba o cejas.
- Debilidad del cabello en la parte superior de la cabeza. Este es el síntoma más común de calvicie femenina.
- En el caso de los hombres, el síntoma más común es la caída del pelo de la frente, en las sienes o en la región superior de la cabeza.
- Perder cabello a temprana edad, en la adolescencia o entre los 20-30 años
Causas:
Hay diferentes factores que influyen en la pérdida de cabello:
- Herencia: tanto los hombres como las mujeres pierden cantidad de pelo por la edad. Por lo general, este tipo de calvicie no es causado por una enfermedad y está relacionada con el envejecimiento.
- Estrés: el estrés físico o emocional puede causar la caída del cabello. En cuestión de días se puede notar como la mayor parte del pelo desaparece, esto sucede en los días de mayor ansiedad o en días posteriores.
- Alimentación desequilibrada y una dieta pobre en minerales y nutrientes.
- Uso excesivo de champú y secador.
- Toma de medicamentos como, anticoagulantes, anticonceptivos o antidepresivos pueden provocar la pérdida del cabello.
- Embarazo y parto, es muy frecuente en mujeres que acaban de dar a luz que manifiesten una pérdida del cabello.
- La caída del cabello puede deberse a enfermedades como el lupus, la sífilis, la diabetes, el hipotiroidismo o la anemia.
- Peinados muy apretados.
- La radioterapia.
Cómo prevenirlo:
Para evitar la caída del cabello es fundamental no lavarse el pelo todos los días y utilizar el champú que más se ajuste a nuestro pelo. Además, cuidar la alimentación ayudará a tener los nutrientes necesarios para mantener un cabello más fuerte y saludable.
Decripción general:
La pelvis es un hueso que está unido a múltiples músculos y ligamentos que se conocen como el "Piso pélvico", las cuales contienen estructuras de todos los sistemas principalmente reproductivo, genitourinario y gastrointestinal. Una alteración en el piso pélvico es cualquier cambio anormal en este y se puede asociar a incontinencia urinaria o prolapsos (salida de parte de algún órgano por la vagina).
Descripción general:
Dolor o una molestia en el tórax que se produce cuando el corazón no recibe la suficiente irrigación sanguínea, y se debe a una obstrucción parcial de las arterias coronarias.
Síntomas:
Las principales manifestaciones de la angina de pecho son:
- Dolor torácico y sensación de opresión aguda y sofocante: Generalmente detrás del esternón y a veces extendida al brazo izquierdo y a veces al derecho. El dolor torácico suele durar entre 1-2 minutos y 10-15 minutos (a veces se percibe una sensación de pesadez o presión en el pecho que no llega a convertirse en dolor).
- Sentimiento de ansiedad o de muerte inminente.
- Sudoración excesiva.
- Palidez.
Causas:
La angina de pecho normalmente va precedida de una excitación física o emocional; ocasionalmente puede desencadenarse al comer en grandes cantidades o conducir durante las horas de tráfico intenso. Otra causa puede ser practicar ejercicio en un ambiente frío.
¿Cómo prevenir?:
Los cambios que debe llevar a cabo el paciente son:
- No fumar.
- Realizar actividades físicas moderadas de forma constante.
- Seguir una alimentación sana y llevar un estilo de vida saludable.
Factores de riesgo:
Existen una serie de factores de riesgo modificables que pueden favorecer la aparición de anginas de pecho:
- Tabaquismo.
- Obesidad.
- Diabetes.
- Hipertensión.
- Aumento del colesterol.
¿Cuándo consultar?:
Una vez se presentan los síntomas, es importante visitar de inmediato a su médico para un correcto diagnóstico, debido a que algunos pacientes pueden vivir controlados sin tener apenas síntomas, mientras que otros tendrán una esperanza de vida muy corta e incluso fallecer.
Descripción general:
La ansiedad es un mecanismo adaptativo natural que nos permite ponernos alerta ante sucesos comprometidos. Sin embargo, en ocasiones el sistema de respuesta a la ansiedad se ve desbordado y funciona incorrectamente en diferentes situaciones e incluso, a veces, se presenta en ausencia de cualquier peligro existente.
Síntomas:
Pueden presentarse síntomas a nivel físico tales como taquicardia, dificultad para respirar, sudoración excesiva, tensión muscular, temblores, mareos, desmayos, indigestión, diarrea y dolor de cabeza.
Igualmente, a nivel emocional se presenta preocupación constante, cansancio, irritabilidad, agitación y problemas para concentrarse y conciliar el sueño.
Causas:
Las causas de los trastornos de ansiedad no están del todo claras y en buena parte de los pacientes no llegan a conocerse. En otros casos sí que es posible trazar un origen o determinar los elementos que precipitan las crisis de ansiedad. Algunos de los factores que pueden influir son:
- Causas genéticas: La ansiedad puede heredarse de padres a hijos. En concreto, lo que se transmite a través de los genes es la predisposición.
- Causas circunstanciales: Hechos traumáticos como un accidente de tránsito, un atentado o un incendio pueden provocar ansiedad; en estos casos, el sentimiento de ansiedad puede desaparecer cuando concluye el problema o bien permanecer durante meses o años.
- Consumo de drogas: Las anfetaminas, el éxtasis o el LSD son sustancias que pueden causar ansiedad. Para algunas personas, también la cafeína o la teína pueden producirla.
- Experiencias vitales significativas: Sin llegar a ser traumáticos, cambios vitales en el presente como un embarazo, o alteraciones en el ámbito laboral (un despido, un ascenso, entre otros) pueden producir ansiedad.
¿Cómo prevenir?:
La ansiedad es un sentimiento normal de temor ante situaciones amenazantes o difíciles. Por sí misma no es mala, ya que nos alerta y nos motiva para hacer frente a los peligros, pero se convierte en un problema cuando los episodios de ansiedad son frecuentes, intensos y aparecen sin motivo aparente, limitando a la persona en su día a día.
Para prevenir la ansiedad, es importante adoptar un estilo de vida saludable y evitar el consumo de drogas y sustancias que la causan (cafeína y drogas como el éxtasis, las anfetaminas o el LSD).
Practicar ejercicio físico de forma regular, en especial al aire libre, también ayuda a despejar la mente y evitar los sentimientos ansiosos. Las técnicas de relajación ayudan a combatir la aparición de crisis.
Factores de riesgo:
Los trastornos de ansiedad suelen presentarse de forma conjunta con otras enfermedades. Por ejemplo, es muy frecuente que coincida con cuadros depresivos (en el 50% de los casos según algunos estudios), con abuso de alcohol, trastorno obsesivo compulsivo. También se asocia frecuentemente al trastorno bipolar y a los trastornos psicóticos.
De igual forma, su aparición se relaciona con enfermedades no psiquiátricas que causan un gran impacto en el día a día del paciente, como la enfermedad cardiovascular, los cuadros gastrointestinales, las enfermedades respiratorias, las migrañas y la lumbalgia, entre otras.
¿Cuándo consultar?:
Es importante reconocer los síntomas y acudir al médico en cuanto se detectan, ya que una persona con ansiedad que experimente estos síntomas puede considerarlos como signos de una enfermedad grave y, en consecuencia, empeorar en la enfermedad.
Descripción general:
Es una patología respiratoria que se caracteriza porque las personas que lo padecen roncan habitualmente, tienen paradas de la respiración (apneas) de forma repetida y somnolencia durante el día. Como consecuencia, los pacientes que la padecen no pueden descansar bien durante las horas de sueño.
Síntomas:
Entre los síntomas están:
- Roncar muy fuerte después de quedarse dormidos.
- Jadeo durante el sueño a causa de la necesidad de volver a respirar.
- Sueño no reparador.
- Somnolencia diurna.
- Fatiga crónica.
- Alteraciones respiratorias y cardiovasculares.
Causas:
En algunas fases del sueño los tejidos se cierran y bloquean la vía respiratoria, causando la apnea.
¿Cómo prevenir?:
La principal medida que puede ayudar a prevenir la apnea es perder peso, así como implementar el ejercicio físico. Por otro lado, dejar de fumar y evitar el consumo de alcohol también ayudan a prevenir la aparición de la enfermedad.
Factores de riesgo:
Además de esta causa existen otros factores que pueden aumentar el riesgo de tener apnea:
- Tener el maxilar inferior más corto que el maxilar superior.
- Determinadas formas del paladar o de la vía respiratoria que origina el colapso de la vía.
- Tener un cuello grande.
- Poseer una lengua que puede retrotraerse hasta bloquear la vía respiratoria.
- La obesidad.
- Tener unas amígdalas o vegetaciones grandes que pueden taponar la vía respiratoria.
Descripción general:
Es la presencia de líquido seroso en el espacio que existe entre el peritoneo visceral y el peritoneo parietal.
Síntomas:
En general, si la acumulación del líquido en el abdomen es escasa, no se producen síntomas, pero puede provocar distensión abdominal, pirosis, indigestión y dolor en la espalda baja entre L2;L5, además de las dificultades respiratorias (disnea). En algunos pacientes con ascitis, los tobillos se hinchan (edema)5 a causa del peso del exceso de líquido sobre los grandes vasos inguinales. El dolor no es un síntoma característico en la ascitis. La hipertensión portal causa que se produzca circulación colateral apareciendo nuevas y prominentes venas abdominales superficiales.
Causas:
Suele ser consecuencia de una enfermedad hepática, sobre todo la cirrosis hepática. también puede presentarse en enfermedades no relacionadas con el hígado tales como hipoalbuminemia, el cáncer, la pancreatitis, la insuficiencia cardíaca, la insuficiencia renal, síndrome nefrótico1 y la tuberculosis.
Cómo prevenirlo:
Seguimiento adecuado de las patologia de riesgo.
Factores de riesgo:
Cirrosis hepática.
Descripción general:
Se caracteriza por la aparición de episodios de dificultad respiratoria (crisis o ataques), generalmente asociados a otros síntomas como tos, pitidos al respirar y sensación de ahogo.
Síntomas:
Los síntomas, la frecuencia y la gravedad del asma varían de una persona a otra y suelen empeorar con la actividad física o por la noche. Las personas con asma pueden presentar:
- Silbidos durante la salida del aire a través de los bronquios estrechados. Es lo que comúnmente se conoce como pitos en el pecho.
- Dificultad para respirar (disnea).
- Opresión en el pecho.
- Episodios de tos seca, que se dan especialmente por la noche o a primeras horas de la mañana.
- Menor nivel de actividad.
- Incapacidad para dormir.
- Cansancio durante el día.
- Inflamación: Aumenta la sensibilidad bronquial y la obstrucción. En ocasiones su origen es alérgico. Produce un incremento de las secreciones y la contracción de la musculatura bronquial.
- Aumento de la sensibilidad bronquial
- Obstrucción bronquial
Causas:
- Pólenes: El pequeño tamaño del polen favorece que quede suspendido en el aire durante largo tiempo y recorra grandes distancias hasta penetrar en los conductos respiratorios.
- Ácaros del polvo: Son parásitos microscópicos que viven en el polvo de las casas y se alimentan de escamas dérmicas y otros residuos. Necesitan unas condiciones precisas para desarrollarse: 25º C de temperatura y 85 por ciento de humedad.
- Alimentos: Los episodios de asma relacionados con alimentos son frecuentes durante la infancia y van acompañados de otros síntomas como urticaria y vómitos, por lo que tienden a confundirse con intoxicaciones alimentarias. Los productos que mayores reacciones provocan son la leche, los huevos y el pescado. En la edad adulta este tipo de asma es menos frecuente.
- Hongos: Algunos hongos producen alergenos que se depositan en sus esporas, y la liberación de éstas depende de la humedad, la temperatura y la existencia de materia orgánica en su entorno, como basuras o cortinas de baño.
Cómo prevenirlo:
Aunque el asma no tiene cura, sí se pueden tomar una serie de medidas para prevenir una crisis. Estos son algunos consejos:
Cuando la causa del asma es extrínseca como por ejemplo una alergia, es recomendable evitar la exposición a los agentes que la originan. Los principales son el polen, los hongos ambientales, los ácaros de polvo y los pelos de algunos animales (perros, gatos, caballos y roedores comúnmente).
Otra precaución que deben tener en consideración los alérgicos es evitar realizar ejercicios intensos en época de polinización, ya que esto puede generar dificultades respiratorias que deriven en un ataque de asma.
Los enfermos de rinitis deben tener especial cuidado ya que esta enfermedad con frecuencia precede al asma. Es recomendable que el paciente se observe para detectar cualquier indicio de principio asmático.
Las personas con asma deben abstenerse completamente de fumar, puesto que el humo del tabaco es un irritante que produce inflamación de los bronquios.
Factores de riesgo:
El asma se caracteriza por la aparición de episodios de dificultad respiratoria (crisis o ataques), generalmente asociados a otros síntomas como tos, pitidos al respirar y sensación de ahogo. Los síntomas varían según la edad.
De esta manera, en los niños prevalece principalmente la tos, en especial durante la noche, mientras que en los adultos los tres principales síntomas son rigidez en el pecho, silbidos y fatiga en la noche.
En los últimos años se ha registrado una mayor prevalencia y un aumento progresivo de casos en niños y adolescentes, lo cual pone de manifiesto la necesidad de tomar medidas preventivas. La curación del asma solamente puede alcanzarse en algunos casos de asma alérgica o relacionada con el lugar de trabajo del paciente, siempre que se pueda evitar el agente causal.
Descripción general:
Balanitis es el término médico que se usa para hacer referencia a la inflamación del glande (en un hombre) o, menos frecuente, el clítoris (en una mujer).
Síntomas:
- Enrojecimiento de la zona, acompañado de escozor o dolor.
- Secreción uretral (a veces maloliente).
- Aparición de llagas rojas en el glande.
- Incapacidad a la hora de retraer el prepucio.
- Dolor al orinar.
Causas:
- Tener mala higiene.
- Adherencias en el prepucio.
- La balanitis también se puede producir por hipersensibilidad poscoital o causa traumática.
- Otra causa es el crecimiento bacteriano o micótico en una zona húmeda, dando lugar al factor infeccioso.
- Puede aparecer como resultado de una infección de transmisión sexual (ITS).
- Las alergias o el contacto con sustancias irritantes como jabones, detergentes o preservativos también pueden propiciar que aparezca la balanitis.
- Otras enfermedades: patologías sistémicas como la diabetes o el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) pueden originarla.
Cómo prevenirlo:
Se deben seguir las siguientes medidas de prevención:
- Limpieza diaria del glande y los genitales.
- Lavarse las manos antes de ir al baño.
- En caso de balanitis de repetición, los enjuagues con solución salina o los baños con manzanilla del glande y el prepucio pueden evitar la recidiva.
- El uso del preservativo durante el encuentro sexual.
- Si la pareja padece candidiasis vaginal, es recomendable suspender las relaciones sexuales hasta que la infección cure por completo.
- Seguir y completar los tratamientos farmacológicos prescritos por el especialista.
- Control de enfermedades sistémicas que predisponen a padecer balanitis, tales como la diabetes o la inmunodepresión.
Descripción general:
La bartolinitis se desencadena por una infección de las glándulas de Bartolino, localizadas a cada lado de la abertura vaginal. Son dos glándulas simétricas que están conectadas con la vagina a través de un conducto situado entre el himen y los labios menores.
Síntomas:
Puede provocar:
- Aparición de un bulto sensible a los lados de la abertura vaginal.
- Fiebre.
- Dolor durante las relaciones sexuales.
Causas:
Las causas principales de la bartolinitis son las siguientes:
- Acumulación de líquidos: sobre todo cuando hay alguna infección o proliferación de la piel que puede causar que la abertura de la glándula de Bartolino se obstruya.
- Las bacterias: pueden llegar a ocasionar la infección de algún quiste y facilitan la acumulación de pus en la región. Algunas de éstas provocan infecciones de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia pueden llegar a ocasionar esta enfermedad.
¿Cómo prevenirlo?:
No hay una forma concreta de prevenir la bartolinitis. Es importante mantener unos buenos hábitos de higiene, además de extremar las precauciones en las relaciones sexuales, usar protección y realizar chequeos frecuentes para diagnosticar infecciones de transmisión sexual.
Factores de riesgo:
Aparece normalmente en mujeres con edades comprendidas entre los 20 y los 29 años, con un perfil similar al que tienen las personas que sufren alguna infección de transmisión sexual.
Descripción general:
Enfermedad mental crónica que afecta a los mecanismos que regulan el estado de ánimo. Se manifiesta en forma de episodios recurrentes que van desde la alegría o euforia, hasta la depresión o tristeza. Estas variaciones anímicas influyen de forma significativa en los aspectos sociales, familiares, académicos o laborales de la persona afectada.
Síntomas:
El patrón sintomático no es el mismo en todas las personas con trastorno bipolar. Entre los síntomas de la etapa de alegría están:
- Aumento de energía, pensamientos y habla rápida.
- Negación de los problemas.
- Fácil distracción.
- Escasa necesidad de dormir.
- Abuso de drogas y alcohol.
- Alta deseo sexual.
- Poco control del comportamiento.
- Sentimientos excesivamente eufóricos.
Y entre los síntomas de la fase depresiva se encuentran:
- Tristeza o estar deprimido diariamente.
- Problemas para concentrarse, recordar o tomar decisiones.
- Pérdida de peso o, por el contrario, aumento de peso por el consumo elevado de alimentos.
- Fatiga.
- Baja autoestima.
- Alejarse de amigos o actividades que disfrutaba.
- Dificultad para conciliar el sueño o dormir demasiado.
- Pensamientos de muerte o suicidio.
- Sentimientos de culpabilidad.
- Sentimientos de desesperanza o pesimismo.
Causas:
Se desconoce la causa exacta que produce el trastorno bipolar, aunque se presenta con mayor frecuencia en personas que tienen familiares que padecen esta enfermedad. Todo parece indicar que esta enfermedad tiene un origen genético y biológico.
¿Cómo prevenir?:
El trastorno bipolar no se puede prevenir, no obstante hacer cambios de estilo de vida ayudará a controlar los ciclos de comportamiento. Evitar las drogas y el alcohol, rodearse de personas positivas, hacer ejercicio con regularidad, tener una alimentación saludable y dormir lo suficiente son cruciales para evitar que los síntomas empeoren.
¿Cuándo consultar?:
El diagnóstico del trastorno bipolar es exclusivamente clínico. La entrevista con el psiquiatra sigue siendo el único método disponible.
Descripción general:
Es una enfermedad causada por la bacteria Clostridium botulinum, ésta puede entrar en el organismo debido a heridas o por ingerirla a través de alimentos. Además, esta afección es poco frecuente, pero puede llegar a ser mortal si no se trata rápidamente.
Síntomas:
Los síntomas no son provocados por la bacteria, sino por la toxina que ella produce. Por lo general, se manifiestan entre 12 y 36 horas después de la ingesta. Los expertos señalan que la enfermedad incluyen los siguientes síntomas:
- Fatiga intensa.
- Debilidad.
- Vértigo.
- Visión borrosa.
- Sequedad en la boca.
- Dificultad para hablar.
- Problemas al tragar.
- Vómitos.
- Diarrea.
- Estreñimiento.
- Inflamación abdominal.
Además, puede dar lugar a debilidad en el cuello y en los brazos y, posteriormente, dañar los músculos respiratorios y los de la parte inferior del cuerpo.
Causas:
El Clostridium botulinum produce esporas que se encuentran en los alimentos mal conservados o mal enlatados. Además generan una toxina, que al ingerirla puede causar una intoxicación grave.
¿Cómo prevenirlo?:
Es muy importante mantener la higiene de todos los alimentos para evitar una intoxicación alimentaria. Asimismo, se pueden seguir unas pautas para disminuir la probabilidad de que la bacteria sobreviva, como separar los alimentos crudos y cocidos, cocer completamente los productos, mantener la comida a temperatura segura, utilizar agua potable y asegurarse de la calidad de los alimentos crudos.
Factores de riesgo:
Pueden aparecer algunas complicaciones como resultado del botulismo:
- Infecciones.
- Neumonía por aspiración.
- Debilidad prolongada.
- Presentar problemas en el sistema nervioso durante un año.
- Dificultad respiratoria.
Descripción general:
Es un tipo de arritmia, es decir, una alteración del ritmo cardiaco, que se caracteriza por una frecuencia cardiaca inferior a la normal y en la mayoría de los casos no tiene un carácter patológico. Hay dos tipos de arritmias: las rápidas (taquicardias) y las lentas (bradicardias o bradiarritmias).
Síntomas:
Muchas bradicardias son asintomáticas. Cuando causan síntomas, los más frecuentes son:
- Mareo
- Intolerancia al esfuerzo
- Confusión o pérdida de memoria
Causas:
Generalmente el fallo se produce en el propio del corazón y puede tener distintas causas:
- La degeneración progresiva del sistema eléctrico cardiaco (la más frecuente).
- Después de un infarto o una inflamación del corazón (miocarditis).
- Después de una cirugía cardiaca.
- Defectos congénitos del corazón (en niños).
Pero también puede deberse a causas ajenas al corazón, como pueden ser:
- La toma de algunos medicamentos que ralentizan el ritmo cardiaco.
- Una mala función de la glándula tiroides.
- Apnea del sueño.
- Trastornos del potasio o del calcio
¿Cómo prevenirlo?:
La mejor manera de evitar las bradicardias es promover la salud del corazón con un estilo de vida saludable. Estos son algunos de los aspectos más importantes para mantener a raya los factores de riesgo cardiovascular:
- Hacer ejercicio físico de forma habitual.
- Seguir una dieta sana y equilibrada, con un bajo contenido en azúcar, sal y grasas y rica en verdura, legumbres, fruta y cereales integrales.
- Evitar el sobrepeso y la obesidad.
- Vigilar los niveles de colesterol en sangre.
- Controlar la tensión arterial para evitar la hipertensión.
- No fumar.
- Limitar el alcohol.
- No consumir drogas.
Factores de riesgo:
Los síntomas más importantes son los mareos, que pueden aparecer antes que otros problemas graves. En caso de que se presenten, se debe consultar a un médico lo más pronto posible, especialmente si es una persona mayor o tiene alguna alteración del corazón. Una bradicardia extrema no corregida puede ser mortal si no se corrige a tiempo.
Descripción general:
Inflamación de los conductos que transportan el aire al interior de los pulmones y de ellos de nuevo al exterior, para así llevar a cabo la respiración. Estos conductos, que se conocen como bronquios y conectan la tráquea a los pulmones, al igual que son también el canal de salida de las secreciones que se forman a este nivel.
Síntomas:
La bronquitis se manifiesta habitualmente con tos, mucosidad con salida oral y, en ocasiones dificultad respiratoria como consecuencia de la reducción de la función de los bronquios. Puede acompañarse también de fiebre a partir de 38ºC.
Existen dos tipos de bronquitis de acuerdo al tiempo de duración o evolución:
- Agudas: de reciente aparición y poca duración. Los síntomas mejoran al cabo de una o dos semanas.
- Crónicas: se debe sospechar cronicidad cuando una persona padece los síntomas por más de 2 semanas consecutivas, sin presentar mejoría o cuando se evidencia evolución en ellos. En este caso debe de ser valorado por el médico y/o neumólogo.
Causas:
La causa más frecuente de las bronquitis son microorganismos que infectan y, en consecuencia, inflaman los bronquios. Los microbios responsables tienen diferente naturaleza, tales como bacterias o virus, y las encontramos en nuestro entorno diario.
El contagio se puede producir de dos maneras:
- A través del aire: al toser y estornudar. Por eso se recomienda proteger a los demás cubriendo nariz y boca en estos casos.
- A través de contacto directo con piel o superficie que contenga el microbio: por ejemplo, la mano con la hemos controlado el estornudo o la tos puede transmitir el microbio. Generalmente no somos conscientes de estos gestos cotidianos, y por esto se recomienda un constante lavado de manos.
¿Cómo prevenir?:
La prevención principalmente se enfoca en proteger la vía aérea en los ambientes fríos y cumplir las normas explicadas anteriormente para evitar el contagio. Es en épocas de invierno cuando se favorece su propagación.
Factores de riesgo:
El tabaquismo y alergias respiratorias aumentan la probabilidad de padecer bronquitis.
¿Cuándo consultar?:
En caso de presentar estos síntomas, es importante consultar de inmediato para hacer el diagnóstico pertinente y detectar el tipo de bronquitis para su adecuado tratamiento.
Descripción general:
Es una enfermedad producida por bacterias del género Brucella que afectan fundamentalmente al ganado. Sin embargo, en ocasiones puede producirse una zoonosis y que esta infección pase a transmitirse al ser humano. Las brucellas son bacterias Gram negativas.
Síntomas:
La brucelosis cursa con fiebre recurrente, escalofríos, mialgias (dolores musculares) y malestar general. Puede parecer una gripe fuerte sin síntomas respiratorios.
Causas:
La brucelosis es frecuente en zonas ganaderas, y su contagio se produce mayoritariamente por el consumo de leche de cabra o de oveja sin pasteurizar.
¿Cómo prevenirlo?:
Su prevención se realiza con estrictos controles veterinarios y con la pasteurización de los productos lácteos y sus derivados.
Factores de riesgo:
Al igual que se considera una enfermedad profesional en veterinarios y ganaderos, la brucelosis también afecta a los profesionales que trabajan en los laboratorios de Microbiología.
Descripción general:
Es un hábito o una parafunción, en el que se aprietan los dientes y se contraen los músculos de forma involuntaria, la mayoría de las veces durante el sueño, aunque también puede realizarse durante el día.
Síntomas:
Al despertar, hay dolor, tensión o signos de una contractura sobre los músculos
- Dolor de cabeza
- Dolor facial
- Desgaste de las piezas dentales
- Dolor de oído
- Inflamación de la mandíbula
Causas:
No se conocen las causas del bruxismo con certeza. Una de las teorías sobre la razón por la que aparece, se trata de un hábito que se realiza de forma inconsciente para liberar el estrés durante la noche.
¿Cómo prevenirlo?:
En personas propensas a tener bruxismo la reducción del estrés y la ansiedad con ejercicio o con técnicas de relajación pueden disminuir esta afección.
Factores de riesgo:
Aunque el bruxismo no es un problema grave puede llegar a causar lesiones dentales permanentes y dolores en la mandíbula a largo plazo.
Descripción general:
La bulimia es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza porque las personas que la padecen suelen darse atracones recurrentes en los que ingieren grandes cantidades de comida en un espacio corto de tiempo.
Síntomas:
Los síntomas típicos de un cuadro de bulimia son los siguientes:
- Debilidad
- Dolores de cabeza
- Hinchazón del rostro por el aumento de las glándulas salivales
- Problemas dentales
- Mareos
- Pérdida de cabello
- Irregularidades menstruales
- Aumentos y reducciones de peso
- Deshidratación
- Intestino irritable
- Reflujo gastroesofágico
- Hernia hiatal
- Pérdida de masa ósea
- Pancreatitis
- Atracones o sobreingesta de alimentos
- Uso de laxantes
- Baja autoestima y cambios de humor
Causas:
La bulimia es una enfermedad que nada tiene que ver con un capricho. Las pacientes suelen tener baja autoestima, dificultad en las relaciones interpersonales, inestabilidad anímica, traumas, disregulación emocional, sentimiento de vacío, entre otros, y es precisamente ese malestar lo que hace que busquen su identidad en la delgadez y de esta forma surge el cuadro clínico.
De esta forma, en el origen de esta enfermedad intervienen factores biológicos, psicológicos y sociales que desvirtúan la visión que el enfermo tiene de sí mismo. La limitación de los alimentos impuesta por el propio enfermo le lleva a un fuerte estado de ansiedad y a la necesidad patológica de ingerir grandes cantidades de alimentos.
Hasta el momento se desconoce la vulnerabilidad biológica implicada en el desarrollo de la enfermedad y son más conocidos algunos factores desencadenantes relacionados con el entorno social, las dietas y el temor a las burlas sobre el físico. Muchos de los factores coinciden con los de la anorexia, como los trastornos afectivos surgidos en el seno familiar, el abuso de drogas, la obesidad, la diabetes mellitus, determinados rasgos de la personalidad y las ideas distorsionadas del propio cuerpo.
¿Cómo prevenirlo?:
La prevención de la bulimia tiene que realizarse con un enfoque multidisciplinar para reducir los mensajes que se lanzan a la población que inciden en la pérdida de peso de forma irresponsable y engañosa y en las tallas de la ropa.
A nivel familiar conviene insistir en que las familias sigan una dieta equilibrada, y que se evite la obsesión por la dieta, el peso o la imagen corporal.
Factores de riesgo:
Los pacientes son inestables emocionalmente. Pueden mostrar otras conductas impulsivas, como las autolesiones o la compra excesiva, que muchas veces se traduce en inestabilidad emocional y de carácter e irritabilidad.
Descripción general:
Inflamación o irritación de unas bolsas llenas de líquido, llamadas bursas, que se localizan en algunos lugares donde hay puntos de roce, como los músculos, los tendones o los huesos. Su misión es ayudar al movimiento de las articulaciones y evitar fricciones entre ellas.
Síntomas:
Los más comunes son:
- Dolor articular y sensibilidad al presionar la zona que rodea a la articulación.
- Rigidez y dolor al mover las articulaciones con bursitis.
- Enrojecimiento de la zona afectada, hinchazón y en algunos casos fiebre.
Causas:
La causa principal de la bursitis es el uso excesivo de una articulación. La repetición diaria del mismo movimiento o realizar un sobreesfuerzo en las articulaciones puede provocar la aparición de la bursitis. la bursistis puede aparecer tras sufrir un traumatismo, tener una infección o como consecuencia de tener otras enfermedades, como gota o artritis reumatoide o infecciones.
Cómo prevenirlo:
El principal paso para evitar la aparición de la bursitis es evitar la realización de los movimientos repetitivos. Otras medidas que se pueden tener en cuenta es el fortalecimiento de los músculos que rodean la articulación o realizar calentamientos antes de empezar la actividad física.
Descripción general:
Son masas duras, similares a piedras, que se forman en las vías urinarias debido a alteraciones en los componentes de la orina o alteraciones en su flujo.
Síntomas:
Pueden causar dolor, sangrado, infección o bloqueo en el flujo de la orina.
Causas:
Se producen por la alteración en los componentes de la orina, en la que las sustancias que forman cristales son superiores a la capacidad que tienen los líquidos para diluirla.
¿Cómo prevenirlo?:
Mantenerse bien hidratado, adecuado consumo de líquido diario, hacer ejercicio físico con regularidad. Disminuir consumo de frutos secos como nueces y maní, así como disminuir el consumo de sal.
Factores de riesgo:
Se asocia al bajo consumo de líquido durante el día y situaciones que lo expongan a deshidratación como estar mucho tiempo al sol, ejercicio o trabajo sin adecuada hidratación. También hay un componente familiar importante. La obesidad y el alto consumo de sal contribuyen.
Detectar la enfermedad:
Se sospecha con los síntomas del paciente ya mencionados. Hay exámenes imagenológicos como el UroTAC que nos confirman la presencia, características y localización de los cálculos.
¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico. Si presenta un dolor muy intenso, fiebre (temperatura mayor a 38.3°C), salida de sangre en la orina, múltiples episodios de vómito debe asistir al servicio de urgencias.
También llamado tumor maligno. Es la enfermedad que consiste en la rápida multiplicación de las células SIN NINGÚN CONTROL, la cual va llevando a la formación de una o varias masas dentro del órgano de origen, que progresivamente va afectando la función de este y posteriormente es capaz sembrarse en otros órganos (metástasis) y afectar también su funcionamiento.
Célula: unidad anatómica y funcional básica que forma cada uno de los tejidos del cuerpo humano.
Descripción general:
El cáncer colorrectal es un crecimiento incontrolado de las células del colon y / o del recto. La mayoría de estos comienzan como un crecimiento en el revestimiento interno del colon o del recto, que recibe el nombre de pólipo. Pueden originarse en cada una de las tres capas del colon: mucosa, muscular y serosa.
Síntomas:
- Diarrea y, en otros, estreñimiento.
- Sangre en las heces.
- Dolor o molestias abdominales.
- Pérdida de peso sin causa aparente.
- Pérdida de apetito y cansancio.
Causas:
- Dieta : El cáncer de colon parece estar asociado a dietas ricas en grasas y pobres en fibra.
- Herencia : En el cáncer de colon desempeña un importante papel la genética, ya que existe la posibilidad de que se transmita hereditariamente y predisponga a la persona a sufrir la enfermedad. Sin embargo, esto puede detectarse y permitir tratar el cáncer de manera precoz.
- Historial médico : Se ha demostrado que quienes tienen una mayor predisposición a padecer esta enfermedad son las personas que tienen o han tenido pólipos (crecimiento benigno) de colon o recto, colitis ulcerosa (enfermedad inflamatoria intestinal), cáncer de mama, útero u ovarios.
- Estilo de vida : Existen ciertos factores que dependen del estilo de vida y que predisponen a la aparición del cáncer de colon, como, por ejemplo, la obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
Cómo prevenirlo:
Algunos hábitos poco saludables también pueden influir en la aparición de la enfermedad, de manera que se recomienda:
- No abusar del alcohol ni del tabaco
- Controlar el sobrepeso
- Alimentación saludable y dieta equilibrada.
Factores de riesgo:
Otra de las causas de la aparición del cáncer de colon es la predisposición genética que tenga la persona. Esto se debe a diversas alteraciones en genes determinados, por lo tanto, los individuos con familiares que tienen o han tenido esta patología deben acudir a exámenes médicos periódicamente.
Descripción general:
Es un tipo de cáncer que se desarrolla en el cuello del útero por estrecha relación con la infección por virus del papiloma humano, que se adquiere durante las relaciones sexuales. Siendo uno de los cánceres mas frecuentes en mujeres y que se presenta en la mayoría de los casos en población vulnerable y con pobre acceso a los servicios de salud.
Síntomas:
Inicialmente puede no tener síntomas (asintomático), pero a medida que avanza pueden empezar a aparecer. Los síntomas mas frecuentes están relacionados con el sangrado anormal y especialmente sangrados entre las menstruaciones y los que se presentan durante las relaciones sexuales (sinusorragia), como también flujos vaginales anormales o mal olientes. Aquí es muy importante resaltar las citologías y test virales porque pueden ayudar a detectar las lesiones premalignas que aún no dan ningún tipo de síntomas y tratarlas a tiempo antes de desarrollar un cáncer.
Causas:
La causa básica es la adquisición durante las relaciones sexuales de ciertos tipos de virus de papiloma humano, que persisten dentro de las células y provocan cambios en el cuello uterino desarrollando posteriormente lesiones premalignas y por último el cáncer.
¿Cómo prevenir?:
Existe en Colombia, en el programa ampliado de inmunizaciones la disponibilidad de la vacuna contra el virus del papiloma humano a partir de los 9 años de edad, bajo la campaña “Que vivan las mujeres, que viva la vida” la que ofrece una opción segura como método de prevención de la infección. Otra estrategia es la de tamización con el uso de la citología cervicovaginal y el test de Papiloma Virus Humano, de acuerdo a la edad de cada paciente y que permite detectar lesiones antes de que se conviertan en cáncer. Y por último y no menos importante como método de prevención los cambios en el comportamiento sexual evitando la promiscuidad (varios compañeros sexuales), usando preservativos durante las relaciones sexuales, evitando fumar ya que ésto evita la persistencia de la infección, entre otros.
Factores de riesgo:
Promiscuidad (elevado número de compañeros sexuales), fumar, tener muchos hijos, inicio temprano de la vida sexual, uso de anticonceptivos orales, historia de enfermedades de transmisión sexual previa, supresión del sistema inmune como les ocurre por ejemplo a las personas infectadas por el VIH, no asistir a programas de tamización de sus EPS, no estar vacunado
Tips para lograr detectar la enfermedad:
Participar de los programas de prevención de su EPS, es muy importante; haciéndose citologías o test enviados por su médico y reclamando los resultados, para así detectar la enfermedad en un estado premaligno y prevenir la aparición del cáncer (maligno).
Cuando consultar a un especialista:
La consulta especializada es muy importante si aparece algunos de los síntomas mencionados arriba o si hay una alteración citológica o de los test de DNA de Papiloma virus humano, ya que el médico determinará los exámenes adicionales para detectar las lesiones en etapas tempranas de la enfermedad y así poder ofrecer un tratamiento con intención curativa de las mismas.
Hay que resaltar que la única manera de prevenir éste cáncer es hacer conscientes a las personas de sus riesgos y de la posibilidad que tienen de consultar a su médico para ser evaluadas y de ser necesario hacer los tratamientos que se requieran y que todo ésto está incluido dentro de su sistema de salud en Colombia sin ningún costo y que representa un derecho de la paciente que no debe tener limitaciones de ningún tipo.
Descripción:
Es el cáncer originado en el pancreas (glándula del cuerpo que se encuentra detrás del estómago). En general, nos referimos al cáncer exocrino pancreático el cual es el subtipo más frecuente. Por lo general es un cáncer muy agresivo por su rápido crecimiento y compromiso de otros órganos (metástasis).
Síntomas:
- Dolor en el abdomen superior ("boca del estomago") y que se va hacia la espalda.
- Pérdida de peso.
- Pérdida del apetito.
- Cansancio.Color amarillo de los ojos y la piel (Ictericia).
- Orina muy oscura.
- Materia fecal mas clara o blanca.
- Diarrea.
- Nauseas y vomito.
Causas:
Aun no está claro la causa del desarrollo del cáncer de páncreas.
Se han encontrado varios factores de riesgo: Historia de alcoholismo, tabaquismo, diabetes, pancreatitis crónica, obesidad, edad avanzada, sexo masculino, sedentarismo, antecedentes familiares de cáncer de páncreas y de síndromes genéticos.
¿Cómo prevenir?:
Modificar los estilos de vida no saludables: Dejar de fumar, realizar actividad fisica regular en la semana, bajar de peso en caso de sobrepeso u obesidad y preferir una dieta rica verduras, frutas y alta en fibra.
Tips para detectar la enfermedad:
Desafortunadamente en el cáncer de páncreas los síntomas se presentan cuando la enfermedad está en una etapa tardía y no está demostrado que existan estudios de rutina que ayuden a realizar un diagnóstico de cáncer de páncreas de manera temprana.
¿En qué momento consultar a un especialista?:
Inmediatamente el paciente debe solicitar evaluación antes la presencia de los anteriores síntomas relacionados y la sospecha o diagnóstico confirmado de un tumor pancreático.
El cáncer de piel es uno de los tipos de cáncer más frecuentes
Existen varios tipos:
- Carcinoma Basocelular
- Carcinoma Escamocelular
- Melanoma
- Carcinoma de Células de Merkel.
Generalmente se presenta en las zonas del cuerpo expuestas a la radiación ultravioleta proveniente de los rayos del sol.
Usualmente se manifiesta como una mancha o un nódulo (bolita) en la piel que crecen o que se ulceran sin sanar; ante lo cual se recomienda una consulta oportuna al Dermatólogo, quien probablemente le realice una biopsia de la zona sospechosa.
Si la biopsia confirma el diagnóstico de cáncer de piel, y este presenta características de agresividad, el Dermatólogo le indicará la necesidad de una consulta por el Cirujano de Tumores de Tejidos blandos.
Lo más importante en el cáncer de piel es prevenirlo. Por eso, incluso las personas que lo han tenido, deben tomar conciencia para aprender a cuidar su piel y enseñarle a sus seres queridos desde una temprana edad.
Procedimientos en cáncer de piel
El Cirujano de Tejidos Blandos es el especialista idóneo en el diagnóstico y manejo del cáncer de piel agresivo. En estos casos se requiere una cirugía compleja con técnicas especiales.
Inicialmente se utilizan técnicas de biopsia para evaluar el lunar sospechoso o el tumor de la piel. Así, es posible saber si se trata de un verdadero cáncer de piel.
- Biopsia con Sacabocado (Punch)
- Biopsia Abierta
- Biopsia con Aguja Fina (ACAF) a ganglios sospechosos
- Biopsia de Ganglio Centinela
Las técnicas de cirugía utilizadas para tratar el cáncer de piel, incluyen:
- Resección Local Amplia : en Tronco y Extremidades
- Resección tumoral con Salvamento de Extremidad
- Vaciamiento Ganglionar (Linfadenectomía) Epitroclear, Axilar, Poplíteo, Inguinal, Femoral, Iliaco y Obturatriz.
- Amputación o Desarticulación oncológicamente planeada.
Prevención del cáncer de piel
El riesgo de cáncer de piel lo tenemos todos en la vida diaria. No sólo está en un paseo a la playa o en un día de piscina, también hay que considerarlo en el trabajo al aire libre, en una caminata soleada, en un día de paseo o en un día de picnic… en todas estas situaciones debemos aprender a protegernos para cuidar bien de nuestra piel.
El mayor factor de riesgo relacionado con la aparición del Cáncer de Piel es la exposición solar desde la infancia.
Debemos procurar proteger nuestra piel y la de nuestros hijos, sobrinos y nietos de la siguiente manera:
- Evite exponerse a la luz solar directa entre las 9am y las 4pm.
- Procure resguardarse bajo la sombra cuando se practican actividades y desplazamientos al aire libre.
- Si no hay sombra, use sombrero que proteja la cara, orejas y cuello, además de camisa manga larga y pantalones.
- El uso de protector solar es un adicional a las 3 recomendaciones anteriores, pero NO las reemplaza. Si lo va a usar se recomienda que sea de amplio espectro (rayos ultravioleta A y B) y con Factor de Protección Solar (FPS) mínimo de 30.
- Evite usar cámaras de bronceo.
Un diagnóstico de cáncer de seno siempre será importante, porque implica un gran impacto en todos los ámbitos de la vida, pero puede ser curable o tratable con muy buenos resultados si se detecta en etapas tempranas, y en manos de un equipo médico calificado.
Existen múltiples opciones de tratamiento, “siempre habrá algo por hacer”, y esto depende de la etapa en la que el cáncer es diagnosticado. También influyen en esta decisión, el comportamiento del tumor, las características de la paciente y sus necesidades personales.
El manejo estará a cargo de un equipo conformado por varias especialidades médicas y puede incluir:
- Cirugía
- Quimioterapia
- Radioterapia
- Terapia Hormonal
- Apoyo psicológico
- Rehabilitación
El caso de cada paciente es diferente. No existe un tratamiento de cáncer de seno idéntico a otro.
Siempre será necesario hacer un plan personalizado, que se traza de forma cuidadosa en la evaluación médica . Todas las decisiones que conforman este plan las tomamos conjuntamente en la consulta.
*Fuente: Instituto Nacional de Cancerología. Anuario estadístico 2012. Vol 10. 2015.
Los principales síntomas mamarios por lo que consulta una mujer, y en ocasiones hombres, son:
- Dolor mamario (Mastalgia)
- Percepción de una o varias masa(s) en la región mamaria
- Secreción de líquido (Telorrea/Telorragia)
- Cambios en la piel
Estos hallazgos no siempre se tratan de una condición maligna. En el caso de sentir alguna molestia en sus senos, aconsejo consultar al Cirujano de Mama/Mastólogo, para recibir una evaluación adecuada.
En esta consulta, teniendo en cuenta los síntomas, el examen físico y las pruebas ya realizadas, podremos definir el origen benigno o maligno de un modo correcto y así decidir el tratamiento apropiado. Si es necesario, pueden realizarse imágenes más especializadas o procedimientos como la biopsia, cuando sea necesario para aclarar el origen.
Siempre será posible aclarar todas esas dudas y preocupaciones.
Aun la más sencilla de las dudas, vale la pena ser resuelta. La claridad siempre trae tranquilidad.
Es frecuente que se encuentren alteraciones en la mamografía o en la ecografía mamaria, las cuales generan gran ansiedad por el temor a un cáncer, sin embargo no siempre se tratan de un hallazgo maligno.
Los resultados de las imágenes diagnósticas no hacen un diagnóstico por sí solos, y siempre necesitan ser interpretados por un experto, junto con los hallazgos clínicos. La persona indicada para eso es un Cirujano de Mama/Mastólogo, quién la ayudará a decidir el mejor manejo para cada caso en particular.
Las imágenes diagnósticas de la mama, incluyen:
- Mamografía
- Ecografía mamaria
- Resonancia Magnética de la mama
- Tomosíntesis
La calidad y correcta interpretación de las imágenes diagnósticas de la mama, dependen de:
- Calibración de los equipos
- Técnica para la toma de las imágenes
- Radiólogo con amplia experiencia en imágenes de la mama
- Proceso de auditoría y evaluación de la calidad de los reportes
- La unidad de ayudas diagnósticas del Hospital Pablo Tobón Uribe, de la ciudad de Medellín, cuenta con todas estas características.
Procedimientos de mama
El Cirujano de Mama /Mastólogo, es el especialista calificado para el correcto abordaje de las condiciones benignas y malignas que afectan la glándula mamaria, tanto en mujeres como en hombres.
El manejo de los tumores del seno, requiere algunas veces procedimientos para identificar con claridad un diagnóstico, benigno o maligno.
- Biopsia con Aguja Fina (ACAF)
- Biopsia con Aguja Gruesa (Aguja Trucut)
- Biopsia con Sacabocado (Punch)
- Biopsia Abierta
- Biopsia de Ganglio Centinela
Si es necesario, para el tratamiento se programa una cirugía. Existen muchas técnicas diferentes en cirugía, que varían según el tipo de tumor, su ubicación y el estado avanzado en el cáncer de seno.
Resección de Conductos Terminales
- Cuadrantectomía o Cirugía Conservadora del seno (con Técnicas de Cirugía Oncoplástica)
- Cuadrantectomía guiada por Arpón
- Mastectomía Simple
- Mastectomía Radical Modificada
- Reconstrucción Mamaria
- Vaciamiento Ganglionar de la Axila o Linfadenectomía Axilar
Autoexamen:
Toda mujer debe conocer tan bien sus senos, al punto que en el mismo momento de encontrar alguna alteración sospechosa, pueda alarmarle a consultar de inmediato.
Esta puede ser la pista mas importante para detectar un cáncer a tiempo. Si el cáncer de seno se diagnostica cuando está pequeño puede ser muy tratable e incluso curable.
¿Desde que edad se inicia el autoexamen mensual de seno?
El autoexamen debe iniciarse alrededor de los 15 años como una forma de autoconocimiento.
Esta es una edad temprana para pensar en cáncer, pero su realización frecuente desde entonces le permitirá a cada mujer conocer la “normalidad” de sus senos, y reconocer alguna anormalidad, para consultar oportunamente.
¿Cuándo se debe realizar el autoexamen?
En mujeres en edad fértil, debe realizarse cada mes, en el mismo día del ciclo menstrual, para que no sea variable por las hormonas. El mejor momento para ello es una semana después, desde el primer día de la menstruación.
¿Qué se siente?
Las senos en su interior están formados principalmente por grasa y glándulas. Es por esto que al palparlos es completamente normal percibirlos “llenos de bultos o nodulitos”, todos ellos blandos y que no cambian en el tiempo.
La composición del seno de cada mujer es distinto, dependiendo de su edad, contextura y raza.
La importancia del autoexamen consiste en que cada mujer con el tiempo llega a conocer perfectamente la consistencia de sus senos, con sus propias variaciones, permitiéndole detectar a tiempo la aparición y crecimiento de un tumor, que cuando es palpable se percibe como una pequeña masa o nódulo duro al tacto (en ocasiones se describe como la consistencia de un “frijol crudo”).
¿Cuándo debe consultar al médico?
Ante cualquier molestia o alteración relacionada con la mama o durante su examen, a cualquier edad, se recomienda consultar al médico de inmediato.
La alteración puede ser cualquiera de estas:
Cambio en la piel del contorno, la areola o el pezón: engrosamiento, enrojecimiento, oscurecimiento o descamación.
Retracción u hoyuelos en la piel
Cambio en la forma o tamaño del seno
Secreción espontánea por el pezón (sin haberlo comprimido)
Nódulo
Se recomienda a las mujeres mayores de 40 años, solicitar a sus médicos la realización del examen clínico de la mama por lo menos una vez al año, y en el evento que se detecte alguna lesión sospechosa sean remitidas de manera inmediata a un sistema de diagnóstico y manejo por un especialista en enfermedades de la mama (Especialista en Cirugía General, Ginecología o Cirugía de Mama/ Mastología).
¿Cómo se realiza el autoexamen?
Lo importante con el autoexamen es que cada mujer pueda observar y palpar la totalidad de ambos senos y axilas, en el orden y posición en que cada una se sienta mas cómoda, logrando su fácil repetición cada mes.
Algunos consejos son:
Observe sus senos frente al espejo.
La palpación puede hacerla acostada, pues el tejido se extiende y facilita la palpación, o en la ducha donde los dedos con el jabón se resbalan más fácilmente.
Usando los 3 dedos centrales de la mano, haciendo círculos comprima cada zona del seno contra sus costillas
Sólo hágalo 1 vez al mes.
Las mujeres que tienen implantes de silicona con fines estéticos, pueden realizarse su autoexamen de igual manera, pues los implantes siempre se ubican por detrás de la glándula mamaria, sin interferir en la percepción táctil de la mama.
Mamografía
La mayoría de mujeres en Colombia nunca tendrán un cáncer de seno. Sin embargo, desde el punto de vista médico es el cáncer mas frecuente en las mujeres. Por esto, todos los esfuerzos deben ir dirigidos a diagnosticarlo en etapas tempranas.
Buscando este diagnóstico temprano, es que recomendamos realizar el autoexamen mensual, el examen médico anual de los senos, y también la mamografía.
En general, las mujeres sanas y sin historia de cáncer de seno en su familia, deben realizarse la mamografía a partir de los 50 años de edad, repitiéndola cada 2 años hasta cumplir los 70 años de edad.
Por el contrario, cuando existan síntomas o hallazgos anormales al examen de la mama que hagan sospechar la presencia de un tumor, se debe consultar al médico y realizar estudios diagnósticos como la mamografía o la ecografía, independientemente de la edad
La mamografía debe ser realizada en un lugar con experiencia en imágenes de la mama, con equipos adecuadamente calibrados y con radiólogos con amplia experiencia en la interpretación de los estudios mamarios. En el Hospital Pablo Tobón Uribe, de la ciudad de Medellín, se cuenta con todas estas características.
El cáncer infantil es un grupo de enfermedades malignas, que representa una de las principales causas de mortalidad infantil en todo el mundo. Sin embargo, gracias a los avances de la ciencia, si se hace un diagnóstico oportuno, los tratamientos que existen en la actualidad tienen la posibilidad de ofrecer a este grupo de niños una expectativa de curación cercana al 80%.
Los niños pueden presentar cáncer en diferentes órganos o sistemas del cuerpo; entre los más frecuentes se encuentran:
Leucemias: se refiere a cáncer en la sangre
Linfomas: se refiere a cáncer en los ganglios linfáticos, que están presentes en muchas partes del cuerpo como el cuello, el tórax o el abdomen.
Tumores del sistema nervioso central: se refiere a cáncer en el cerebro
Tumores en los riñones
Tumores en los huesos o en los músculosTumores dentro de los ojos
Tumores en el hígado
Tumores en la piel
El cáncer en niños no tiene predilección de edad ni de género; se puede presentar inclusive desde el nacimiento, durante toda la niñez, y en la adolescencia, y se presenta por igual en niñas y en niños. Tampoco tiene predilección de raza ni de condición social, se presenta en niños de cualquier procedencia étnica y de cualquier nivel socioeconómico.
Los síntomas más frecuentes son:
Fiebre (temperatura axilar mayor a 38 grados) que sea persistente, es decir, que se prolongue más allá de lo esperado para las enfermedades comunes de los niños.
Dolor de cabeza, que sea muy fuerte, que despierte al niño en la noche, que se acompañe de vómito o cambios en la conducta (alteraciones visuales, lenguaje incoherente, disminución de la fuerza en algún lado del cuerpo, etc).
Palidez, fatiga y cansancio
Mancha blanca en uno o ambos ojos
Bolas en el cuello, axilar e ingle, y en cualquier parte del cuerpo.
Que se le palpe una bola o masa en el abdomen
Pérdida de peso
Mareo
Bizcos
Moretones o puntos rojos en la piel, especialmente en sitios donde normalmente no sufren golpes como el pecho, la espalda, o los brazos.
Sudoración abundante, en la noche, que moje la ropa o las sábanas de la cama
Dolor en los huesos o en las articulaciones
Tropezones y/o caídas frecuentes.
Secreción persistente por el oído.
Dolor de espalda o tortícolis.
Causas:
Desafortunadamente, en la mayoría de los casos de cáncer infantil no se conoce una causa. Algunos niños nacen con síndromes o condiciones genéticas que los predisponen a tener mayor riesgo de cáncer, como es el caso del Síndrome de Down, entre otros; sin embargo, estos casos representan menos del 5% de los cánceres infantiles. Otros factores de riesgo son: que el niño previamente haya recibido radioterapia o quimioterapia por cualquier causa, que haya estado expuesto a radiación nuclear, algunas infecciones virales (como por ejemplo el VIH), que sufras de enfermedades como inmunodeficiencias congénitas, o la exposición a pesticidas.
Existen muchos mitos alrededor del cáncer infantil. Frecuentemente se le asocia a una comida específica, a haber recibido un golpe, una caída o un castigo. Todo esto es falso. Tampoco se ha comprobado que la exposición a fuentes de radiación no-ionizante (como la que producen electrodomésticos como los microondas, los celulares y las “tablests”) sea factor de riesgo para cáncer infantil.
Prevención:
El cáncer infantil no es prevenible, pero se puede detectar a tiempo, y de esta manera comenzar un tratamiento oportuno que pueda ofrecerle al niño mejor expectativa de sobrevivir a la enfermedad.
Cuando consultar a un especialista:
En caso de presentar alguno de los signos o síntomas de alarma mencionado, y en general, cualquier síntoma que se prolongue más allá de lo esperado, debe ser evaluado por un Médico para evaluación completa y definir si requiere estudios en búsqueda de un posible cáncer y/o remisión a un centro especializado.
Si la evaluación inicial por un Médico o Pediatra, arroja la posibilidad de un cáncer infantil, es mandatorio que el niño sea evaluado por un especialista en Oncología pediátrica.
Descripción general:
El carcinoma hepatocelular (CHC) o hepatocarcinoma es un cáncer del hígado que constituye el 80-90% de los tumores hepáticos malignos primarios. Su incidencia es más frecuente en los hombres que en las mujeres, generalmente en personas entre los 50 y los 60 años de edad.
Síntomas:
Habitualmente el hepatocarcinoma no presenta síntomas. Puesto que la mayoría de ellos se desarrollan sobre un hígado cirrótico, el paciente puede padecer los síntomas propios de la cirrosis.La descompensación de un cirrótico debe hacer pensar en la aparición de un hepatocarcinoma entre otras causas de descompensación. Un porcentaje mínimo de pacientes, cuyo hepatocarcinoma se desarrolla sobre un hígado sano, puede presentar síntomas inespecíficos del tipo dolor, pérdida de peso, masa palpable.
Causas:
Las causas de hepatocarcinoma son aquellas que pueden producir una cirrosis hepática (infección por el virus de la hepatitis C, alcoholismo, hemocromatosis, etc). Además, en caso de infección por el virus de la hepatitis B (VHB) no es necesario ni siquiera que exista cirrosis. Existe una coincidencia geográfica entre las áreas de alta incidencia de carcinoma hepatocelular y las zonas con una gran tasa de penetración del VHB. Además, la prevalencia de marcadores de infección por VHB en pacientes afectados por este tipo de cáncer es más elevada que en la población general, si bien esta diferencia se atenúa cuando el tumor se localiza sobre un hígado no cirrótico o cuando se compara con la observada en pacientes con cirrosis, enfermedad sobre la que usualmente se asienta el tumor.
Factores de riesgo:
Los pacientes que tiene cirrosis por el consumo excesivo de alcohol. La hepatitis crónica por virus C (cirrosis por virus C), la hepatitis crónica por virus de la hepatitis B y o infección crónica mixta por virus de la hepatitis B y virus de la hepatitis D.
Descripción general:
Aparición de circulación venosa en la pared abdominal por a una elevada presión en el sistema venoso portal, formado por la vena porta, a su vez formada por las venas mesentéricas superior e inferior y la vena esplénica.
Es una enfermedad asintomática.
Causas:
Elevada presión en el sistema venoso portal por obstrucciones agudas o crónica.
Cómo prevenirlo:
Control médico de las causa desencadenantes.
Factores de riesgo:
Enfermedades hepáticas agudas o crónicas y obstrucción del flujo de la vena porta
Tips para prevenirlo:
Examen físico adecuado.
Descripción general:
Fibrosis que afecta al tejido hepático como consecuencia final de diferentes enfermedades crónicas.
Síntomas:
En muchos casos, el diagnóstico de la cirrosis es casual, puesto que como se ha dicho, en la fase compensada de la enfermedad sus manifestaciones pueden ser poco aparentes. O cuando se desarrollan la complicaciones mayores que son asctis. Encefalopatía, hemorragia por varices o peritonitis espontanea
Causas:
El consumo excesivo de alcohol. La hepatitis crónica por virus C (cirrosis por virus C), la hepatitis crónica por virus de la hepatitis B y o infección crónica mixta por virus de la hepatitis B y virus de la hepatitis D.
Cómo prevenir:
-Evitar el consumo de alcohol.
-Moderar el consumo de sal de mesa (cloruro de sodio).
-Consultar a un médico por si existe una enfermedad hepática crónica silente que pueda llegar a producir cirrosis.
-Si un paciente sabe que tiene alguna enfermedad hepática, debe consultar periódicamente con su médico por si es una enfermedad tratable, cuya progresión se pueda evitar (enfermedad alcohólica o hepatitis B o C, por ejemplo).
-Evitar el consumo de medicamentos o sustancias tóxicas para el hígado.
-No tener prácticas sexuales de riesgo.
-No compartir agujas o jeringas con otras personas.
-Vacunación en el caso de la hepatitis B, por ejemplo.
Factores de riesgo:
El consumo excesivo de alcohol. La hepatitis crónica por virus C (cirrosis por virus C), la hepatitis crónica por virus de la hepatitis B y o infección crónica mixta por virus de la hepatitis B y virus de la hepatitis D.
Le recomendamos visitar a un especialista si se tienen alguno de los factores de riesgo.
Esta subespecialidad quirúrgica, trata aquellas afecciones tumorales benignas y malignas que afectan el área anatómica que comprende de la base de cráneo a la región superior a las clavículas. Comprende la nariz , los senos paranasales, faringe, cavidad oral, laringe, esófago superior, tiroides, paratiroides (Glándulas pequeñas que están en contacto con la tiroides) Glándulas de la saliva (Parótida y submaxilar), piel de la cara y ambos cuellos.
Los síntomas más comunes que presenta un paciente que consulta a cabeza y cuello son muchas veces relacionados con el área anatómica descrita.
SÍNTOMAS MÁS COMUNES
Área anatómica |
Síntomas más comunes/comentarios |
Senos paranasales |
Obstrucción nasal, sangrado, masa que sale por fosa nasal. Crecimiento progresivo comprometiendo estructuras vecinas como la orbital encía, paladar, mejilla, etc. |
Nariz |
Obstrucción nasal, masa que protruye por fosa nasal sangrado |
Cavidad Oral |
Ulcera en lengua que progresa, sangrado, crecimiento de amígdalas. Importante conocer si el paciente es fumador |
Faringe |
Dolor y dificultada para tragar, sangrado. Importante conocer si el paciente es fumador. Dolor de oído sin explicación aparente en adulto |
Laringe |
Cambios en la voz, tos ocasional. Importante conocer si el paciente es fumador. Dolor de oído sin explicación aparente en adulto |
Esófago |
Dificultad para pasar los alimentos. Importante conocer si el paciente es fumador |
Tiroides |
Masa o abultamiento en región inferior y media del cuello. Menos del 5 a 7% de estas serán malignos. |
Paratiroides |
Por lo general requiere exámenes médicos para su estudio. Muy raros los tumores malignos de esta glándula. |
Glándulas de la Saliva (Parótida y Submaxilar) |
Masa o abultamiento anterior a la oreja o parte inferior y media de la mandíbula de crecimiento lento y progresivo |
Piel |
Ulcera que no sana. Exposición prolongada al sol por mucho tiempo, sin protección. |
Cuellos |
Masa o abultamiento de crecimiento lento y progresivo. Por lo general indolora, se puede asociar a otros hallazgos como ulcera en lengua, dificultad para tragar, cambios en la voz, etc. |
Otros Paraganglioma o Schwannoma |
Son por lo regular tumores por regular benignos que se desarrollan en la arteria carótida o los nervios del cuello. Su principal manifestaciones masa de crecimiento lento |
Lipoma |
Tumor benigno que se origina en el tejido graso del cuerpo, Crecimiento lento |
Muchos de los tumores malignos del tracto Aero digestivosuperior (faringe, cavidad oral, laringe y esófago) están relacionados con el habito del tabaquismo/ cigarrillo y en menor grado con el consumo exagerado de bebidas alcohólicas. El no fumar es la principal herramienta que podemos controlar para evitar este tipo de tumoraciones
Salvo la exposición a fuentes de radiación de forma aguda y masiva (como los ocurridos en Chernóbil – Ucrania y Fukushima Japón) no se conoce un factor claro en el desarrollo de la mayoría de los s tumores malignos de la glándula tiroides.
Sin lugar a dudas, la exposición continua y sin protección a los rayos solares permitirá que se desarrollen en el largo plazo tumores malignos de piel, los cuales, si son detectados en forma temprana, tienen un buen pronóstico.
Es importante que tan pronto como una persona desarrolle alguno de los síntomas enunciado como son cambios de voz o ulcera en la lengua en un paciente que no sana busque evaluación de forma temprana. Igualmente, si se observa o palpa una masa en cuello, en la región anterior del oído o inferior y media del cuello el paciente consulte a su médico.
Es claro que aun así el diagnóstico sea un tumor maligno, si se logra detectar la enfermedad en sus estadios iniciales, el tratamiento será más conservador y la recuperación y sobrevida serán mucho mejor que si se diagnostica la tumoración en estado muy avanzado, lo cual reduce significativamente la posibilidad de ofrecer una oportunidad de control de la enfermedad y aun curación de la misma.
Descripción general:
La cistitis engloba diferentes enfermedades infecciosas (producidas por un microorganismo o germen) que afectan a cualquier parte del sistema urinario (riñón, uréteres, vejiga urinaria o uretra).
Síntomas:
Los síntomas más comunes de la cistitis son:
- Necesidad urgente y frecuente de orinar.
- Picazón o quemazón en la uretra al orinar.
- Enrojecimiento de la vulva y picor vaginal (en las mujeres).
- Dolor al orinar y al mantener relaciones sexuales.
- Color turbio, lechoso (espeso) o anormal de la orina.
- Aparición de sangre en la orina.
- Fiebre y escalofríos (la fiebre puede significar que la infección ha alcanzado los riñones).
- Vómitos y náuseas.
- Dolor en el costado o en la espalda (indica la presencia de una infección en los riñones).
- A menudo, las mujeres sienten una ligera presión por encima del hueso púbico y muchos hombres sienten una dilatación del recto.
Causas:
La cistitis está provocada por la invasión de microorganismos en el tracto urinario. Puede producirse por dos vías diferentes: por el extremo inferior de las vías urinarias (abertura en la punta del pene o de la uretra, según se trate de un hombre o de una mujer), que es el caso más frecuente; o bien a través del flujo sanguíneo, en cuyo caso la infección afecta directamente a los riñones.
¿Cómo prevenirlo?:
- No retener la orina.
- Beber agua de forma habitual, al menos dos litros diario.
- Orinar después de cada coito para eliminar posibles agentes infecciosos.
- Evitar la ducha vaginal como método para reducir la posibilidad de embarazo.
- Cambiarse el bañador después de cada baño y evitar el frío en la zona.
- Tener precaución con algunos preservativos, cremas espermicidas o el diafragma, ya que no son recomendables para personas propensas a padecer infecciones urinarias.
- Utilizar cremas lubricantes durante las relaciones sexuales.
- Llevar ropa con tejidos naturales. Las prendas ajustadas y fabricadas con fibras sintéticas contribuyen al desarrollo de cistitis. Por lo tanto, es mejor optar por materiales que permitan la transpiración, como el algodón.
- Corregir el estreñimiento por la proximidad del colon con el aparato urogenital, lo que facilita la infección de orina por contigüidad.
- En mujeres embarazadas debe hacerse un cribado sistemático de infecciones de orina durante todo el embarazo. Las infecciones no tratadas pueden fomentar los partos prematuros y el bajo peso al nacer.
- En el caso de los bebés y niños, es importante cambiar los pañales de forma frecuente, así como instruir a los niños sobre los hábitos higiénicos que deben realizar después de orinar o defecar.
Factores de riesgo:
Entre los factores de riesgo para que surja una cistitis recurrente destaca que haya o se haya dado:
- Incontinencia urinaria.
- Cirugía urogenital previa.
- Patología urológica (cálculos, procesos que produzcan obstrucción, prostatitis crónica, vejiga caída, sondaje permanente etc.).
- Presencia de diabetes mellitus o enfermedades neurológicas (lesión medular, esclerosis múltiple, ictus, etc.)
- Antecedentes de ITUs en la infancia, o en mujeres con antecedente de ITU en la madre o haber tenido ITUs antes de la menopausia.
- Las personas que se automedican o no cumplen las pautas de tratamiento como ha indicado el profesional sanitario, corren el riesgo de infecciones difíciles de erradicar por la aparición de gérmenes resistentes a los antibióticos.
Descripción general:
La cirrosis biliar primaria o colangitis biliar primaria es una enfermedad hepática autoinmune que afecta principalmente a mujeres en la edad media de la vida. La enfermedad se caracteriza por producir colestasis, es decir, disminución de la excreción de la bilis.
Síntomas:
Los síntomas más frecuentes son prurito, fatiga ictericia y heces hipopigmentadas.
Causas:
La causa exacta de la colangitis biliar primaria se desconoce. Se cree que existen factores genéticos y ambientales que inducen a células del sistema inmune (linfocitos T) a atacar los conductos biliares intrahepáticos, llevando a su destrucción progresiva.
¿Como prevenir?:
Estudio adecuado a los pacientes con prurito, fatiga ictericia y heces hipopigmentadas.
Factores de riesgo:
Padecer de otras enfermedades autoinmune.
Descripción general:
La colangitis esclerosante primaria es una enfermedad inflamatoria progresiva de los conductos biliares de origen autoinmune. La enfermedad se asocia habitualmente a colitis ulcerosa: Hasta un 90% de los pacientes con colangitis esclerosante primaria tienen colitis ulcerosa. Menos frecuentemente puede asociarse a enfermedad de Crohn.
Síntomas:
La colangitis esclerosante primaria puede no presentar síntomas por largos períodos de tiempo. Las manifestaciones incluyen:Fatiga, Prurito (picazón), Pigmentación de la piel, Ictericia, dolor abdominal, Esteatorrea y déficit de vitaminas liposolubles.Ascitis, Várices esofágicas y estomacales.
Causas:
La causa exacta se desconoce. Se cree que existen factores genéticos y ambientales que inducen a células del sistema inmune (linfocitos T) a atacar los conductos biliares intra y extra hepáticos, llevando a su destrucción progresiva.
Como prevenir:
Vigilancia de los pacientes con Colitis ulcerativa y enfermedad de Crohn.
Factores de riesgo:
Colitis ulcerativa y enfermedad de Crohn.
Tips para detectar la enfermedad:
Vigilancia de los pacientes con Colitis ulcerativa y enfermedad de Crohn que alteren la pruebas hepáticas.
Descripción general:
La colitis ulcerosa es una enfermedad que se asocia a una respuesta autoinmune desmesurada, inflamatoria y crónica (el paciente la padece durante toda la vida) del intestino grueso (colon) y puede afectar a cualquier parte del intestino, desde la boca hasta el ano.
Síntomas:
Esta afección puede presentarse de forma gradual, o bien, de forma brusca y, en algunas ocasiones, aparece de forma tan espontánea que solo pueden erradicarse los síntomas con cirugía. Sus síntomas son muy variables pero las más comunes son:
- Diarrea con o sin sangre.
- Dolor abdominal
- Hemorragia rectal o rectorragia
- Fiebre y fatiga.
- Anemia y pérdida de peso.
- Alteraciones psicológicas.
Causas:
Dentro de las causas que pueden provocar la aparición de la afección se encuentran:
- Factores genéticos: los genes que intervienen son los denominados de susceptibilidad, es decir, aquellos que, si están presentes, determinan un riesgo mayor de tener una enfermedad.
- Factores inmunológicos: comenzaría con un posible agresor microbiano que activaría las células inmunes del intestino y, a su vez, estas células desencadenarían una respuesta defensiva.
En el caso de los pacientes con colitis, las células eliminan al agresor, pero mantienen un estado de defensa perpetuo, por lo que la inflamación se mantiene de forma permanente.
En el caso concreto de la colitis ulcerosa, los factores inmunológicos pueden ser la causa más probable pero, aun así, las razones por las que se contrae la enfermedad continúan siendo casi desconocidas.
Cómo prevenirlo:
En cuanto a las medidas de prevención, al no conocerse cuáles son las causas exactas de esta afección, es difícil para los especialistas establecer medidas preventivas. Aun así, éstas pueden ser el mantenimiento de buenos hábitos alimenticios o una rutina de ejercicios.
Factores de riesgo:
Como factor de riesgo se incluyen tener antecedentes familiares de colitis o cualquier enfermedad de carácter autoinmune y, en el caso del estrés y la alimentación, éstos pueden desencadenar los síntomas, pero no causar la enfermedad.
En los pacientes que padecen esta enfermedad, es posible que se produzcan complicaciones, tales como el desarrollo de cáncer en el intestino delgado y de colon. Además, los episodios más graves de esta afección pueden provocar el bloqueo del colon, sangrado intenso o infecciones graves que produzcan roturas o perforaciones en dicho órgano.
Otros problemas que se pueden producir pero que resultan poco frecuentes pueden ser una enfermedad hepática, llagas o hinchazón en los ojos, nódulos debajo de la piel o espondilitis anquilosante.
Aproximadamente, la mitad de las personas que padecen esta enfermedad tienen síntomas leves, mientras que los casos más graves pueden no responder bien a los medicamentos.
Descripción general:
La coluria es la presencia de bilirrubina en la orina, Es un signo común de enfermedades hepáticas como la hepatitis y la cirrosis.
Síntomas:
Puede ser descrita como orina de coloración oscura o marrón, también se la compara con el color de la bebida "Coca-Cola.
Causas:
Enfermedades hepáticas como la hepatitis y la cirrosis. Y las obstrucciones de la vía biliar agudas o crónicas benignas o malignas.
Cómo prevenirlo:
Control médico de las causa desencadenantes.
Factores de riesgo:
Cirrosis, hepatitis, Y las obstrucciones de la vía biliar agudas o crónicas benignas o malignas.
Tip para prevenirlo:
Estudio oportuno de orinas hiperpigmentadas.
Descripción general:
Es un trastorno hereditario en el cual la carencia de alfa 1-antitripsina lleva a una degradación tisular durante la inflamación. Esto causa enfisema pulmonar y lleva a la cirrosis hepática en casos severos.
Síntomas:
Esto causa enfisema pulmonar y lleva a la cirrosis hepática en casos severos.
Causas:
La AAT, producida por los hepatocitos, es el inhibidor de proteasa más abundante del suero humano y la principal defensa del pulmón en contra de la elastasa. Circula en concentraciones entre 120 y 220 mg/dl medidas por nefelometría. En condiciones normales, el hígado secreta 34 mg/kg/24 horas, pudiendo incrementarse entre 3 y 5 veces en procesos inflamatorios, tumorales e infecciosos.
¿Cómo prevenir?:
Estudio genético.
Factores de riesgo:
Poseer la mutación.
Tips para prevenir la enfermedad:
Estudio genético de pates con Cirrosis y de pte con enfisema.
Descripción general:
La OMS define la demencia como "un síndrome generalmente de naturaleza crónica o progresiva caracterizado por el deterioro de la función cognitiva (es decir, la capacidad para procesar el pensamiento) más allá de lo que podría considerarse una consecuencia del envejecimiento normal. Afecta a la memoria, el pensamiento, la orientación, la comprensión, el cálculo, la capacidad de aprendizaje, el lenguaje y el juicio.
Síntomas:
A medida que el trastorno se desarrolla, pueden aparecer:
- Pérdida de habilidades sociales y cambios de personalidad, lo cual lleva a comportamientos inapropiados en público y, a veces, agresivos.
- Problemas para comunicarse, ya que el paciente presenta dificultad para recordar el nombre de objetos familiares. A esto se une la pérdida del sentido de la orientación por lo que la persona puede perderse con asiduidad y no encontrar objetos.
- Aumento de la dificultad para memorizar o realizar actividades que requieran pensar.
- El paciente pierde su capacidad de juicio y no es capaz de determinar la peligrosidad de sus acciones.
- Se producen cambios en el patrón del sueño, lo que aumenta el riesgo de sufrir alucinaciones, delirios y es posible que este cuadro sintomático lleve a la depresión.
- En los casos más graves, los pacientes con demencia ya no son capaces de realizar actividades básicas, tales como comer, bañarse o vestirse. Es posible que sean incapaces de reconocer a familiares cercanos o de entender el lenguaje.
Causas:
En términos generales, la demencia suele ocurrir a partir de los 60 años. Por lo tanto, el envejecimiento supone uno de los factores de riesgo más significativos. Está causada por el daño o la pérdida de las células nerviosas y sus conexiones en el cerebro. En función del área del cerebro afectada, el impacto puede ser distinto.
Puede deberse a diversas enfermedades y lesiones que afectan al cerebro de forma primaria o secundaria.
¿Cómo prevenirlo?:
La mayoría de las enfermedades neurodegenerativas carecen de medidas preventivas concretas. En la actualidad, la mayoría de los estudios preventivos realizados señalan que la mejor estrategia para retrasar el desarrollo de una demencia degenerativa es actuar sobre los elementos modificables, como son los factores de riesgo vascular (hipertensión arterial, diabetes mellitus, hipercolesterolemia, tabaquismo, obesidad, entre otros).
También se ha observado un beneficio significativo en el retraso del inicio de los síntomas fomentando la actividad física y cognitiva en edades medias de la vida.
Factores de riesgo:
Se recomienda descartar la depresión, revisar la medicación y valorar si el tratamiento con psicofármacos está influyendo en la cognición.
Algunas personas sufren un deterioro cognitivo leve pero que no llegan a padecer ningún tipo de demencia.
En los casos en los que sí se produce una evolución hacia la demencia, esta enfermedad reduce considerablemente la calidad y la expectativa de vida. La demencia tiene una repercusión social y económica muy significativa y un impacto considerable en las familias y los cuidadores de los afectados.
Descripción general:
Es una enfermedad producida por un virus de la familia de los flavivirus. El hombre es el hospedador y un mosquito del género Aedes es el vector que con su picadura produce la transmisión. Los síntomas son muy similares a los de la gripe y puede afectar a individuos de cualquier edad.
Síntomas:
Los síntomas del dengue se inician después de un período de incubación que puede variar de cinco a ocho días tras la picadura y las personas suelen presentar:
- Fiebre alta.
- Náuseas y vómitos.
- Erupciones en la piel.
- Sangre en las encías y en la nariz.
- Debilidad general.
- Dolor muscular y articular.
- Tos.
- Dolor de garganta.
Causas:
El virus del dengue se propaga por la picadura de mosquitos hembra, principalmente de la especie Aedes aegypti y, en menor medida, A. albopictus. Además, estos mosquitos también transmiten la fiebre chikungunya, la fiebre amarilla y el virus de Zika.
Cómo prevenirlo:
Desde la OMS afirman que la única manera para controlar o prevenir la transmisión del virus del dengue consiste en luchar contra los mosquitos a partir de las siguientes recomendaciones:
- Es fundamental mantener el ordenamiento del medio ambiente para evitar que los mosquitos encuentren lugares donde depositar sus huevos.
- Eliminar correctamente los desechos sólidos y los posibles hábitats artificiales.
- Limpiar y vaciar cada semana los recipientes en los que se almacena agua para el uso doméstico. Además, aplicar insecticidas adecuados a los depósitos en los que se guarda agua a la intemperie.
- Por otro lado, en las zonas más afectadas por los mosquitos transmisores se deben utilizar mosquiteras en las ventanas, sobre todo al momento de dormir.
- Fumigaciones biológicas de zonas estancables y de los productos susceptibles de traer mosquitos (maderas y neumáticos, por ejemplo).
- Utilizar ropa que cubra la mayor parte del cuerpo y que sea de colores claros.
- Emplear barreras físicas a través de mallas mosquiteras y barras protectoras, sobre todo a la hora de dormir la siesta.
- Hacer un uso adecuado de los repelentes de mosquitos, y tener en cuenta que los mosquitos que transmiten el virus del dengue están más activos al amanecer y al atardecer, pero también pueden picar durante la noche
Factores de riesgo:
Las regiones del mundo en las que se registran más casos son Centroamérica, Caribe, norte del cono sur, sudeste asiático y subcontinente indio.
La infección causada por el virus del dengue puede cursar en forma asintomática o expresarse con un espectro clínico amplio que incluye las expresiones graves y las no graves.
La OMS calcula que cada año son hospitalizadas 500.000 personas con dengue grave en el mundo, con una tasa de letalidad en torno al 2,5%.
Descripción general:
Se presenta como un conjunto de síntomas de predominio afectivo (tristeza patológica, apatía, anhedonia, desesperanza, decaimiento, irritabilidad, sensación subjetiva de malestar e impotencia frente a las exigencias de la vida) aunque, en mayor o menor grado, también están presentes síntomas de tipo cognitivo, volitivo y somático, por lo que podría hablarse de una afectación global psíquica y física.
Síntomas:
Se presentan una variedad de síntomas:
- Afectivos: tristeza, ansiedad, irritabilidad, incapacidad para disfrutar, pensamientos suicidas, desesperanza o culpa.
- Cognitivos: indecisión, olvidos o pérdida de concentración.
- Somáticos: fatiga, cambios en el apetito o peso, insomnio, hipersomnia, disfunción sexual, cefalea, problemas de estómago, dolor torácico, agitación.
Causas:
Las personas deprimidas muestran niveles muy altos de cortisol y de varios agentes químicos que actúan en el cerebro, como los neurotransmisores serotonina, dopamina y noradrenalina. Estos niveles pueden estar elevados por motivos hereditarios.
Respecto a la depresión que no está causada por motivos familiares, las pérdidas emocionales muy profundas pueden causar cambios bioquímicos que impulsen la depresión. Estos cambios pueden provocar la enfermedad no de una forma inmediata, sino más adelante.
Otros factores pueden ser la pérdida de un trabajo, o la falta de capacidad de adaptación a determinados cambios. A pesar de que no se sabe exactamente qué provoca la depresión existen diversos factores identificados como los desequilibrios de los neurotransmisores del cerebro.
¿Cómo prevenirlo?:
Aparte del tratamiento farmacológico o psicoterapéutico es importante, una vez que haya hecho efecto y que el paciente sienta que ha mejorado su condición, que se sigan ciertos consejos o modos de vida.
- Tener pensamientos positivos.
- Cuidar la salud física.
- Mantener un calendario diario uniforme.
- Reanudar las responsabilidades de forma lenta y gradual.
- Aceptarse a uno mismo. No compararse con otras personas que considera favorecidas.
- Expresar las emociones.
- Seguir en todo momento y hasta el final el tratamiento impuesto.
- Reunirse periódicamente con el terapeuta.
- Comer una dieta equilibrada.
- Hacer ejercicio físico.
Factores de riesgo:
- La prevalencia e incidencia de los trastornos depresivos es mayor en mujeres que en hombres, comenzando en la adolescencia y manteniéndose en la edad adulta.
- Las enfermedades crónicas, tanto físicas como mentales y la posible asociación con el consumo de alcohol y tabaco también son factores de riesgo importantes.
- Se ha observado que pacientes, fundamentalmente varones, con antecedentes de ataques de pánico, tienen mayor riesgo de desarrollar depresión mayor.
- Se ha descrito una asociación entre migraña y depresión, de manera que los pacientes con depresión mayor presentaban mayor riesgo de sufrir migraña y a su vez, los que presentaban migraña (no otro tipo de cefalea) tenían mayor riesgo de depresión mayor.
- Uno de los acercamientos más frecuentes en la investigación de los genes implicados en el desarrollo de la depresión es el análisis del papel de las monoaminas. De entre todas las variantes genéticas estudiadas, un factor que podría influir en su desarrollo es la presencia de un polimorfismo del gen que codifica el transportador de la serotonina, lo que produciría una disminución del transporte de este neurotransmisor.
- La presencia de enfermedad cardiaca y diversas patologías endocrinas, como la diabetes, el hipo o hipertiroidismo, el síndrome de Cushing, la enfermedad de Addisson y la amenorrea hiperprolactinémica, parecen aumentar el riesgo de depresión.
- Los familiares de primer grado de pacientes con trastorno depresivo mayor tienen el doble de posibilidades de presentar depresión que la población general, proporción también importante en los de segundo grado.
Descripción general:
La diarrea se refiere al aumento en la frecuencia de las deposiciones (más de tres veces al día) acompañada de una disminución de la consistencia de éstas.
Síntomas:
Aunque el hecho fundamental es el aumento en el número de deposiciones y la disminución de la consistencia, no es anormal que se asocien otros síntomas como la presencia de fiebre, intolerancia a la comida acompañada de náuseas y vómitos y dolor abdominal. Si la diarrea es muy cuantiosa puede aparecer deshidratación por pérdida excesiva de líquidos.
Causas:
La más común es la gastroenteritis vírica epidémica, muy frecuente en niños. Otras situaciones que pueden propiciar la enfermedad son la ingesta de determinados alimentos o agua que contienen determinados tipos de bacterias que provocan la diarrea y así como intoxicaciones alimentarias.
Además, algunos medicamentos, como antibióticos, fármacos quimioterápicos o laxantes con magnesio pueden causar diarrea como efecto secundario.
Por último, está vinculada a una serie de patologías como las enfermedades inflamatorias del intestino, principalmente como son la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn; la insuficiencia del páncreas o el síndrome del intestino irritable o la ansiedad y situaciones estresantes, entre otras.
Cómo prevenirlo:
- Desinfección, manejo y conservación del agua.
- Cocer los alimentos, sobre todo pescados y mariscos.
- Lavar frutas y verduras con agua y jabón; utilizar agua potable.
- Lavarse las manos antes de la preparación e ingesta de alimentos, después de ir al baño, cambiar pañales o manejo de basura.
Factores de riesgo:
La deshidratación es una de las complicaciones que vienen vinculadas con la diarrea. Para evitarlas conviene beber mucha agua y líquidos que contengan sodio, cloruro o potasio.
En el caso de los niños, los especialistas recomiendan ingerir soluciones de rehidratación oral, como bebidas que contienen salen y minerales para prevenir la deshidratación. Éstas se pueden encontrar en farmacias.
Los adultos pueden tomar zumo de frutas, bebidas isotónicas, caldos caseros, etc.
Respecto a las comidas, los expertos recomiendan comer arroz blanco, patatas hervidas, zanahorias cocidas, pollo al horno sin piel ni grasa o jamón cocido, entre otros.
Además, aconsejan evitar alimentos que puedan empeorarla como los ricos en grasa, especialmente fritos; con mucha fibra (frutas cítricas), pasteles, galletas, café, etc.
Cuando la diarrea se detenga, el paciente podrá volver a llevar su alimentación habitual.
Descripción general:
Es la incapacidad de tener una erección (que se "pare" el pene) para tener una relación sexual placentera.
Síntomas:
En este caso el paciente desea tener una relación sexual pero el pene no presenta la erección (no se “para”) o lo hace de forma incompleta.
Causas:
Se puede dar por alteraciones en la vasculatura, llegada y retención de sangre en el pene. También puede ser causada por alteraciones en el cerebro o médula espinal, alteraciones psicológicas, hormonales y algunos medicamentos
¿Cómo prevenirlo?:
Evitar situaciones de estrés. Tener una vida sana, con buen consumo de frutas y verduras y bajo consumo de azúcares y grasas. Hacer ejercicio regularmente y evitar el aumento de peso.
Factores de riesgo:
Se asocia a sedentarismo, hipertensión arterial, diabetes mellitus, dislipidemia, ansiedad, estrés, consumo de cigarrillo, obesidad, entre otros.
Detectar la enfermedad:
Esta se detecta con la información que usted le da al médico y el examen físico. En caso de presentarla generalmente se hace un estudio general para detectar los factores de riesgo mencionados, así como un estudio hormonal. En algunos casos se realiza una ecografía en el pene para mirar cambios estructurales.
¿Cuándo consultar?:
En caso de presentar estos síntomas es importante consultar para hacer los estudios pertinentes.
Descripción general:
Es una alteración cuando se desea orinar, en la cual los músculos y demás estructuras encargadas están alteradas en su forma o función.
- Síntomas:
Puede presentarse como ganas constantes de orinar, orinar y quedar con ganas, imposibilidad para orinar así se desee, entre otras.
-¿Cómo prevenirlo?:
Teniendo unos buenos hábitos miccionales desde la infancia, evitar “aguantarse” las ganas de orinar.
-Factores de riesgo:
Se presenta más en niñas y se asocia a "aguantarse las ganas de hacer pipí".
-Detectar la enfermedad:
La detección es clásicamente sintomática. Hay estudios como cistoscopia, ecografía y urodinamia que ayudan a determinar la severidad y la causa de una forma más objetiva.
-¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico.
Descripción general:
Es un grupo de alteraciones que se dan en el comportamiento sexual de la mujer ya sea en el deseo, excitación, orgasmo o dolor durante el acto sexual.
Síntomas:
Es un grupo grande de síntomas entre los que se puede encontrar la pérdida de deseo sexual (no le dan ganas de tener relaciones sexuales), dificultad para llegar al orgasmo, no disfrutar con la relación sexual y no tener pensamientos asociados con la sexualidad, dolor con la relación sexual, entre otros.
Causas:
Puede estar asociado a múltiples factores como alteraciones hormonales, diabetes, enfermedades del corazón, depresión, ansiedad, Parkinson, obesidad, episodios sexuales previos traumáticos, mala relación con la pareja, entre otros.
¿Cómo prevenirlo?:
Evitar situaciones de estrés. Tener una vida sana, con buen consumo de frutas y verduras y bajo consumo de azúcares y grasas. Hacer ejercicio regularmente, dormir el tiempo suficiente. Muy importante tener una buena relación con la pareja.
Factores de riesgo:
Está en relación con las causas ya descritas.
Detectar la enfermedad:
Esta se detecta con la información que usted le da al médico y el examen físico. En caso de presentarla generalmente se hace un estudio general para detectar los factores de riesgo mencionados, así como un estudio hormonal. La evaluación psicológica y por parte de sexología es también importante.
¿Cuándo consultar?:
En caso de presentar estos síntomas es importante consultar para hacer los estudios pertinentes.
Descripción general:
Es la presencia de divertículos asintomáticos (pequeñas bolsas o sacos abultados que se forman en la pared interna del intestino) en el colon. De ahí surge la diverticulitis, y ocurre cuando estas bolsas se inflaman o infectan.
Síntomas:
- Dolor abdominal intenso e hinchazón
- Estreñimiento o diarrea
- Hemorragias en las deposiciones
Causas:
Sus causas se atribuyen a la implicación de factores dietéticos, a la motilidad intestinal, a la microbiota o flora intestinal y a las alteraciones en el tejido conjuntivo.
¿Cómo prevenirlo?:
- Hábitos de vida saludable con realización ejercicio físico adaptado a las condiciones de cada persona.
- Evitar el tabaco.
- Evitar el alcohol.
- Tomar una dieta rica en fibra.
Factores de riesgo:
Existen algunos factores de riesgo para la aparición de divertículos:
- Una dieta baja en fibra: La fibra parece favorecer el tránsito intestinal y el movimiento del colon, lo que generaría “menor presión para mover el bolo fecal, disminuyendo así la presión de la pared intestinal y bajando la posibilidad de herniación”.
- Consumo excesivo de carnes rojas.
- Sedentarismo: El ejercicio físico tiene un efecto beneficioso sobre la motilidad intestinal, la vascularización y la microbiota intestinal.
Descripción general:
Generalmente el dolor de cabeza se presenta de forma intermitente. Las formas más frecuentes corresponden a la migraña y a la cefalea de tensión. Tanto las cefaleas crónicas como las recidivantes pueden provocar dolor y angustia, pero es infrecuente que reflejen un problema grave de salud.
Síntomas:
El dolor puede localizarse en una parte de la cabeza o puede afectar a toda la cabeza de forma más general. La intensidad del dolor suele ser moderada o severa, y con cierta frecuencia puede ser incapacitante para el paciente, obligándole a acostarse y suspender toda su actividad. La frecuencia de los episodios es variable, oscilando entre uno y cuatro o cinco al mes. La duración de una crisis de migraña generalmente no sobrepasa las 24 horas, aunque pueden ser muy breves (tres o cuatro horas) o muy largas (hasta tres días).
Causas:
Estas son las causas más comunes:
- Herencia.
- Edad: existe migraña en la infancia; aunque es menos frecuente. A estas edades la migraña se presenta por igual en niños y niñas. A partir de la pubertad y debido a los cambios hormonales, se dispara la incidencia de migraña en las mujeres.
- Estrés: Es independiente del tipo de estrés y de los factores que lo desencadenan.
- Alimentos: chocolate, cacao, vainilla, plátano, frutos secos, cítricos, aditivos de comidas basura, salchichas, quesos fermentados, picantes (alimentos que contengan sustancias con tiramina, glutamato monosódico).
- Alcohol: independientemente del tipo, sin embargo, los vinos tintos que contienen taninos suelen desencadenar migraña con mayor frecuencia.
- Cambios hormonales.
- Cambios climáticos: no existe un patrón climatológico para la migraña.
- Falta o exceso de sueño.
- Fármacos (vasodilatadores, nitritos, etcétera).
- Edad avanzada: las cefaleas son más frecuentes en adultos que en niños.
- Ser mujer: las cefaleas son más frecuentes en las mujeres y, especialmente, en las que ya han tenido la menopausia.
- Etnia caucásica.
- Factores genéticos.
Factores modificables: Son aquellos aspectos que se pueden alterar.
- Ansiedad, depresión o estrés.
- Trastornos del ritmo del sueño como la apnea o la roncopatía.
- Abuso de fármacos.
- Abuso de cafeína.
- Obesidad.
- Elevada frecuencia de crisis.
¿Cómo prevenirlo?:
Existen formas de evitar que una cefalea se desarrolle más allá de lo que debería; estas son algunas de las recomendaciones:
- Tratar de llevar una vida ordenada.
- Realizar ejercicio físico de manera habitual.
- Tener unos hábitos de alimentación saludables, tomando más frutas y verduras y evitando las grasas.
- Evitar el alcohol y el tabaco.
- Evitar abusos de medicación o cafeína.
- Solicitar ayuda ante síntomas depresivos, que pueden ser un desencadenante del dolor o de su agravamiento.
- Acudir al neurólogo frente a cualquier tipo de dolor inesperado.
Factores de riesgo:
En general, para determinar cuándo se debe visitar a un médico, se siguen las siguientes indicaciones:
- El dolor es súbito y muy intenso.
- El dolor crónico ha empeorado respecto a anteriores episodios.
- El dolor aparece por primera vez en personas mayores que no lo habían sufrido antes.
- El dolor provoca despertarse por la noche.
- El dolor siempre se produce en el mismo lado de la cabeza.
- El tratamiento para contrarrestar el dolor no funciona.
- El dolor impide realizar cualquier actividad habitual como ir a trabajar o al colegio.
Descripción general:
La encefalopatía hepática es un término médico asignado para describir una anormalidad neuropsiquiátrica causada por toxicidad del cerebro y del sistema nervioso secundario a insuficiencia hepática y/o derivación sanguínea porto-sistémica (por exposición del cerebro a concentraciones elevadas de sustancias tóxicas: sobre todo amoníaco).
Síntomas:
Cambios en la personalidad, y en la conducta.Acentuación de los rasgos del carácter habituales o la aparición de los opuestos. Euforia o depresión injustificada. Asterixis,Trastornos de la conciencia. Déficit de atención, lentitud de las respuestas intelectuales, desorientación temporo-espacial y bradipsiquia. Trastornos del sueño: inversión del ritmo del sueño, somnolencia diurna e insomnio durante la noche. Modificaciones en el EEG.Coma.Hipertonía muscular, rigidez en rueda dentada (o signo de Babinski bilateral), hiperreflexia y clonus rotuliano y aquíleo. Pueden aparecer convulsiones en estados más avanzados tratamientos.
Causas:
Puede ser un trastorno progresivo y crónico o de aparición aguda y es en algunos casos reversible. Es posible que ocurra en ausencia de daños hepáticos. La causa específica de la encefalopatía provocada por insuficiencia hepatocelular, son desconocidas.6 Existen diversas teorías en donde al parecer la causa fisiológica inicial del cuadro es la incorrecta destoxificación de la sangre en su paso por el hígado.
La mejor manera de prevenirlo es controlando las causas desencadenantes.
Factores de riesgo:
Cirrosis hepática, falla hepatuica aguda y derivación portositémica.
Descripción general:
Es una patología que causa la inflamación de diferentes localizaciones del tubo digestivo.
Síntomas:
Los síntomas que se presentan dependen de la parte a la que afecte la enfermedad; además, pueden presentarse a lo largo del tiempo con mayor o menor gravedad. Las afecciones más comunes causadas por la enfermedad de Crohn son:
- Dolor y cólicos abdominales.
- Diarrea, que puede estar acompañada de sangre.
- Fiebre.
- Falta de apetito.
- Hinchazón.
- Pérdida de peso.
- Sensación frecuente de necesidad de defecar, aunque ya se haya evacuado, lo que acarrea cólicos, dolor y esfuerzo.
- Estreñimiento.
- Aparición de fístulas (conducto anormal que comunica órganos con el exterior o con otros órganos).
- Dolor articular.
- Úlceras bucales y/o cutáneas.
Causas:
La causa exacta de aparición de la enfermedad de Crohn se desconoce. La hipótesis más aceptada es que se desarrolla en personas genéticamente predispuestas en las que factores ambientales interaccionan con la microbiota y el sistema inmune, cuya activación causa las lesiones intestinales.
Cómo prevenirlo:
La prevención del desarrollo de la enfermedad de Crohn no es posible porque no se conocen las causas exactas de su aparición, aunque sí que se puede actuar frente a ciertos factores de riesgo que influyen en el desarrollo y gravedad de la patología, como evitar fumar. Se ha comprobado que el tabaquismo aumenta el riesgo de desarrollo de este trastorno y en quienes lo padecen eleva el peligro de complicaciones.
Factores de riesgo:
Estos son los principales factores de riesgo que podrían condicionar su aparición:
- Factores genéticos: Todavía no se conocen con exactitud los genes implicados.
- Problemas del sistema inmunológico: En algunas ocasiones, el sistema inmunitario puede reaccionar de forma exagerada contra bacterias cuya presencia en el intestino es normal; esto provocaría que el sistema inmune atacara el tubo digestivo.
- Factores ambientales: Como la alimentación, la higiene, agentes infecciosos, tabaquismo o, incluso, la alimentación materna durante el embarazo y algunas infecciones desarrolladas en la infancia. No obstante, la influencia del estilo de vida no está tan clara como en otras enfermedades.
Descripción general:
La enfermedad de Wilson o degeneración hepatolenticular es una enfermedad hereditaria autosómica recesiva, con una incidencia de alrededor de 1/50.000. Su hecho principal es la acumulación de cobre en los tejidos.
Síntomas:
Síntomas neurológicos (dificultad de coordinación, temblores), también catarata y enfermedades hepáticas (cirrosis, insuficiencias hepáticas). La enfermedad afecta por igual a hombres y a mujeres y se ha descrito en todas las razas.
Causas:
Esta anomalía genética transmitida como rasgo autosómico recesivo se caracteriza por un alto nivel sérico de cobre, debido a la incapacidad de la ceruloplasmina para combinarse con el mismo.
¿Cómo prevenir?:
Detección en los grupos de riesgo del gen defectuoso responsable ATP7B.
Factores de riesgo:
Grupo familiar o poblacional con la mutación.
Tips para detectar la enfermedad:
Estudio de los pacientes con síntomas neurológicos (dificultad de coordinación, temblores), también catarata y enfermedades hepáticas (cirrosis, insuficiencias hepáticas).
Descripción general:
Es un trastorno neurológico provocado por el aumento de la actividad eléctrica de las neuronas en alguna zona del cerebro. La persona afectada puede sufrir una serie de convulsiones o movimientos corporales incontrolados de forma repetitiva. A esto se le llama "ataque epiléptico".
Síntomas:
En el estado epiléptico, el más grave de los trastornos convulsivos, las convulsiones no se detienen. El estado epiléptico es una urgencia médica porque la persona tiene convulsiones acompañadas de intensas contracciones musculares, no puede respirar adecuadamente y tiene extensas (difusas) descargas eléctricas en el cerebro. Si no se procede al tratamiento inmediato, el corazón y el cerebro pueden resultar permanentemente lesionados y puede sobrevenir la muerte.
Causas:
Entre las causas más comunes según los estudios están:
- Predisposición hereditaria. Es más probable que una persona tenga convulsiones si sus padres han padecido crisis convulsivas. Actualmente, se está tratando de localizar el gen responsable de las crisis convulsivas.
- Estado de maduración del cerebro: Incluso entre las distintas edades pediátricas, hay una enorme diferencia en la frecuencia de convulsiones infantiles. En la etapa prenatal el umbral es muy alto y las crisis poco frecuentes; en el recién nacido (primeros 30 días) el umbral es bajo y las crisis frecuentes. Entre los 2 y los 5 años el umbral va aumentando hasta que alcanza el nivel máximo a los 5 años. De esto se podría deducir que la maduración cerebral por sí sola modifica la frecuencia de las crisis convulsivas. También se puede pensar que los síndromes epilépticos en niños son completamente diferentes a los de los adultos.
- Existencia de lesión cerebral: El cerebro puede estar programado para desarrollarse normalmente, pero puede sufrir lesiones durante el embarazo, el nacimiento o más adelante. Las lesiones pueden deberse a tumores cerebrales, alcoholismo o consumo de otras drogas, Alzheimer, meningitis, encefalitis, sida, ciertas alergias, etc., porque todo ello altera el normal funcionamiento del cerebro. Los infartos y enfermedades cardiovasculares también influyen en la aparición de un ataque epiléptico porque privan al cerebro de oxígeno.
- Reparaciones incorrectas. En algunos casos, el cerebro intenta reparar los daños causados, pero puede generar conexiones neuronales anormales que podrían conducir a la epilepsia.
¿Cómo prevenirlo?:
Muchos casos de epilepsia secundaria a traumatismos se pueden prevenir haciendo uso de los cinturones de seguridad en los vehículos y de cascos en las bicicletas y motos; poniendo a los niños en asientos adecuados para coches y, en general, tomando las medidas de precaución necesarias para evitar traumatismos y daños en la cabeza. Seguir un tratamiento después del primer o segundo ataque también puede prevenir la epilepsia en algunos casos.
Unos buenos cuidados prenatales, incluyendo el tratamiento de la tensión alta e infecciones durante el embarazo, pueden prevenir daños cerebrales durante el desarrollo del bebé, que conduzcan a una posterior epilepsia u otros problemas neurológicos. El tratamiento de enfermedades cardiovasculares, tensión alta, infecciones y otros trastornos que puedan afectar al cerebro durante la madurez y la vejez también puede prevenir muchos casos de epilepsia en adultos.
Según la OMS, las infecciones del sistema nervioso central son causas frecuentes de epilepsia en las zonas tropicales. La eliminación de los parásitos y la educación sobre cómo evitar las infecciones pueden ser eficaces para reducir la epilepsia en estos entornos.
Por último, identificar los genes implicados en muchos trastornos neurológicos puede ofrecer oportunidades para un estudio genético y un diagnóstico prenatal que puede prevenir muchos casos de epilepsia.
Factores de riesgo:
El desarrollo de los trastornos epilépticos depende de muchos elementos, desde la edad en que empiezan hasta la rapidez con que se detectan como convulsiones propias de esta enfermedad y del tratamiento que se recomienda. Algunas formas de presentación de los ataques son realmente leves y llegan a desaparecer. Otras, que pueden considerarse algo más serias, no desaparecen, pero sí permiten llevar una vida prácticamente normal con un control regular mínimo.
Asimismo, también es importante el tipo de lesión cerebral que provoca las convulsiones y demás síntomas. El hecho de presentar ataques de epilepsia más o menos frecuentes no quiere decir necesariamente que la lesión que se tenga vaya a empeorar a causa de los mismos. La mayoría de las veces la gravedad de la epilepsia está en la propia lesión cerebral. Aun así, la historia de la enfermedad de la que los médicos disponen actualmente reúne los conocimientos necesarios para saber con certeza qué clase de epilepsia sufre un paciente y cuál es el mejor.
Descripción general:
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica, conocida por las siglas EPOC, consiste en una inflamación crónica de la mucosa bronquial que hace que se produzca un moco, que es anómalo, lo que lleva a una obstrucción de las vías aéreas. La consecuencia de esto es que se impide la oxigenación del organismo y de la sangre de forma adecuada.
Síntomas:
- Tos y expectoración, normalmente al levantarse por la mañana.
- Tendencia a sufrir resfriados de pecho.
- La flema que se produce durante estos resfriados con frecuencia se vuelve amarilla o verde debido a la presencia de pus.
- A medida que pasan los años, estos dolores de pecho se vuelven más frecuentes.
- Respiración con silbidos.
- Sensación de ahogo cuando se hace un esfuerzo y ahogo en actividades diarias como lavarse, vestirse o cocinar.
- Pérdida de peso considerable.
- Hinchazón en las piernas, a razón de la insuficiencia cardiaca.
Causas:
Se presenta en las personas expuestas a los dos factores externos que contribuyen en mayor medida a su desarrollo: fumar y trabajar en ambientes contaminados, lo que ocasiona una pérdida de la función pulmonar acelerada. Por eso la enfermedad incide especialmente entre los trabajadores expuestos al polvo. La enfermedad es más frecuente entre los hombres que entre las mujeres y tiene mayor mortalidad entre los varones.
Cómo prevenirlo:
Para prevenir la enfermedad pulmonar obstructiva crónica es fundamental no fumar en cualquiera de sus variedades (cigarrillo, cigarrillo electrónico, entre otros), ni exponerse a ambientes de aire contaminado.
También es muy importante mantener un buen estado de salud general, realizar ejercicios y seguir una dieta sana para aumentar la resistencia del cuerpo a las infecciones.
Descripción general:
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica y autoinmune que afecta a la mielina o materia blanca del cerebro y de la médula espinal, provocando la aparición de placas escleróticas que impiden el funcionamiento normal de esas fibras nerviosas.
Síntomas:
Principales síntomas de la esclerosis múltiple:
- Cansancio
- Visión doble o borrosa
- Problemas del habla
- Debilidad en los miembros
- Pérdida de fuerza o de sensibilidad en alguna parte del cuerpo
- Vértigo o falta de equilibrio
- Sensación de hormigueo o entumecimiento
- Problemas de control urinario
- Dificultad para andar o coordinar movimientos
Causas:
La causa de la esclerosis múltiple se desconoce, pero se sospecha que un virus o un antígeno desconocido son los responsables que desencadenan, de alguna manera, una anomalía inmunológica, que suele aparecer a una edad temprana. Entonces el cuerpo, por algún motivo, produce anticuerpos contra su propia mielina.
Esto provoca, con el paso del tiempo, la aparición de lesiones de desmielinación y, posteriormente, cicatrices (placas) en distintos puntos del sistema nervioso central. La desmielinación puede afectar a zonas diversas del sistema nervioso central y la distinta localización de las lesiones es la causa de la variabilidad y multiplicidad de los síntomas (trastornos motrices, sensitivos, del lenguaje, del equilibrio, viscerales, etcétera).
¿Cómo prevenirlo?:
La causa de la enfermedad es, por el momento desconocida, por lo que no es posible su prevención. Sin embargo, los especialistas creen que una exposición habitual y sana a la luz solar (siempre con protección) puede ayudar a controlar uno de los factores que se relacionan con el desarrollo de la enfermedad, como es el déficit de vitamina D.
Factores de riesgo:
En general, la esclerosis múltiple es una enfermedad de adultos jóvenes, la edad media de aparición es 29-33 años, pero la gama de edades de aparición es muy amplia, aproximadamente desde los 10 a los 59 años; y las mujeres sufren la enfermedad con una frecuencia algo superior a los varones.
Descripción general:
La esplenomegalia es un agrandamiento patológico del bazo o estructura esplénica más allá de sus dimensiones normales (11 cm).
Síntomas:
Generalmente asintomático, pero puede presentarse:Imposibilidad de realizar comidas más copiosas de las habituales. En ocasiones se presentan náuseas e incluso vómitos.Molestia en el hipocondrio izquierdo, justo por debajo de la parrilla costal.
Causas:
Insuficiencia hepática, Colestasis hepática, Cirrosis, Colangitis esclerosante, Fibrosis quística, Atresia biliar, Enfermedad de Wilson.
Cómo prevenirlo:
Control médico de las causa desencadenantes.
Factores de riesgo:
Enfermedades hepáticas agudas o crónica y obstrucción del flujo de la vena porta.
Tips para brevenirlo:
Examen físico adecuado.
Descripción general:
Es una afección ocular que consiste en la pérdida de paralelismo de los ojos. Es decir, mientras un ojo dirige la mirada a un objeto, el otro se desvía en una dirección diferente.
Síntomas:
El síntoma más evidente es la falta de paralelismo entre los ojos, aunque esta afección también provoca una pérdida de la agudeza visual respecto al otro ojo (ojo vago o ambliopía); posiciones anormales de la cabeza; desviaciones; inclinación y tortícolis; visión doble; pérdida de visión binocular, y errores en el cálculo de distancias y en la percepción de relieves.
Causas:
En el origen del estrabismo intervienen numerosos factores. Uno de estos es la herencia familiar, ya que se puede tener cierta predisposición a sufrir este trastorno. También puede deberse a una alteración de los músculos del ojo motivada por una mala visión, a las infecciones, los tumores o traumatismos. Los casos de estrabismo en la edad adulta están estrechamente ligados a los traumatismos, enfermedades musculares y trastornos de tiroides.
¿Cómo prevenir?:
El estrabismo es una enfermedad que, como tal, no se puede prevenir ya que se produce por una falta de comunicación entre el cerebro y los músculos que se encuentran alrededor del ojo, lo que produce una desalineación ocular.
Es común que a los niños menores de seis meses se les crucen de forma ocasional los ojos ya que aún su cerebro está desarrollándose, pero si esto se produce de forma repetida, deberá ser tratado de inmediato para evitar que la enfermedad empeore.
Factores de riesgo:
Existen patrones especiales dentro del estrabismo que recibe denominaciones especiales como síndrome de Brown o síndrome de Duane.
El estrabismo también puede ser descrito según su causa: los tres nervios craneales (III, IV, VI) que se encargan de los movimientos oculares pueden debilitarse y causar estrabismo. Algunos estrabismos resultan paralíticos y pueden incluir la parálisis del tercer nervio. Estos son los que revisten mayor gravedad.
Descripción general:
Es un mecanismo que se pone en marcha cuando una persona se ve envuelta por un exceso de situaciones que superan sus recursos. Por lo tanto, se ven superados para tratar de cumplir con las demandas que se le exigen para superarlas. En estos casos, el individuo experimenta una sobrecarga que puede influir en el bienestar tanto físico como psicológico y personal.
Síntomas:
El estrés puede causar muchos síntomas, tanto físicos, como psicológicos y emocionales. Muchas veces los afectados no relacionan los signos con el propio estrés, los más frecuentes son:
- Dolor de cabeza
- Mala memoria.
- Diarrea o estreñimiento
- Falta de energía o de concentración
- Cambios de conducta.
- Problemas de salud mental
- Problemas cardiovasculares y musculoesqueléticas
- Cambios en el peso
- Problemas estomacales.
- Cansancio constante y prolongado.
- Problemas a nivel sexual
- Rigidez en la mandíbula y el cuello
- Insomnio o exceso de sueño
- Desgaste a nivel celular y envejecimiento
Causas:
El estrés se manifiesta en una primera fase de activación o preparación de la persona frente a este estímulo; después hay un periodo de mantenimiento del estado de alta actividad y, por último, cuando se ha superado la situación, se pasa a una fase de agotamiento en la que la alta actividad cae bruscamente.
¿Cómo prevenir?:
El estrés es necesario para superar las situaciones que demandan más esfuerzo y activación: lo que es necesario prevenir es el exceso de este. Es beneficioso saber detectar este estrés y ver si se repite de forma innecesaria para poder frenarlo y evitar poner en riesgo la salud y el bienestar.
- Hacer ejercicio de forma regular para liberar tensiones.
- Adoptar una postura más positiva ante los problemas y las situaciones complejas.
- Aprender técnicas de relajación, como el mindfulness, realizar actividades como yoga o pilates.
- Aprender a poner límites si el estrés se origina por el exceso de tareas originadas en el trabajo o en el ámbito familiar.
- Mantener una dieta saludable y equilibrada
Factores de riesgo:
La población más afectada por el estrés y sus consecuencias emocionales han sido los pacientes que han contraído la Covid-19 y, sobre todo, aquéllos que aún sufren sus secuelas. Sin olvidar a los familiares de los pacientes fallecidos, sometidos a un estrés de gran magnitud, o a los profesionales sanitarios, muy especialmente los de atención primaria, pero también los de asistencia especializada, sometidos a decisiones clínicas de gran complejidad y a una sobrecarga laboral importante.
Descripción general:
Es un trastorno psiquiátrico que aparece en personas que han vivido un episodio dramático en su vida (guerra, secuestro, muerte violenta de un familiar, entre otros).
Síntomas:
Entre los síntomas están:
- Rememoración del trauma (flashbacks), pesadillas o recuerdos instantáneos e involuntarios en cualquier momento del día.
- Alucinaciones con la idea de que se repite el hecho traumático.
- Ansiedad extrema al entrar en contacto con las personas, lugares o cualquier circunstancia que recuerde el acontecimiento.
- Palpitaciones, dificultad para respirar y secreción elevada de sudor cada vez que se recuerda el hecho.
- Incapacidad para recordar detalles importantes del acontecimiento traumático.
- Sentirse psíquicamente distante, entumecido y paralizado ante cualquier experiencia emocional normal.
- Perder el interés por las aficiones y diversiones.
- Mostrar signos de hiperactividad: Dificultad para dormir, irritabilidad, incapacidad para concentrarse o alarmarse con mucha facilidad.
Causas:
Las emociones y la situación familiar juegan un papel importante. Es posible que traumas emocionales del pasado aumenten el riesgo de padecer este trastorno después de un acontecimiento traumático reciente.
En circunstancias normales, las hormonas y los químicos del estrés que secreta el organismo ante un evento estresante vuelven, en un plazo corto de tiempo, a sus niveles normales. Pero en el caso de las personas con síndrome de estrés postraumático, el cuerpo sigue secretando hormonas y químicos.
Las causas que provocan esta patología pueden ser:
- Un robo, violación o ser víctima de la violencia de género.
- Terrorismo o una guerra.
- Encarcelamiento o un accidente automovilístico.
- Desastres naturales.
¿Cómo prevenir?:
Las personas que han pasado por un hecho traumático y que reciben apoyo psicológico y consejo especializado inmediatamente después de sufrir el episodio desencadenante, son menos propensas a padecer el síndrome de estrés postraumático. Por eso se recomienda que tras un trauma se recurra a algún profesional especializado.
¿Cuándo consultar?:
Para diagnosticar este trastorno, el especialista preguntará al paciente por la duración de los síntomas. En términos generales, se denomina síndrome de estrés postraumático si el cuadro sintomático prevalece durante más de 30 días. De igual manera, se podrán realizar exámenes físicos y análisis de sangre para determinar si existe otra enfermedad que presente los mismos síntomas.
Descripción general:
Las enfermedades cardiovasculares son aquellas que afectan tanto al sistema circulatorio, como al corazón. Entre ellas se encuentran la enfermedad coronaria, la enfermedad valvular cardiaca, la hipertensión arterial, el accidente cerebrovascular (trombosis o derrame cerebral) y el infarto de miocardio.
La enfermedad cerebrovascular aparece con mayor frecuencia en la población de edad avanzada. Las consecuencias pueden tener diferentes síntomas y gravedad e incluir desde problemas de visión, hasta dificultad para coordinar los movimientos. Esta patología es una de las principales causas de invalidez grave y prolongada en los adultos.
Síntomas:
Las manifestaciones clínicas de los factores de riesgo cardiovascular variarán dependiendo del tipo de factor de riesgo.
Causas:
La patología de base de las enfermedades cardiovasculares es la ateroesclerosis, una enfermedad inflamatoria que se caracteriza por la acumulación de lípidos, células inflamatorias y tejido fibroso en las arterias. Su etiología es multifactorial y compleja, interviniendo tanto factores ambientales como genéticos. Estos factores de riesgo suelen presentarse asociados entre sí, potenciando el riesgo cardiovascular.
¿Cómo prevenirlo?:
Los únicos factores de riesgo que se pueden prevenir son los modificables, como la obesidad o el colesterol elevado. Para conseguirlo el paciente tendrá que intentar tener controlados estos factores modificando su estilo de vida para llevar una rutina más saludable. Para ello tendrá que cuidar la alimentación, incorporar la actividad física a su día a día o dejar de fumar y de consumir bebidas alcohólicas, entre otros.
Factores de riesgo:
Entre las enfermedades isquémicas del corazón, el infarto agudo de miocardio es la más frecuente con un 61 por ciento de las muertes. Si bien esta patología en sujetos de 25 a 74 años se mantiene estable, se estima que cada año aumentará un 1,5 por ciento el número de casos de infarto y angina de pecho debido al envejecimiento de la población.
La enfermedad cerebrovascular aparece con mayor frecuencia en la población de edad avanzada. Las consecuencias pueden tener diferentes síntomas y gravedad e incluir desde problemas de visión, hasta dificultad para coordinar los movimientos. Esta patología es una de las principales causas de invalidez grave y prolongada en los adultos.
Descripción general:
La insuficiencia hepática o fallo hepático agudo es la incapacidad del hígado para llevar a cabo su función sintética y metabólica, como parte de la fisiología normal.
Síntomas:
Desarrollo de encefalopatía hepática (confusión, estupor y coma) y disminución de la producción de proteínas (tales como la albúmina y proteínas de coagulación) en las cuatro semanas posteriores a la aparición de los primeros síntomas (como la ictericia) de un problema hepático.
Causas:
Hepatitis agudas de cualquier etiología: Virales, autoinmune, toxica, isquémica.
¿Cómo prevenirlo?:
Vigilancia médica al momento del diagnóstico de una hepatitis aguda.
Factores de riesgo:
Es un reacción desproporcionada del hígado a una lesión aguda de cualquier causa.
Descripción general:
Es la inflamación de la garganta o faringe a menudo causada por una infección bacteriana o vírica. Provoca molestia, dolor o carraspera en esta zona, lo que a menudo da lugar a dificultades al tragar o hablar.
Síntomas:
El principal síntoma de esta afección es el dolor de garganta, aunque también existen otros secundarios:
- Dolor de garganta que empeora al tragar o hablar (odinofagia).
- Sequedad de la garganta.
- Fiebre.
- Dolor de cabeza.
- Erupciones cutáneas.
- Amigdalitis o amígdalas rojas e inflamadas.
- Dolores musculares o articulares.
- Voz ronca.
- Ganglios inflamados en el cuello.
Causas:
La mayoría de los dolores de garganta vienen provocados por virus que provocan resfriados comunes o por el virus de la gripe. En un menor número de casos, el dolor viene causado por infecciones bacterianas.
Las enfermedades virales que causan dolor de garganta son:
- El resfriado común.
- La gripe.
- Mononucleosis: infección viral que causa fiebre, dolor de garganta e inflamación de los ganglios linfáticos.
- Sarampión: enfermedad muy contagiosa causada por un virus.
- Varicela.
Las enfermedades bacterianas que provocan dolor de garganta pueden ser:
- Faringitis estreptocócica: causada por una bacteria denominada Streptococcus pyogenes o estreptococos del grupo A.
- Tos ferina: infección del tracto respiratorio muy contagiosa.
- Difteria: infección aguda provocada por una bacteria denominada Corynebacterium diphtheriae.
Otras causas del dolor de garganta pueden ser:
- Alergias: que pueden ser al moho, al polvo o al polen, entre otras. El problema se complica por el goteo retronasal (acumulación de una gran cantidad de moco en la garganta o la nariz), que puede irritar e inflamar la garganta.
- Sequedad.
- Elementos irritantes que se encuentran en el aire contaminado.
¿Cómo prevenir?:
Para prevenir esta enfermedad es recomendable descansar la voz o beber mucha agua para mantener la humedad de la garganta y prevenir la deshidratación. Otros consejos son:
- Lavarse las manos con frecuencia, sobre todo antes de comer o después de estornudar y comer.
- Evitar compartir los alimentos, vasos o cubiertos.
- Usar desinfectante a base de alcohol para las manos como una alternativa para el lavado de estas cuando no se dispone de agua y jabón.
- Evitar el contacto con personas que están padeciendo faringits.
En el caso de detectarse principios de dolor en la garganta, los especialistas recomiendan:
- Beber líquidos calientes, como té de limón con miel.
- Hacer gárgaras con agua con media cucharada de sal varias veces al día.
- Pastillas para la garganta.
- Vaporizar el aire con un humidificador y así aliviar la sequedad en la garganta.
Factores de riesgo:
La infección por estreptococo puede llevar a tener enfermedades inflamatorias, entre las que se incluyen:
- Escarlatina, una infección por estreptococo caracterizada por un sarpullido prominente.
- Inflamación de los riñones (glomerulonefritis posestreptocócica).
- Fiebre reumática, una enfermedad inflamatoria grave que puede afectar al corazón, las articulaciones, el sistema nervioso y la piel.
- Artritis reactiva posestreptocócica, una enfermedad que causa inflamación en las articulaciones.
Descripción general:
La faringoamigdalitis es la inflamación de la orofaringe y las amígdalas que se caracteriza por la presencia de dolor de garganta y de las anginas.
Síntomas:
En el caso de las amigdalitis producidas por un virus, los síntomas suelen ser de inicio gradual, con fiebre moderada, síntomas catarrales de intensidad variable y escasa afectación del estado general. La exploración de la faringe debería mostrar enrojecimiento de la faringe, en ocasiones inflamada y, otras veces, vesículas, úlceras o nódulos blanquecinos.
Los síntomas y signos que se presentan con la enfermedad son fiebre alta (entre 38 y 39 grados centígrados), dolor de la faringe, que suele ser intenso, y ganglios dolorosos y de gran tamaño en el cuello.
Además, presenta otros síntomas, como masas rojas en el paladar blando y la úvula, tos, rinitis, conjuntivitis, úlceras mucosas o diarrea. También pueden darse otros síntomas como cefalea, dolor abdominal y, a veces, exantemas en la piel.
Causas:
Cerca del 80 por ciento de las faringoamigdalitis son víricas y el resto son bacterianas. Dentro de estas últimas, la producida por el estreptococo beta hemolítico del grupo A (EBHGA) o streptococcus pyogenes es la más común (entre el 15 y el 30 por ciento de los casos).
Esta patología tiene una gran presencia en menores de tres años cuando es vírica y tiene mayor incidencia en niños de entre 5 y 15 años cuando es bacteriana, aunque también puede aparecer entre los 15 y los 35 años.
¿Cómo prevenirlo?:
Los gérmenes que provocan las infecciones virales y bacterianas son contagiosos, por lo tanto, para prevenirlas se requiere una buena higiene. Los especialistas recomiendan lavarse las manos con frecuencia, especialmente después de ir al baño o antes de comer y, sobre todo, después de toser o estornudar. Si no se puede, es aconsejable llevar siempre desinfectantes a base de alcohol de manos.
Es importante, además, no compartir alimentos, vasos o cubiertos y evitar el contacto cercano con personas que puedan estar enfermas.
Factores de riesgo:
Tras administrarle al paciente el tratamiento correcto suele ser muy inusual que se produzcan complicaciones o que la infección no se erradique por completo, pero es posible que se desarrolle otitis media, sinusitis o adenitis purulentas.
Descripción general:
La fascitis plantar es una enfermedad que se produce por la inflamación de la fascia plantar, es decir, el tejido fibroso que rodea la musculatura intrínseca del pie y que va desde el talón hasta los dedos.
Síntomas:
El síntoma principal de esta lesión es el dolor que se produce en la zona interna del talón, la parte en la que se inserta la fascia plantar, y que suele manifestarse más intensamente por las mañanas debido a la rigidez matutina de la fascia que por la noche se acorta.
El dolor suele ir acompañado de hinchazón leve, enrojecimiento y sensibilidad en la parte inferior del talón.
Causas:
Detrás de la fascitis plantar se encuentran causas generales, como el sobrepeso, el grado de intensidad de la actividad física que realizamos o utilizar un calzado poco adecuado.
Además, pueden existir otras causas biomecánicas o aparecer debido a la forma del pie. Por ejemplo, pies que tienen la bóveda plantar muy aplanada, aquellos que presentan un aumento en la rigidez o un acortamiento en determinados músculos.
¿Cómo prevenirlo?:
La fascitis plantar se puede prevenir utilizando un calzado adecuado, no sobrepasando el umbral de carga de nuestra fascia plantar y en algunas ocasiones utilizando plantillas podológicas podremos prevenir este problema.
Además, reduciendo el exceso de peso, así como aplicando un tratamiento podológico ante un pie plano valgo o una asimetría de miembros inferiores, y realizando estiramientos de la musculatura posterior de la pierna, podemos ayudar a evitarla.
Factores de riesgo:
La fascitis plantar puede afectar a 1 de cada 6 personas, pero hay factores que pueden incrementar el riesgo de tener esta patología, como aquellos que implican un exceso de tensión y estrés de la fascia.
Practicar deporte, especialmente ejercicio físico que generen mayor impacto en los pies, puede ser un factor de riesgo para sufrir esta patología; sin embargo, la fascitis plantar puede afectar a cualquier persona independientemente de su actividad.
Descripción general:
Es una enfermedad reumática crónica caracterizada por dolor generalizado del aparato locomotor que se acompaña de cansancio intenso, disminución de la capacidad funcional, alteraciones cognitivas y del sueño, síntomas funcionales en diversos órganos y mal estado de ánimo.
Síntomas:
- Dolor muscular: Este dolor es difuso, inespecífico y afecta a muchas partes distintas del cuerpo. El dolor en la fibromialgia tiene algunas peculiaridades como alodinia (dolor por estímulos no dolorosos), hiperalgesia (dolor mayor de lo normal en relación al estímulo doloroso) y persistencia (está presente durante más tiempo de lo normal).
- Fatiga y cansancio
- Rigidez
- Entumecimiento, calambres en las piernas, sensación de hinchazón y agarrotamiento.
- Contracturas musculares, movimientos involuntarios, temblor y sensación de bloqueo.
- Trastornos del sueño
- Deterioro cognitivo
- Ansiedad y depresión
- Trastornos gastrointestinales
Causas:
Aunque se desconocen las causas que originan esta enfermedad, hoy en día se piensa que la fibromialgia se produce por una alteración de determinados neurotransmisores del sistema nervioso, que son las sustancias encargadas de la comunicación entre las neuronas.
Por otra parte, se han descrito varios polimorfismos genéticos asociados con la fibromialgia, lo cual justifica la presencia de familias con varios miembros afectados por la enfermedad y por tanto con mayor predisposición a padecerla.
¿Cómo prevenirlo?:
Dado que sólo se sospechan las posibles causas que originan la enfermedad, en la actualidad no existen medidas preventivas para mitigar su aparición. Los expertos insisten en la importancia del diagnóstico precoz, que permite instaurar un tratamiento adecuado de forma temprana y mejora significativamente el pronóstico.
Factores de riesgo: En la actualidad hay un gran número de personas con fibromialgia que realizan una vida normal. Sin embargo, si la enfermedad tarda en diagnosticarse o no se realiza la intervención adecuada, la calidad de vida del paciente va disminuyendo poco a poco.
La importancia de esta patología radica en que afecta a todos los ámbitos de la vida del paciente y éste puede llegar a desarrollar una discapacidad que incluso interfiera en su ámbito laboral. Según varios estudios, entre el 15 y el 20 y hasta el 50 por ciento de los pacientes tienen que dejar su trabajo.
Descripción general:
Es una enfermedad genética autosómica recesiva, no contagiosa, que se manifiesta desde el momento del nacimiento. Se trata de una patología compleja, que afecta a muchos órganos del cuerpo y causa graves morbilidades, como invalidez crónica, además de tener una alta mortalidad.
Síntomas:
Existen signos indicativos que, a edad temprana, pueden inducir a pensar que nos encontramos frente a una afectación de fibrosis quística. Estos signos pueden ser:
- Sudor salado: por la afectación de las glándulas sudoríparas. “Esto puede originar cuadro de deshidratción hiponatrémica e hipoclorémica en las épocas calurosas”, afirma.
- Síntomas pulmonares: Consistentes en tos con expectoración, con infecciones respiratorias frecuentes que deterioran la capacidad respiratoria.
- Síntomas nasales: Con rinitis, sinusitis y poliposis nasal.
- Síntomas digestivos en un alto porcentaje de pacientes: Como la insuficiencia pancreática y mala absorción de las grasas, que llevan a un deterioro del estado nutricional.
- Infertilidad en los hombres por azoospemia obstructiva y disminución de la fertilidad en las mujeres.
Causas:
El gen regulador de la conductancia transmembrana de la fibrosis quística (CFTR), en condiciones normales, codifica la proteína CFTR del canal epitelial de cloruro, encargado de contribuir a regular la absorción y secreción de sal y agua en varios sistemas orgánicos, entre los que se incluyen los pulmones, el páncreas, el tracto intestinal, el tracto biliar, las glándulas sudoríparas y el tracto reproductivo.
En la fibrosis quística, la falta de regulación del transporte de cloruro en estos órganos da lugar a la patología multisistémica asociada a esta enfermedad. Por tanto, la fibrosis quística es un trastorno sistémico, no sólo una patología pulmonar.
¿Cómo prevenirlo?:
La fibrosis quística es una enfermedad genética, es decir, las personas nacen con ella. Por este motivo no se puede prevenir, salvo que se conozca que los padres son portadores y se haga una selección del embrión en los casos en los que los pacientes desean tener descendencia.
Factores de riesgo:
La fibrosis quística es, hoy por hoy, una enfermedad incurable. Los tratamientos que actualmente se aplican están destinados a paliar los efectos de la afección y a lograr una mejora integral de la salud del afectado. Paralelamente se están desarrollando investigaciones que mejoran estos tratamientos y buscan nuevas técnicas.
La fibrosis quística es una enfermedad compleja, multisistémica y por ello su tratamiento es también complejo, pues ha de incidir sobre cada uno de los aspectos en que la enfermedad se ponga de manifiesto en cada persona. La experiencia demuestra que el paciente debe recibir una atención integral, idealmente en Unidades de Fibrosis Quística especializadas con experiencia en numerosos casos.
También está demostrado que el tratamiento temprano favorece que el paciente tenga una mejor calidad y esperanza de vida. Para conseguirlo las personas tienen que realizarse revisiones periódicas que incluyan controles de capacidad pulmonar, balances de grasa, cultivos, etcétera.
El tratamiento requiere que, por lo tanto, el paciente sea constante y disciplinado.
Descripción general:
Es una enfermedad infecciosa aguda, de rápida evolución, que se transmite por la picadura del mosquito Aedus aegypti.
La gravedad puede ser muy variable; independientemente de su intensidad, una vez padecida, el paciente adquiere la inmunidad de por vida. Se manifiesta generalmente en brotes epidémicos de alta mortalidad en las regiones de África, América Central y del Sur.
Síntomas:
Una vez que se contrae el virus y pasado un periodo de incubación de 3 a 6 días, la infección puede desarrollarse en una o dos fases, dependiendo de cómo evolucione la enfermedad:
- Primera etapa o fase aguda: En este primer periodo, los síntomas más comunes son fiebre, mialgias con dolor de espalda intenso, escalofríos, cefaleas, náuseas o vómitos y pérdida del apetito. Posteriormente, la mayoría de los pacientes mejoran y los síntomas remiten en un plazo de 3 o 4 días.
- Segunda etapa o fase tóxica: A este estado llegan un 15 por ciento de los pacientes. En este caso, la fiebre se vuelve más elevada y se ven afectados distintos sistemas orgánicos.
Después, el paciente comienza a presentar ictericia y se queja de dolor abdominal con vómitos. Además, pueden producirse hemorragias orales, nasales, oculares o gástricas, sangre en los vómitos o las heces e insuficiencia renal.
La mitad de los pacientes que entran en esta fase mueren en un plazo de 10 a 14 días y el resto se recupera sin lesiones graves en sus órganos.
Causas:
La fiebre amarilla está causada por un virus que se transmite por la picadura de zancudos. Una persona puede contagiarse si el mosquito se encuentra infectado por el virus.
A pesar de ser una enfermedad que se localiza en países concretos del mundo (sobre todo en Suramérica y África subsahariana), cualquier persona puede infectarse, aunque las personas de mayor edad presentan un riesgo más elevado de alcanzar el estadio grave de la enfermedad.
¿Cómo prevenir?:
La vacunación es la medida más eficaz contra el contagio, por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la recomienda para cualquier viaje fuera de áreas urbanas en países situados en zonas de América Central y del Sur y parte del África Subsahariana. Esta vacuna debe ser administrada en los centros oficiales de vacunación acreditados por la OMS. Una dosis proporciona inmunidad durante diez años a partir del décimo día de administración.
Otras medidas de prevención son evitar la picadura de los mosquitos y controlar su reproducción.
Factores de riesgo:
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se calcula que, cada año, se producen en el mundo 130.000 casos de esta enfermedad que causan 44.000 muertes en países endémicos africanos. Los casos graves que no se tratan, provocan una tasa de mortalidad que puede llegar al 50 por ciento.
El número de infectados por esta enfermedad ha aumentado en las dos últimas décadas debido a una disminución de la inmunidad de la población, la deforestación, los movimientos de la población, el cambio climático y la urbanización.
Hay varias especies diferentes de mosquitos Aedes y Haemogogus que transmiten el virus. Los mosquitos se crían cerca de las casas (domésticos), en el bosque (salvajes) o en ambos hábitats (semidomésticos).
Descripción general:
La fiebre tifoidea es una enfermedad infecciosa sistémica que se caracteriza por que el paciente presenta fiebre elevada y síntomas abdominales causados por la infección de la bacteria Salmonella typhi.
Síntomas:
Los síntomas se caracterizan fundamentalmente por una fiebre elevada y sostenida (39ºC-40ºC). Además, las personas afectadas por esta patología pueden presentar debilidad, dolor abdominal, dolor de cabeza y pérdida de apetito.
Causas:
La causa de la fiebre tifoidea es la infección por la bacteria Salmonella typhi. La infección sólo se adquiere al ingerir agua o alimentos contaminados por estas bacterias por las heces (raramente por la orina) de enfermos o portadores de la infección (transmisión fecal-oral).
Las bebidas y los alimentos que con más frecuencia pueden estar contaminados por la bacteria son la leche, el queso, los helados y otros derivados lácteos, los mariscos que crecen en lugares cercanos a puntos de eliminación de las aguas residuales, las verduras regadas con aguas fecales, los huevos, algunas carnes y el agua.
El contagio directo entre el enfermo y las personas de su entorno es posible, pero no frecuente. Las moscas también pueden actuar como transmisoras.
¿Cómo prevenirlo?:
El control de la manipulación de alimentos y la conservación de la comida y el tratamiento adecuado de las aguas residuales, con el fin de evitar la contaminación de las aguas de consumo, junto con la educación sanitaria de la población, pueden ser herramientas eficaces para prevenir el contagio de la fiebre tifoidea. Las medidas individuales son fundamentales:
- Higiene básica, como lavarse las manos antes de comer.
- No comer alimentos preparados en puestos callejeros.
- No tomar bebidas con hielo de dudosa procedencia.
- Abstenerse de tomar infusiones o té en lugares que no gocen de su confianza.
- No ingerir productos lácteos, excepto si está completamente seguro de que han sido pasteurizados.
- Las verduras y hortalizas han de consumirse cocidas y cuando aún estén calientes.
- La fruta debe ser lavada antes de pelarla.
- Los pescados y mariscos no deben consumirse crudos, deben ser hervidos al menos durante diez minutos antes de su consumo.
Factores de riesgo:
Se estima que se producen 22 millones de casos de fiebre tifoidea al año en todo el mundo, que dan como resultado 200.000 muertes. De ahí la importancia de adoptar medidas preventivas cuando se viaja a las zonas con mayor incidencia de esta enfermedad.
Descripción general:
La fimosis se produce cuando el orificio del prepucio, la piel que recubre a todo el pene, es demasiado estrecho para dejar salir al glande. Por lo tanto, el prepucio no puede ser totalmente retraído sobre el glande.
Síntomas:
Los síntomas que se presentan son:
- Coito doloroso.
- Balanitis.
- Infecciones de orina.
- Problemas en la micción.
- Adherencias balanoprepuciales.
Causas:
Se cree que la causa de la fimosis es congénita, pero también puede ser debida a retracciones forzadas del prepucio de los bebés durante su higiene por los padres, que crea anillos fibrosos en el prepucio y adherencias balanoprepuciales. Hay tres situaciones que impiden la retracción del prepucio:
- La punta del prepucio es demasiado estrecha para pasar sobre el glande. Esto es normal en niños y adolescentes prepúberes.
- La superficie interna del prepucio se fusiona con el glande del pene. Esto es normal en niños y adolescentes, pero anormal en adultos.
- El frenillo del pene es demasiado corto para permitir la retracción completa del prepucio (una condición llamada frenillo breve o corto).
¿Cómo prevenirlo?:
No hay modo de prevenir la fimosis de origen congénito, pero en los otros casos sí es posible prevenirla teniendo especial cuidado con la higiene del pene, practicando un retroceso regular del glande y, sobre todo, no forzarlo en caso de que ya haya fimosis, ya que si no, puede complicarse en una parafimosis.
Factores de riesgo:
El diagnóstico de la fimosis es visual, con una inspección donde se puede comprobar la falta de retracción prepucial, valorando el grado de estrechez y en qué grado queda descubierto el glande. Además, se pueden objetivar posibles complicaciones como infección, balanitis o incluso la asociación de un tumor de pene.
Descripción general:
La gastritis es la inflamación aguda o crónica de la mucosa que recubre las paredes del estómago.
Síntomas:
- Ardor de estómago.
- Dolor abdominal.
- Náuseas y vómitos.
- Acidez de estómago.
- Aerofagia.
- Ausencia de hambre o inapetencia, que en ocasiones puede producir pérdida de peso.
- Heces de color negro y vómitos con sangre, en el caso de que la gastritis cause sangrado en el revestimiento del estómago.
Causas:
Las causas que pueden provocar la inflamación del revestimiento del estómago son:
- Algunos fármacos, como el ácido acetilsalicílico, el naproxeno o el ibuprofeno.
- Infección del estómago con la bacteria Helicobacter pylori.
- Abuso de alcohol o ingesta de sustancias corrosivas, como algún tipo de veneno.
- Ingesta de alimentos picantes.
- Consumo de cocaína.
- Fumar.
- Reflujo de bilis hacia el estómago o reflujo biliar.
- Trastornos autoinmunes.
- Infección viral, sobre todo en personas con déficits en el sistema inmunológico.
- Estrés excesivo.
¿Cómo prevenirlo?:
Evitar el uso prolongado de medicamentos como el naproxeno, el ibuprofeno o el ácido acetilsalicílico, así como reducir o suprimir la ingesta de alcohol y de comidas que puedan irritar el revestimiento estomacal, evitará que se desarrolle una gastritis causada por este tipo de agentes.
Factores de riesgo:
La gravedad de la enfermedad y su duración dependen del agente causante, por lo que en la mayoría de las ocasiones la gastritis se cura cuando desaparece la sustancia, enfermedad o afección que la provoca. Las principales complicaciones que se pueden presentar son el sangrado y el aumento del riesgo de sufrir cáncer de estómago.
En ocasiones, si la mucosa que recubre el estómago permanece demasiado tiempo alterada, los ácidos pueden llegar a causar úlceras. La complicación más grave es el cáncer de estómago.
Descripción general:
La gastroenteritis es una infección o inflamación del revestimiento interno (mucosa) del estómago y el intestino delgado que puede estar causada por agentes infecciosos (virus, bacterias, parásitos), toxinas químicas y fármacos.
Síntomas:
- Dolores abdominales.
- Vómitos.
- Náuseas.
- Diarrea.
- En ocasiones, fiebre y dolor de cabeza.
Causas:
La gastroenteritis se puede producir por tres tipos de microorganismos: virus, parásitos y bacterias. Estos organismos, presentes en las heces de un infectado, pueden contaminar alimentos y bebidas, así como otros objetos (cubiertos, platos y otros utensilios), y se transmiten cuando una persona entra en contacto con ellos. También se pueden transmitir de una persona a otra por contacto directo.
¿Cómo prevenir?:
Dado que las gastroenteritis se transmiten fácilmente de persona a persona, es conveniente extremar las medidas de precaución, en especial el lavado de manos frecuente por parte de los afectados y las personas de su entorno.
También es conveniente adoptar precauciones cuando se consumen alimentos que pueden estar contaminados con Salmonella, como es el caso de los productos elaborados con huevo crudo.
Gran parte de las gastroenteritis estivales se deben a la ingestión de agua no tratada. Cuando se viaje a sitios en los que se bebe agua extraída de pozos o fuentes, es recomendable que el agua que se emplee para beber o limpiar alimentos que no vayan a ser cocinados sea hervida o esterilizada.
Factores de riesgo:
La gastroenteritis puede afectar a cualquier persona, pero hay personas con una especial vulnerabilidad tanto a padecerla como a sufrir sus consecuencias:
- Personas mayores, cuyo sistema inmune es menos eficiente. Son especialmente propensos los ancianos que viven en residencias.
- Bebés y niños. Las escuelas de educación infantil y los colegios de primaria son focos de transmisión de virus que causan gastroenteritis. Hay que tener en cuenta que el sistema inmune de los niños aún no está totalmente desarrollado.
- Residencias de estudiantes o de otro tipo. Los lugares en los que se congregan muchas personas en ambientes cerrados pueden promover la transmisión de infecciones intestinales.
- Enfermos inmunodeprimidos. Las personas con VIH/ sida, en tratamiento con quimioterapia y, en general, enfermedades que debiliten el sistema inmune tienen mayor propensión a contraer infecciones de todo tipo.
Descripción general:
El glaucoma es una enfermedad neurodegenerativa del nervio óptico que produce una pérdida de visión progresiva y que, en general, está relacionada con un aumento de la tensión ocular.
Síntomas:
Al principio, el incremento de la presión ocular no produce ningún síntoma. Las manifestaciones posteriores pueden incluir una disminución del campo visual periférico, ligeros dolores de cabeza y sutiles trastornos visuales, como ver halos alrededor de la luz eléctrica o tener dificultad para adaptarse a la oscuridad.
Cuando ya se produce la pérdida de visión, la persona puede presentar visión en túnel (un estrechamiento extremo del campo visual que dificulta ver objetos a ambos lados cuando se mira de frente).
En los casos en los que se presenta un dolor extremo en el ojo, enrojecimiento y pérdida de visión súbita es indispensable acudir al médico de forma urgente, ya que estos son los síntomas más habituales de un glaucoma agudo de ángulo cerrado.
Causas:
Se desconocen las causas que producen la enfermedad. El problema es que una vez detectada se puede frenar su progresión, pero no recuperar la pérdida de fibras del nervio óptico o de sensibilidad en el campo visual o de la visión. Por eso es esencial realizar revisiones oftalmológicas para detectar su aparición cuanto antes.
De hecho, se recomienda que estas revisiones periódicas se realicen a partir de los 40-45 años especialmente en las personas con riesgo de desarrollar un glaucoma. Estos grupos de riesgos son:
- Los mayores de 60 años.
- Personas con antecedentes familiares de glaucoma.
- Personas de raza negra o asiática.
- Personas con miopía, en especial cuando se tienen cinco o más dioptrías.
- Pacientes medicados con corticoides.
- Personas con diabetes o hipertensión arterial.
¿Cómo prevenirlo?:
La única forma de prevenir el glaucoma es ir al oftalmólogo y diagnosticarlo precozmente. Puesto que se trata de “una enfermedad muy traicionera”, esta puede pasar desapercibida durante sus primeros estados. Así, someterse a revisiones periódicas en las que se mida la presión intraocular es la forma más eficaz de detectarlo precozmente y de frenar su avance.
Factores de riesgo:
El tratamiento del glaucoma se basa en la detención de la evolución del mismo, ya que la visión que se pierde cuando se produce esta patología no puede recuperarse. Es por ello que la detección precoz de la enfermedad es muy importante para conseguir que se pierda el menor grado de visión posible.
Descripción general:
Un golpe de calor o shock térmico es el sobrecalentamiento que sufre el cuerpo debido a las altas temperaturas o un exceso de ejercicio físico.
La falta de hidratación hace que diversos órganos dejen de funcionar como lo harían de forma habitual. El golpe de calor se origina a consecuencia de un fracaso agudo de la termorregulación y constituye una urgencia médica extrema porque es a la vez de aparición muy rápida (de 1 a 6 horas) y de evolución fatal (puede ocasionar la muerte en menos de 24 horas si no se trata rápidamente).
Síntomas:
- Sensación de debilidad.
- Dolor de cabeza y mareos, pérdida de conciencia.
- Aceleramiento de los latidos del corazón (palpitaciones).
- Orinar poco.
- Sequedad y enrojecimiento de la piel.
- Anhidrosis (ausencia de sudor).
- Hiperventilación.
Causas:
El organismo tiende a sudar cuando la temperatura corporal va aumentando para mantenerse fresco. Cuando la temperatura del exterior es muy alta, el cuerpo expulsa el sudor de manera más lenta, lo que provoca que el cuerpo no se refresque lo suficiente si no se han tomado medidas adicionales. Si el cuerpo alcanza un alto grado de deshidratación y temperatura elevada (por encima de los 40ºC), algunos órganos comienzan a funcionar de manera errática, lo que provoca los distintos síntomas.
¿Cómo prevenirlo?:
Recomendaciones para combatir el calor y evitar que este provoque un golpe de calor:
- Mantenerse hidratado constantemente bebiendo agua u otros líquidos. Se deben evitar bebidas alcohólicas, café, té o bebidas muy azucaradas.
- Permanecer en lugares frescos o a la sombra.
- En casa, bajar las persianas y cerrar ventanas para evitar que entre el sol, especialmente en las horas de mayor temperatura.
- Comer de forma ligera, como ensaladas, frutas, verduras o zumos.
- No hacer ejercicio al aire libre en las horas de mayor temperatura, generalmente desde las 12 del mediodía hasta las cinco de la tarde.
- En la calle, utilizar ropa ligera y de color claro, que atrae menos el sol, calzado fresco que permita la transpiración y sombreros.
Factores de riesgo:
No existen índices para determinar la supervivencia de alguien que sufra un golpe de calor. Las secuelas y la supervivencia están relacionadas con el reconocimiento temprano de los síntomas o la rapidez con la que se enfría el cuerpo.
Descripción general:
Es una infección de transmisión sexual (ITS) causada por una bacteria denominada Neisseria gonorrhoeae, que afecta al tracto genital, la boca y el ano. Se contagia mediante el contacto sexual y también se denomina “blenorragia” o “gonococia”.
Síntomas:
Los síntomas de la gonorrea suelen aparecer de 2 a 5 días después de producirse la infección en el caso de las mujeres, mientras que en los hombres suele llegar a tardar hasta un mes.
Es importante tener en cuenta que en algunos casos no se observan síntomas iniciales de la infección, de hecho, cuatro de cada cinco mujeres y uno de cada diez hombres con gonorrea desconocen su diagnóstico.
Los síntomas que pueden aparecer en las mujeres son:
- Dolor abdominal.
- Flujo vaginal amarillento.
- Sangrado entre periodos menstruales.
- Dolor al tener relaciones sexuales y al orinar.
- Necesidad de orinar más frecuentemente.
- Vómitos.
- Hinchazón o sensibilidad en la vulva.
- Fiebre.
- Irregularidades en la menstruación.
En el caso de los hombres, los síntomas pueden ser:
- Secreción parecida al pus en el pene.
- Dolor o sensación de ardor al orinar.
- Necesidad de orinar más frecuentemente.
También existen otros síntomas comunes en ambos sexos que pueden ser: picazón en el ano o secreciones y movimientos intestinales dolorosos.
Causas:
La gonorrea es una enfermedad que se propaga por el contacto sexual, que en el caso de las mujeres embarazadas, puede causar un parto prematuro o infecciones en la sangre, en las articulaciones o en los ojos del recién nacido.
Las bacterias causantes de esta infección crecen en las zonas del cuerpo que se encuentran húmedas y cálidas. En las mujeres, estas bacterias se pueden localizar en el aparato reproductor o incluso en los ojos. Existe mayor probabilidad de contagio si:
- No se usa condón en las relaciones sexuales, sobre todo, si se tienen múltiples compañeros sexuales.
- Se mantienen relaciones sexuales con una persona contagiada.
- Se consume alcohol o drogas en exceso (esto suele producirse en un número mínimo de casos).
¿Cómo prevenirlo?:
Las opciones para prevenir la gonorrea, según los especialistas, pueden ser:
- Abstenerse de mantener relaciones sexuales.
- Si se decide mantenerlas, tanto vaginales como anales, se recomienda el uso de condones femeninos de látex.
- El contagio a través del sexo oral es poco frecuente pero puede reducirse el riesgo con el uso de preservativos.
- Si se tiene la infección se recomienda no mantener relaciones sexuales hasta que no se concluya con el tratamiento.
- Ya que muchas veces los síntomas tardan en aparecer se recomienda a las personas que están en riesgo que se realicen análisis con frecuencia.
Factores de riesgo:
Cuando la gonorrea no se trata, puede provocar problemas graves de salud de carácter permanente, tanto en hombres como en mujeres.
En las mujeres, la gonorrea sin tratar puede dar lugar a una enfermedad inflamatoria pélvica, además de otra serie de complicaciones:
- Formación de tejido cicatricial que puede obstruir las trompas de Falopio.
- Embarazo ectópico (fuera del útero).
- Dolor pélvico o abdominal crónico.
- Infertilidad (incapacidad para quedar embarazada).
En los hombres, la infección causa dolor en los conductos de los testículos, lo que puede provocar infertilidad, aunque estas consecuencias suelen ser poco comunes. Además, puede propagarse a la sangre o a las articulaciones, lo que puede ser mortal.
Descripción general:
Granulomas bien definidos, no caseificados, distribuidos en todo el parénquima del hígado.
Síntomas:
Los pacientes presentan generalmente fiebre de origen desconocido. La temperatura es a veces superior a los 41 °C y la mayoría de los pacientes sufren escalofríos sudoración nocturna. Casi siempre hay astenia. Manifestaciones menos frecuentes son artralgias, pérdida de peso, dolor abdominal, náuseas y vómitos. Más del 50 % de los pacientes hepatomegalia, esplenomegalia o ambas. Raramente aparecen signos de hipertensión portal.
Causas:
Puede haber granulomas hepáticos asociados a la tuberculosis, sarcoidosis, reacciones medicamentosas, brucelosis, infecciones por hongos, cirrosis biliar primaria, mononucleosis infecciosa, enfermedad de hodgkin, vasculitis, beriliosis, e infecciones parasitarias.
¿Cómo prevenir?:
Seguimiento adecuado a patología subyacentes.
Factores de riesgo:
Tuberculosis, sarcoidosis, reacciones medicamentosas, brucelosis, infecciones por hongos, cirrosis biliar primaria, mononucleosis infecciosa, enfermedad de hodgkin, vasculitis, beriliosis, e infecciones parasitarias.
Tips para detectar la enfermedad:
Vigilancia de las pruebas hepáticasen los pacientes con factores de riesgo.
Descripción general:
Es una enfermedad infecciosa aguda de las vías respiratorias producida por un virus. Si algo caracteriza a este microorganismo es su elevada capacidad de transmisión. El virus pasa con mucha facilidad de una persona a otra a través de las gotitas de saliva que se expulsan al hablar, toser o estornudar.
Síntomas:
El cuadro clínico inicial de la gripe suele comenzar de forma brusca con fiebre y escalofríos que aparecen junto con dolor de cabeza, molestias de garganta, malestar general, dolores musculares y tos seca. Con la fiebre los síntomas respiratorios se hacen visibles: congestión nasal, enrojecimiento e inflamación en la garganta.
Causas:
La causa de esa enfermedad infecciosa respiratoria son los virus de la gripe pertenecen a la familia Orthomyxoviridae, constituida por los géneros Influenzavirus A, Influenzavirus B e Influenzavirus C. Se contagia de persona a persona a través de las secreciones respiratorias y el periodo de transmisibilidad se extiende desde 24-48 horas antes del inicio de los síntomas hasta 5-6 días después.
¿Cómo prevenirlo?:
- Mantener una buena higiene, que incluye lavarse frecuentemente las manos y la conveniente limpieza del hogar.
- Beber mucho líquido.
- Taparse la boca y la nariz al toser o estornudar con un pañuelo de usar y tirar.
- Dormir las horas necesarias.
- Huir de los ambientes fríos y secos.
- En caso de contraer la infección, procurar quedarse en casa hasta pasar 24 horas sin fiebre para evitar contagiar a los demás.
Factores de riesgo:
Los grupos de población con mayor riesgo de tener complicaciones como consecuencia de la infección gripal y en los que se recomienda la vacunación son:
- Mayores de 65 años.
- Mujeres embarazadas.
- Niños menores de 2 años y mayores de 6 meses.
- Personas con enfermedades crónicas cardiacas, hepáticas, renales, pulmonares (como aquellos que tienen EPOC), sanguíneas, metabólicas e inmunodepresión.
- Personas que conviven o cuidan a pacientes con riesgo.
Descripción general:
La hemocromatosis es una enfermedad hereditaria que afecta al metabolismo humano del hierro, provocando un acumulo excesivo e incorrecto de este metal en los órganos y sistemas del organismo.
Síntomas:
Además del hígado, que es el órgano más afectado en los pacientes hemocromatosis, existen otros tejidos que sufren la sobrecarga férrica: páncreas, corazón, órganos endocrinos (hipotálamo, hipófisis, tiroides), articulaciones y piel.
La alteración de cada uno de estos órganos, que será variable en cada paciente, es lo que determina la clínica.
Causas:
Es una enfermedad hereditaria que afecta grupo familiares y poblacionales.
¿Cómo prevenir?:
Detección de la mutaciones más usuales en los grupo poblacionales o familiares de riesgo.
Factores de riesgo:
Mutación homocigota de C282Y, H63D y S65C. ó Heterocigota C282Y/H63D.
Tips para prevenir:
Búsqueda activa en grupo de riesgo.
Descripción general:
Un hemangioma es una neoplasia, generalmente benigna, de los vasos sanguíneos caracterizada por la aparición de un gran número de vasos normales y anormales.
Síntomas:
Asintomático como hallazgo casual en un prueba de imagen y en raros casos dolor o sangrado espontaneo.
Causas:
Es una enfermedad congénita.
Cómo prevenir:
Al ser una enfermedad congénita no se puede prevenir, lo mejor sería hacer un diagnóstico precoz.
Factores de riesgo:
Es un enfermedad genética.
Descripción general:
La hepatitis A (antes hepatitis vírica, también hepatitis viral y hepatitis infecciosa) es la enfermedad infecciosa que más comúnmente produce hepatitis (literalmente: "inflamación del hígado") aguda en el mundo. Es causada por el virus de la hepatitis A (VHA), cuyo reservorio natural es solamente humano.
Síntomas:
La persona infectada con hepatitis A puede sentirse como si tuviera gripe o bien puede no tener ningún síntoma.Los síntomas de la infección por virus de la hepatitis A suelen ser de aparición brusca, y consisten en dolor en el hipocondrio derecho, ictericia (piel y ojos amarillos) y orina oscura.
Causas:
La hepatitis A se contagia por vía orofecal (ingesta de partículas fecales contaminadas). Se propaga debido al contacto con zonas poco higiénicas o ingestión de alimentos contaminados.
¿Como prevenir?:
Manteniendo una buena higiene.
Factores de riesgo:
Mala disposición de excretas y la ausencia de vacunación.
Descripción general:
Inflamación hepática debido al consumo excesivo de alcohol. Mientras la cirrosis es una etapa tardía de la hepatopatía alcohólica, la hepatitis alcohólica es una etapa temprana de la enfermedad.
Síntomas:
Síntomas como ascitis, edema, fatiga, ictericia, y encefalopatía hepática pueden variar según la respuesta del propio organismo. Muchos casos son auto limitados, mientras que aquellos casos más severos incluso ponen en riesgo la vida del paciente.
Causas:
Se desarrolla por el consumo excesivo de alcohol.
Factores de riesgo:
Consumo excesivo de alcohol.
Cuándo consultar:
Consultar si se está presentado abuso o dependencia al alcohol.
Descripción general:
Es un tipo de hepatitis de carácter autoinmune, es decir, el proceso de inflamación y destrucción del hígado es secundario a una respuesta anómala por parte del sistema inmunitario en contra de los antígenos presentes en la superficie de los hepatocitos.
Síntomas:
La hepatitis autoinmune puede presentarse completamente asintomática (12-35% de los casos), con signos de enfermedad hepática crónica o insuficiencia hepática aguda e incluso fulminante.
Causas: Puede ser por causas genéticas o exposición a toxico o virus.
Cómo prevenir: Visitando al médico si hay antecedentes familiares.
Factores de riesgo:
- Consumo de medicamentos o sustancia no licenciadas.
- Puede percatarse de la hepatitis si presenta alguna alteración de la pruebas hepáticas. De ser así, aconsejamos visitar un especialista.
Descripción general:
La hepatitis B es una enfermedad infecciosa del hígado causada por el virus de la hepatitis B, perteneciente a la familia Hepadnaviridae (virus ADN hepatotrópico) y caracterizada por necrosis hepatocelular e inflamación. Puede causar un proceso agudo o un proceso crónico, que puede acabar en cirrosis del hígado, cáncer de hígado, insuficiencia hepática, fatiga, fiebre, ictericia e incluso la muerte.
Síntomas:
Fatiga, Náuseas, Fiebre baja, Pérdida del apetito, Dolor muscular y de estómago, Diarrea, Dolor de cabeza. Posteriormente, la mayoría de los pacientes desarrollan los siguientes signos; Coluria u oscurecimiento de la orina.
Acolia o deposiciones de color claro, Ictericia o color amarillento de los ojos y la piel.
Causas:
La transmisión del virus de la hepatitis B resulta de la exposición de la sangre infectada o fluidos corporales que contengan sangre. Las formas posibles de transmisión incluyen contacto sexual, transfusión sanguínea, reutilización de agujas y jeringuillas, y transmisión vertical de madre a hijo durante el parto.
Cómo prevenir:
Vacunación, control adecuado de la mujer embarazada y sexo seguro.
Factores de riesgo:
Falta de vacunación, prácticas sexuales inseguras y falta de control prenatal.
Descripción general:
La hepatitis C es una enfermedad infecciosa que afecta principalmente al hígado y es causada por el virus de la hepatitis C (VHC). La infección aguda es por lo general asintomática, pero la infección crónica puede producir lesión en el hígado y a la larga originar cirrosis.
Síntomas:
La infección de hepatitis C presenta síntomas agudos en el 15 por ciento de los casos.Alrededor del 80% de las personas expuestas al virus contraen una infección crónica. Durante las primeras décadas con la infección, la mayoría de los pacientes presentan síntomas mínimos o ningún síntoma, aunque la hepatitis C crónica puede estar asociada con el cansancio. Después de varios años, la hepatitis C se convierte en la causa principal de cirrosis y cáncer de hígado.
Causas:
La hepatitis C se contrae principalmente mediante el contacto con sangre contaminada asociado con el consumo de drogas por vía intravenosa, el uso de instrumental médico no esterilizado y las transfusiones de sangre no testadas previamente.
¿Cómo prevenir?:
Estudio de los pacientes con factores de riesgo.
Descripción general:
Es el proceso de inflamación y destrucción del hígado, es secundario a una respuesta anómala a sustancia autorizadas o no autorizadas.
Síntomas:
puede presentarse completamente asintomática, con signos de enfermedad hepática crónica o insuficiencia hepática aguda e incluso fulminante.
Causas:
Reacción de hipersensibilidad o toxicidad directa.
¿Cómo prevenir?:
No consumir sustancias no autorizada o las autorizada siempre bajo vigilancia médica.
Factores de riesgo:
Consumo de medicamentos o sustancia no licendiadas.
Descripción general:
Es un depósito de ácidos grasos en el hígado.
Síntomas:
Se presenta como dolor al lado derecho del abdomen ó crecimiento del hígado.
Causas:
El hígado graso se asocia comúnmente con un consumo excesivo de alcohol o el síndrome metabólico (diabetes, hipertensión, obesidad y dislipidemia), pero también puede deberse a otras causas.
¿Cómo prevenir?:
Adecuado estilo de vida y evitar el alcohol en exceso.
Factores de riesgo:
Diabetes, hipertensión, obesidad y dislipidemia. Puede percatarse de que está sufriendo de Hígado graso realizando una ecografía, y consultar con un especialista.
Descripción general:
Es la enfermedad genética más frecuente, y se caracteriza por un aumento en el colesterol LDL desde el nacimiento.
Síntomas:
Algunos indicios de hipercolesterolemia familiar, según la Fundación de Hipercolesterolemia Familiar son:
- Colesterol LDL muy elevado.
- Antecedentes de infarto de miocardio o enfermedades aterotrombóticas en la familia a edades tempranas.
- Presencia de otros síntomas, como arco corneal y/o xantomas tendinosos.
Causas:
Esta enfermedad se produce por una mutación en el gen que codifica el receptor de las LDL (rLDL), que son los encargados de eliminar el colesterol de la sangre a nivel hepático.
Al disponer de una menor cantidad de receptores, ya sea parcial o total, el colesterol LDL aumenta considerablemente en la sangre, favoreciendo su depósito en las arterias y el desarrollo de una placa que puede estrechar la luz de las arterias, lo que produce la ateroesclerosis.
En resumen, las personas afectadas por esta enfermedad tienen niveles de colesterol alto, debido a que el colesterol no es eliminado correctamente en el hígado por una escasez de receptores.
¿Cómo prevenirlo?:
Al ser una enfermedad genética no se puede prevenir pero sí se puede controlar gracias a los tratamientos existentes que deben administrarse de por vida ya que es una enfermedad crónica.
Factores de riesgo:
Es importante señalar que una persona afectada por esta enfermedad tiene el 50% de probabilidades de transmitir el gen anormal a sus descendientes, hijos e hijas, y un 50% de traspasar la información genética correcta. Por lo tanto, aproximadamente la mitad de los miembros de una familia heredarán hipercolesterolemia.
Descripción general:
La sudoración excesiva o hiperhidrosis es un trastorno frecuente que produce sudor en cantidades mucho más grandes de las necesarias para controlar su temperatura corporal. Se trata de una patología que afecta por igual a hombres ya mujeres; por lo general, comienza a manifestarse en la infancia y la adolescencia.
Síntomas:
El síntoma de la hiperhidrosis es un exceso de sudor que se produce sobre todo en las axilas, las ingles, las palmas de las manos, las plantas de los pies, aunque también puede hacerse evidente en zonas como la frente o el labio superior. Como consecuencia, puede aparecer mal olor corporal, por lo que es necesario extremar la higiene y tomar medidas para reducir sus efectos.
Causas:
Las causas que originan la sudoración excesiva se desconocen, si bien los estudios datan que puede existir una predisposición genética, o bien factores de tipo emocional como el estrés, la tensión y la ansiedad pueden incrementar la actividad de las glándulas sudoríparas y agravar la hiperhidrosis.
En ocasiones, el sudor es consecuencia de una infección mixta por hongos o bacterias.
Cómo prevenirlo:
Las principales medidas de prevención son:
- Usar frescas que utilizan la transpiración y preferiblemente de fibras sintéticas en vez de fibras naturales, pues repelen el sudor y mantiene la ropa seca.
- Mantener la vivienda y el lugar de trabajo fresco y bien ventilado.
- Evitar el consumo de alcohol, café, té, tabaco y alimentos picantes que puedan estimular la producción de sudor.
- Reducir los efectos psicológicos relacionados con la sudoración, como el estrés, la tensión y la ansiedad.
- Extremar la higiene corporal y utilizar productos desodorantes para reducir lo máximo posible el mal olor corporal.
- Usar ácido bórico o polvos de talco para regular la sudoración, especialmente en los pies.
Factores de riesgo:
La sudoración excesiva o hiperhidrosis es un trastorno frecuente que ocasiona importantes molestias e incluso favorece las infecciones. Tiene un gran impacto en la calidad de vida de las personas y llega incluso a condicionar la elección del tipo de trabajo, la vestimenta y la participación en actividades sociales de quienes lo padecen.
Las manos y los pies sudorosos son una respuesta normal a la ansiedad y también es habitual que una persona sude mucho cuando tiene fiebre. Sin embargo, una sudación frecuente y abundante en todo el cuerpo requiere atención médica porque puede ser un signo de hiperactividad del tiroides, una baja concentración de glucosa en la sangre o una alteración en la región del sistema nervioso que controla la sudoración.
Descripción general:
Es una patología crónica en la que los vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta, lo que puede dañarlos. La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada por el corazón.
Cuanto más alta es la tensión, más esfuerzo tiene que realizar el corazón para bombear.
Síntomas:
Algunos síntomas que se pueden presentar son:
- Dolor de cabeza fuerte.
- Náuseas o vómitos.
- Confusión.
- Cambios en la visión.
- Sangrado nasal.
En algunos casos, la presión arterial elevada no presenta síntomas. Si no se trata, con el tiempo, puede provocar trastornos de la salud, como enfermedades cardíacas y derrames cerebrales.
Causas:
Aunque todavía no se conocen las causas específicas que provocan la hipertensión arterial, sí se ha relacionado con una serie de factores que suelen estar presentes en la mayoría de las personas que la sufren.
Conviene separar aquellos relacionados con la herencia genética, el sexo, la edad y la raza, y por tanto poco modificables, de aquellos otros que se podrían cambiar al variar los hábitos y el ambiente en el que viven las personas, como la obesidad, la sensibilidad al sodio, el consumo excesivo de alcohol, el uso de ciertos fármacos y un estilo de vida muy sedentario.
Aproximadamente el 5 por ciento de las mujeres que toman anticonceptivos orales puede desarrollar hipertensión. Los factores de riesgo para la hipertensión asociada con el consumo de anticonceptivos orales incluyen la enfermedad renal leve y la obesidad.
¿Cómo prevenir?:
Tener hábitos de vida saludable y, sobre todo, evitar el sobrepeso y la obesidad, son los principales factores para prevenir la aparición de la hipertensión.
Los especialistas señalan que llevar una dieta sana y practicar ejercicio puede ayudar a que la población general esté exenta de sufrir esta patología. Dejar de fumar también previene esta enfermedad, ya que el tabaco eleva la presión arterial.
En los casos en los que en la familia haya antecedentes de hipertensión y haya una predisposición a ser hipertenso a lo largo del tiempo, este factor genético supone una llamada de atención adicional a que el paciente cuide esos hábitos de vida y vigile sus cifras de tensión arterial.
Factores de riesgo:
Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la principal causa de complicaciones y de mortalidad a nivel mundial. Esta situación se mantendrá en los próximos años debido al auge de obesidad que se viene presentando, y que se espera que aumente con los años.
Descripción general:
La ictericia es la coloración amarillenta de la piel y mucosas debida a un aumento de la bilirrubina (valores normales de 0,3 a 1 mg/dl) que se acumula en los tejidos, sobre todo aquellos con mayor número de fibras elásticas (paladar, conjuntiva).
Síntomas:
Es un signo caracterizadoporcoloración amarillenta de la piel y mucosas.
Causas:
La ictericia prehepática se debe a la liberación de bilirrubina no conjugada por destrucción de eritrocitos (anemia hemolítica) o por el aumento de bilirrubina libre a causa de bajos niveles de albúmina, su principal transportador (hipoalbuminemia). Algunos ejemplos son la hemólisis debido a esplenomegalia, y la eritropoyesis inefectiva.
La ictericia hepática se debe a problemas con el árbol biliar dentro del hígado que puede ser por destrucción de los hepatocitos, así como alteraciones del flujo por estos conductos. Algunos ejemplos son la cirrosis hepática, la hepatitis viral aguda, la hepatitis crónica, la enfermedad de Wilson y enfermedad de Gilbert.
La ictericia posthepática se debe a la obstrucción del colédoco, lo que provoca una disminución de la velocidad de tránsito de la bilirrubina (colestasis) en cualquier punto del árbol biliar, ya sea por un cálculo a nivel de la vesícula biliar o incluso por la compresión originada por un cáncer de cabeza de páncreas. Algunos ejemplos son la coledocolitiasis y el cáncer de cabeza de páncreas.
¿Cómo prevenirlo?:
Seguimiento adecuado a patología subyacentes.
Factores de riesgo:
Enfermedades que afectan el hígado, la vía biliar y el páncreas.
Tips para prevenirlo:
Examen fisco adecuado.
Descripción general:
Es una enfermedad cerebrovascular que afecta a los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro. También se le conoce como accidente cerebrovascular (ACV), embolia o trombosis.
Síntomas:
En general, los ictus son de inicio súbito y de rápido desarrollo, y causan una lesión cerebral en minutos. Con menos frecuencia, un ictus puede ir empeorando a lo largo de horas, incluso durante uno o dos días, a medida que se va necrosando un área cada vez mayor de tejido cerebral . Por lo general, esta progresión suele interrumpirse, aunque no siempre, dando paso a períodos de estabilidad en que el área de tejido necrosado deja de crecer de forma transitoria o en los que se observa cierta mejoría.
En función del área del cerebro afectada pueden producirse muchos síntomas diferentes:
- Adormecimiento o debilidad repentina en la cara, el brazo o una pierna, especialmente en uno de los lados del cuerpo.
- Confusión repentina, dificultad para hablar o para entender.
- Repentina dificultad para andar, mareo, pérdida de equilibrio o coordinación.
- Dolor de cabeza repentino sin que se conozca la causa.
- Parálisis de uno de los lados del cuerpo.
- Problemas del habla o del lenguaje.
- Estilo de comportamiento cauto, enlentecido.
- Pérdida de memoria.
- Problemas en la visión.
- Comportamiento inquisitivo, acelerado.
- Pérdida de memoria.
Causas:
- Edad avanzada
- Sexo
- Herencia familiar y raza
- Haber sufrido un ictus recientemente
- Tener la presión sanguínea elevada
- Fumar
- Padecer diabetes mellitus
- Sufrir enfermedad de la arteria carótida
- Presentar enfermedad cardiaca
- Sufrir ataques isquémicos transitorios
- Contador de glóbulos rojos alto
- La estación del año y el clima
- Consumir alcohol en exceso
- Ciertos tipos de consumo de drogas
¿Cómo prevenirlo?:
Se recomienda una serie de hábitos saludables para evitar sufrir un ictus:
- Llevar una dieta rica y saludable
- Realizar ejercicio de forma habitual y moderada
- No fumar
- Moderar el consumo de alcohol
- Llevar un control de la tensión arterial de forma regular
Factores de riesgo:
Un ictus ocurre cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se rompe o es taponado por un coágulo u otra partícula. Debido a esta ruptura o bloqueo, parte del cerebro no consigue el flujo de sangre, oxígeno y glucosa, que necesita. La consecuencia es que las células nerviosas del área del cerebro afectada no reciben oxígeno, por lo que no pueden funcionar y mueren transcurridos unos minutos.
Descripción general:
Consiste en una infección bacteriana por la cual la parte superficial de la piel (epidermis) sufre una inflamación.
Síntomas:
La enfermedad se presenta en forma de heridas en la piel cubiertas de costras de color amarillento. Entre los síntomas no suele presentarse fiebre y, además, los pacientes suelen tener buen estado general.
Causas:
Las bacterias estafilococos y estreptococos son las causantes del impétigo, que consiste en la infección de la epidermis.
¿Cómo prevenirlo?:
Para prevenir el contagio del impétigo es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Evitar compartir toallas, ropa, cuchillas u otros productos de aseo personal.
- No efectuar contacto con las heridas que supuren.
- Tener un procedimiento estricto de higiene cuando se establece contacto con la piel infectada.
- Llevar una limpieza rigurosa de la piel para evitar futuras infecciones, sobre todo el lavado de manos.
- Tener una correcta hidratación de la piel, para que se active la función barrera.
Factores de riesgo:
El impétigo supone un riesgo alto para pacientes con problemas de riñón (nefrópatas) o con dermatitis atópica.
Descripción general:
Consiste en la pérdida accidental (sin desearlo) de orina, en este caso, en la mujer.
Síntomas:
Salida de orina sin desearlo.
Causas:
Puede asociarse a infección urinaria, alteraciones del sistema nervioso, vejiga hiperactiva (la cual se contrae sin tener un control adecuado), alteración en las estructuras del piso pélvico, infecciones urinarias, entre otros.
¿Cómo prevenirlo?:
En ocasiones los ejercicios de piso pélvico fortalecen estos músculos y disminuyen los síntomas o probabilidad de presentarla. En ciertos casos selectivos el disminuir el consumo de líquidos puede ayudar. Tener un buen hábito miccional desde la infancia ayuda también es un factor importante.
Factores de riesgo:
Embarazo-parto, edad avanzada, postmenopausia, tener malos hábitos miccionales desde la infancia, infecciones urinarias.
Detectar la enfermedad:
La detección es clásicamente sintomática. Hay estudios como cistoscopia, ecografía y urodinamia que ayudan a determinar la severidad y la causa de una forma más objetiva.
¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico.
Descripción general:
Es un síntoma que consiste en la pérdida accidental (sin desearlo) de orina, en este caso asociado a un problema en la vía urinaria o sistema nervioso del hombre.
Síntomas:
Salida de orina sin desearlo.
Causas:
Puede estar asociada principalmente a factores como la cirugía por cáncer de próstata, infección urinaria o por obstrucción de la salida de la orina.
¿Cómo prevenirlo?:
En ocasiones los ejercicios de piso pélvico fortalecen estos músculos y disminuyen los síntomas o probabilidad de presentarla. En ciertos casos selectivos el disminuir el consumo de líquidos puede ayudar.
Factores de riesgo:
Edad avanzada, cirugía urológica (principalmente la de cáncer de próstata), alteraciones del colágeno.
Detectar la enfermedad: La detección es clásicamente sintomática. Hay estudios como cistoscopia, ecografía y urodinamia que ayudan a determinar la severidad y la causa de una forma más objetiva.
¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico.
Descripción general:
Es una patología que se caracteriza por la muerte de una porción del músculo cardíaco que se produce cuando se obstruye completamente una arteria coronaria.
Síntomas:
Los síntomas habituales son:
- Dolor torácico intenso y prolongado, que se percibe como una presión intensa y que puede extenderse a brazos y hombros (sobre todo izquierdos), espalda e incluso dientes y mandíbula. El dolor se describe como un puño enorme que retuerce el corazón.
- Dificultad para respirar.
- Sudoración.
- Palidez.
- Mareos.
- Otros: Pueden aparecer náuseas, vómitos y desfallecimiento.
Causas:
La principal causa del infarto de miocardio es la obstrucción de las arterias coronarias. Para que el corazón funcione correctamente la sangre debe circular a través de las arterias coronarias. Sin embargo, estas arterias pueden estrecharse dificultando la circulación.
Si el corazón se expone a un sobreesfuerzo pueden aparecer trastornos y formar un coágulo que, a su vez, puede tapar una arteria semiobstruida. Esta obstrucción, interrumpe el suministro de sangre a las fibras del músculo cardiaco. Al dejar de recibir sangre estas fibras mueren de forma irreversible. El infarto de miocardio ocurre cuando un coágulo de sangre (trombosis coronaria) obstruye una arteria estrechada.
Normalmente el infarto de miocardio no sucede de forma repentina. Puede llegar causado por la aterosclerosis, un proceso prologado que estrecha los vasos coronarios.
¿Cómo prevenirlo?:
El riesgo de padecer un infarto puede evitarse siguiendo algunas pautas de vida saludable:
- Dejar de fumar.
- Llevar una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, legumbres y cereales.
- Realizar ejercicio físico aeróbico.
- Evitar las bebidas alcohólicas.
Factores de riesgo:
Existen factores que pueden acelerar que las arterias se deterioren y propiciar que se obstruyan, tales como el tabaco, el colesterol, la diabetes y la hipertensión como algunos de los factores de riesgo cardiovascular que obligan al corazón a trabajar en peores condiciones.
Descripción general:
La infección urinaria o del tracto urinario engloba diferentes enfermedades infecciosas (producidas por un microorganismo o germen) que afectan a cualquier parte del sistema urinario (riñón, uréteres, vejiga urinaria o uretra).
Síntomas:
Los síntomas más comunes de la infección de orina son:
- Necesidad urgente y frecuente de orinar.
- Picazón o quemazón en la uretra al orinar.
- Enrojecimiento de la vulva y picor vaginal (en las mujeres).
- Dolor al orinar y al mantener relaciones sexuales.
- Color turbio, lechoso (espeso) o anormal de la orina.
- Aparición de sangre en la orina.
- Fiebre y escalofríos (la fiebre puede significar que la infección ha alcanzado los riñones).
- Vómitos y náuseas.
- Dolor en el costado o en la espalda (indica la presencia de una infección en los riñones).
- A menudo, las mujeres sienten una ligera presión por encima del hueso púbico y muchos hombres sienten una dilatación del recto.
Causas:
La infección de orina está provocada por la invasión de microorganismos en el tracto urinario. Puede producirse por dos vías diferentes: por el extremo inferior de las vías urinarias (abertura en la punta del pene o de la uretra, según se trate de un hombre o de una mujer), que es el caso más frecuente; o bien a través del flujo sanguíneo, en cuyo caso la infección afecta directamente a los riñones.
¿Cómo prevenirlo?:
- No retener la orina.
- Beber agua de forma habitual, al menos dos litros diario.
- Orinar después de cada coito para eliminar posibles agentes infecciosos.
- Evitar la ducha vaginal como método para reducir la posibilidad de embarazo.
- Cambiarse el bañador después de cada baño y evitar el frío en la zona.
- Tener precaución con algunos preservativos, cremas espermicidas o el diafragma, ya que no son recomendables para personas propensas a padecer infecciones urinarias.
- Utilizar cremas lubricantes durante las relaciones sexuales.
- Llevar ropa con tejidos naturales. Las prendas ajustadas y fabricadas con fibras sintéticas contribuyen al desarrollo de cistitis. Por lo tanto, es mejor optar por materiales que permitan la transpiración, como el algodón.
- Corregir el estreñimiento por la proximidad del colon con el aparato urogenital, lo que facilita la infección de orina por contigüidad.
- En mujeres embarazadas debe hacerse un cribado sistemático de infecciones de orina durante todo el embarazo. Las infecciones no tratadas pueden fomentar los partos prematuros y el bajo peso al nacer.
- En el caso de los bebés y niños, es importante cambiar los pañales de forma frecuente, así como instruir a los niños sobre los hábitos higiénicos que deben realizar después de orinar o defecar.
Factores de riesgo:
Entre los factores de riesgo para que surja una infección de orina recurrente destaca que haya o se haya dado:
- Incontinencia urinaria.
- Cirugía urogenital previa.
- Patología urológica (cálculos, procesos que produzcan obstrucción, prostatitis crónica, vejiga caída, sondaje permanente etc.).
- Presencia de diabetes mellitus o enfermedades neurológicas (lesión medular, esclerosis múltiple, ictus, etc.)
- Antecedentes de ITUs en la infancia, o en mujeres con antecedente de ITU en la madre o haber tenido ITUs antes de la menopausia.
- Las personas que se automedican o no cumplen las pautas de tratamiento como ha indicado el profesional sanitario, corren el riesgo de infecciones difíciles de erradicar por la aparición de gérmenes resistentes a los antibióticos.
Descripción general:
Es la incapacidad del hombre y/o la mujer para generar o completar un embarazo.
Causas:
Se relaciona con factores físicos y hormonales que se van a describir más adelante.
¿Cómo prevenirlo?:
Idealmente evitar retardar la búsqueda del embarazo, tener prácticas sexuales seguras para evitar enfermedades de transmisión sexual, en caso de la mujer consultar al médico para que se haga un ajuste adecuado en el uso de medicamentos anticonceptivos si los ha estado tomando.
Descripción general:
Es un trastorno que consiste en la incapacidad para conciliar el sueño o para mantenerlo.
Síntomas:
Los síntomas de insomnio son fáciles de detectar, pues el propio paciente nota las dificultades para conciliar el sueño o bien se despierta de forma precoz. La falta de descanso se manifiesta a lo largo del día causando cansancio, debilidad y, en casos extremos, incluso lentitud a la hora de procesar información e irritabilidad.
Causas:
- Cambios fisiológicos: el envejecimiento produce cambios en el patrón del sueño. En las personas mayores es frecuente la reducción de las horas y la calidad del sueño y un aumento de la somnolencia diurna.
- Estilo de vida: los cambios constantes de horario, bien por cuestiones laborales o por los viajes (jet-lag) provocan trastornos del ritmo circadiano.
- Fármacos: entre los medicamentos y sustancias que pueden alterar el sueño se encuentran los antihipertensivos, anticolinérgicos, hormonas, estimulantes, esteroides, antidepresivos, broncodilatadores, descongestionantes, antineoplásicos, la cafeína y la levodopa.
- Patologías físicas o psicológicas: algunas enfermedades o trastornos asociados con el insomnio son: Trastornos cardiovasculares, trastornos pulmonares, trastornos de la conducta alimentaria, trastornos endocrinos y trastornos neurológicos.
- Factores ambientales: Las temperaturas extremas, los cambios de horarios o los viajes son factores que modifican el patrón de sueño y pueden causar insomnio.
¿Cómo prevenirlo?:
Estos son algunos consejos eficaces para conciliar el sueño:
- Evitar utilizar el dormitorio como lugar de trabajo o para realizar otras actividades que no sean el reposo. Esto ayuda a asociar la cama con el sueño.
- Acondicionar el dormitorio antes de dormir para que tenga la temperatura adecuada.
- Crear un ambiente relajado y confortable en la habitación, modulando la intensidad de la luz y evitando los ruidos.
- Desconectar los móviles y otros dispositivos electrónicos y retirarlos del dormitorio.
- Acostarse siempre a la misma hora para que el sueño se convierta en un hábito.
- Realizar actividades relajantes una hora antes de acostarse.
- Evitar hacer ejercicio intenso antes de irse a dormir.
- Evitar las cenas copiosas que pueden dificultar la digestión y hacer que resulte más difícil quedarse dormido.
- Limitar la ingesta de grandes cantidades de líquidos antes de dormir para evitar que la necesidad de orinar interrumpa el sueño.
- En verano, es importante no dormir con las ventanas abiertas para evitar que los ruidos de la calle interrumpan el sueño.
- Bajar las persianas para que el exceso de luz no nos despierte al amanecer.
Factores de riesgo:
Diversos estudios han constatado que la falta de sueño se relaciona con un aumento del riesgo de padecer diversas enfermedades, como las siguientes:
- Obesidad
- Alzheimer
- Cáncer
- Enfermedades cardiovasculares
- Depresión y ansiedad
Descripción general:
Se habla de insuficiencia cardiaca cuando la función del corazón está alterada o el músculo cardiaco no es capaz de bombear suficiente sangre para abastecer a los órganos, músculos y tejidos del organismo.
Síntomas:
- Dificultad para respirar
- Fatiga
- Problemas al orinar
Causas:
Las causas más comunes de la insuficiencia cardiaca son las enfermedades coronarias, como la angina de pecho y, especialmente, el infarto de miocardio.
Otra causa habitual es la hipertensión arterial, que debe ser detectada y controlada a tiempo para prevenir y evitar el desarrollo de la insuficiencia cardiaca.
También el consumo excesivo de alcohol puede llevar a una situación de insuficiencia cardiaca, ya que daña el músculo cardiaco y origina la denominada miocardiopatía dilatada, una dilatación progresiva del corazón debido al adelgazamiento y debilitamiento de sus paredes.
¿Cómo prevenirlo?:
En la mayoría de los casos, la insuficiencia cardiaca se puede prevenir modificando el estilo de vida y adoptando uno más saludable, así como reduciendo los factores de riesgo cardiovascular.
Factores de riesgo:
Esta patología puede afectar a la calidad de vida del paciente y limitar sus actividades cotidianas debido a la fatiga y los problemas para respirar. Además, la enfermedad no cursa de manera lineal, es decir, hay periodos en los que el paciente permanece estable y otros en los que aparecen descompensaciones que hacen necesaria la hospitalización.
Descripción general:
Los juanetes son una deformidad del dedo gordo, o del primer dedo del pie, que produce una protuberancia en el borde externo del mismo. La afección puede llegar a ser dolorosa a medida que empeora la protuberancia ya que, en la base del dedo gordo, crece hueso extra y un saco lleno de líquido.
Síntomas:
- El dedo gordo rota en dirección hacia los otros dedos y se puede llegar a montar sobre el segundo dedo.
- El paciente siente dolor sobre la articulación donde se localiza el juanete y que empeora con la presión de los zapatos.
- La piel presenta un aspecto calloso y enrojecido a lo largo del borde interno del dedo gordo y una protuberancia en esta zona.
Causas:
Entre las causas que determinan la aparición de juanetes, los factores hereditarios son los más influyentes, aunque también pueden aparecer por reumatismos inflamatorios o por otras enfermedades del pie como los pies planos o los pies cavos.
Las mujeres son más propensas a sufrir juanetes que los varones. Esto se explica porque los tacones altos (a partir de 4 cm) pueden agravar el juanete, así como un calzado demasiado estrecho en el antepié (parte anterior del zapato).
¿Cómo prevenir?:
Para poder prevenir la aparición de juanetes, se recomienda que el paciente utilice zapatos flexibles, sin demasiado tacón. Es aconsejable que sea un calzado que se adapte al pie sin que tenga una punta demasiado estrecha.
También es importante someter a los pies a baños de agua templada y sal para reducir la inflamación y utilizar apósitos que reduzcan la presión sobre el juanete si éste ya ha aparecido.
Factores de riesgo:
En el caso de los adolescentes, éstos suelen tener más problemas a la hora de tratar los juanetes que los adultos ya que, en algunos casos, puede ser resultado de un problema óseo subyacente.
La cirugía puede reducir el dolor en muchos pacientes pero no siempre. Es frecuente que, tras la operación, la persona tenga problemas para ponerse zapatos estrechos.
Descripción general:
La pediculosis pubis es una infestación humana por un ectoparátiso, el Pthirus pubis. La ladilla es un artrópodo con tres pares de patas que mide aproximadamente entre 1 y 2 mm y que se alimenta de sangre. Su único huésped es el humano.
Afecta al área del pubis pero también a otras zonas pilosas como la barba, las pestañas, las axilas y la región perianal.
Síntomas:
Las manifestaciones clínicas suelen iniciarse con prurito y escozor genital, sobretodo nocturnos, de intensidad progresiva y frecuentemente acompañados de excoriaciones, impetiginización secundaria y adenopatías regionales.
Causas:
En cuanto a las vías de contacto, las ladillas se transmiten por contacto sexual y, en menor grado, se puede transmitir a través de la ropa contaminada, toallas o ropa de cama.
¿Cómo prevenirlo?:
En cuanto a la prevención, en primer lugar los preservativos no evitan la transmisión de las ladillas, la única forma de evitar su contagio es limitando los contactos sexuales, evitando compartir ropa íntima, toallas o sábanas. Otro consejo es localizar y tratar todos los contactos de la persona infectada para, así, eliminar la cadena de transmisión.
Factores de riesgo:
El diagnóstico se realiza con la identificación de las ladillas o las liendres. Los pacientes infestados presentan un promedio de 10 a 25 organismos adultos en el cuerpo. En algunos no se encuentra el piojo pero se identifican las liendres cerca de la base del pelo.
Descripción general:
La leishmaniasis es una enfermedad de tipo infeccioso causada por un parásito protozoo del género leishmania, transmitida por la picadura de un flebótomo infectado. Este mosquito puede resultar perjudicial tanto para personas como para animales y se localiza en zonas rurales con clima mediterráneo, subtropical y tropical.
Síntomas:
En el caso de la leishmaniasis cutánea, los síntomas dependen de dónde estén localizadas las lesiones y abarcan:
- Dificultad para respirar y para deglutir.
- Úlceras y desgaste en la boca, la lengua, las encías, los labios, la nariz y el tabique nasal.
- Congestión nasal, rinorrea y hemorragia nasal.
- Llagas en la piel propensas a convertirse en úlceras que se curan muy lentamente.
En la leishmaniasis visceral, en el caso de los niños, la infección comienza con tos, diarrea, fiebre y vómitos. Los adultos generalmente presentan fiebre que dura entre dos semanas y dos meses, acompañada de fatiga, debilidad que aumenta a medida que avanza la enfermedad y pérdida del apetito.
Otros síntomas de este tipo de leishmaniasis son:
- Molestia en el abdomen y pérdida de peso.
- Sudores fríos y disminución del volumen del cabello.
- Piel escamosa y oscurecida.
Causas:
La enfermedad afecta con frecuencia a las regiones más pobres del planeta y está asociada a la malnutrición, los desplazamientos de población, las malas condiciones de vivienda, la debilidad del sistema inmunitario o la falta de recursos.
Además, esta infección está vinculada a los cambios ambientales, como la deforestación, la construcción de presas, los sistemas de riego y la urbanización.
¿Cómo prevenirlo?:
Según el Instituto de Salud Carlos III, las medidas de prevención se centran en evitar la exposición al vector, el diagnóstico precoz y el manejo adecuado de los casos, tanto de humanos como de animales domésticos que actúen como reservorio, y medidas de control del vector y del reservorio zoonótico. No existe vacuna comercializada para humanos, pero sí frente a la leishmaniasis canina.
Se pueden evitar las picaduras de los mosquitos flebótomos de las siguientes maneras:
- Colocando toldos de malla fina alrededor de las camas y en las ventanas, en zonas donde está presente la enfermedad.
- Usando repelentes de insectos y ropa protectora.
- A nivel de salud pública, se deben tomar medidas para reducir las poblaciones de estos insectos y controlar los estanques públicos.
Factores de riesgo:
Las manifestaciones de la leishmaniasis en humanos abarcan desde lesiones cutáneas (úlceras) en la zona de la picadura del flebótomo hasta manifestaciones viscerales más graves, acompañadas de picos de fiebre y debilidad que, si no son tratadas a tiempo, podrían causar la muerte.
Descripción general:
La lepra es una enfermedad crónica causada por el bacilo Mycobacterium leprae, que es un bacilo acidorresistente con forma de curva que afecta principalmente a la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos. No obstante, pese a la creencia general, es una enfermedad curable. De ahí que sea esencial detectarla lo antes posible para evitar la discapacidad que lleva asociada.
Síntomas:
Las principales manifestaciones que puede provocar la lepra son las siguientes:
- Lesiones cutáneas: aparecen unas manchas más claras con un borde definido en las que no hay sensibilidad.
- Alteraciones de la sensibilidad por el daño neurológico: el mayor problema que produce la lepra es la afectación y engrosamiento de los nervios que inervan las manos, los pies y la cara. Si el problema avanza se presentan alteraciones en la movilidad y posteriormente parálisis.
- Mala circulación en los miembros.
- Mala regeneración ósea.
Causas:
Existen registros ya de la lepra 1.500 años A.C. Sin embargo, no se contó con un tratamiento eficaz hasta el siglo XX. Su periodo promedio de incubación es de unos 5 años. Los síntomas pueden aparecer en el año posterior al contagio pero pueden tardar hasta 20 años.
Se trata de una enfermedad poco contagiosa, este contagio sólo se produce al convivir con la persona afectada en condiciones de hacinamiento y pobreza. No obstante, para que se produzca el contagio influyen tres factores:
- Paciente que no está tratado. Esa persona al hablar, toser o estornudar elimina gérmenes al ambiente. En la mayoría de las personas el sistema inmunológico se pone en marcha, lucha contra el germen y no se contagia. Pero existe una predisposición, que puede ser congénita. Es decir, no se hereda la enfermedad pero sí la predisposición a enfermar. La persona predispuesta, generalmente en un contacto íntimo y continuado se contagia por vía respiratoria.
- Paciente predispuesto, de forma congénita en muchas ocasiones.
- Pobreza, que conlleva falta de higiene, hacinamiento, mala alimentación.
¿Cómo prevenirlo?:
El riesgo de contraer lepra es muy bajo, aún así, la mejor manera de prevenir la enfermedad es el diagnóstico y el tratamiento precoz de las personas infectadas, así como realizar controles a los que han estado en contacto con los enfermos de lepra.
No obstante, en personas con un sistema inmunológico resistente no suele producirse el contagio.
Factores de riesgo:
Se tiende a creer que es una enfermedad desaparecida, pero lo cierto es que en 2019, el último año del que se tienen datos, se registraron 202.185 nuevos casos.
Descripción general:
La leucemia es una enfermedad de la sangre en la que la médula ósea produce glóbulos blancos anómalos, denominados células blásticas leucémicas o células de leucemia. Estas células se dividen reproduciéndose a sí mismas, lo que genera una proliferación neoplásica de células alteradas que no mueren cuando envejecen o se dañan, por lo que se acumulan y van desplazando a las células normales.
Esta disminución de células sanas puede ocasionar dificultades en el transporte del oxígeno a los tejidos, en la curación de las infecciones o en el control de las hemorragias. Por tratarse de una proliferación de células inmaduras y anómalas en la sangre, la leucemia se considera un cáncer de la sangre.
Síntomas:
Los síntomas varían en función del tipo de leucemia ante el que nos encontremos. Estos son los más comunes:
- Leucemia mieloide aguda: Cansancio, pérdida de apetito y de peso, fiebre y sudores nocturnos.
- Leucemia mieloide crónica: debilidad, sudoración profusa sin razón aparente y, al igual que en el caso anterior, fiebre y pérdida de apetito y de peso.
- Leucemia linfocítica aguda: sensación de mareo o aturdimiento, debilidad y cansancio, dificultades respiratorias, infecciones recurrentes, formación de moretones fácilmente, fiebre y sangrado frecuente o grave en nariz y encías.
- Leucemia linfocítica crónica: además de algunas de las manifestaciones ya descritas, como la debilidad, el cansancio, la pérdida de peso, la fiebre o los sudores nocturnos, este tipo de leucemia provoca el agrandamiento de los ganglios linfáticos y dolor o sensación de hinchazón estomacal.
Causas:
En la mayor parte de los casos de leucemia no se puede establecer una causa identificable y no hay un componente hereditario significativo. Existen, sin embargo, una serie de factores de riesgo:
- Historia previa de tratamiento para otros cánceres: haber recibido quimioterapia o radioterapia puede provocar una alteración o daño celular que derive en lo que se conoce como una leucemia secundaria.
- Padecer un trastorno genético: enfermedades como el síndrome de Down incrementan la posibilidad de una persona de padecer leucemia.
- Exposición a agentes tóxicos: el contacto con determinados agentes tóxicos, ya sean ambientales, profesionales o asociados a hábitos como el tabaquismo, aumenta el riesgo de leucemia.
- Historia familiar: en casos minoritarios, tener antecedentes familiares de leucemia puede ser un factor de riesgo.
¿Cómo prevenirlo?:
Hasta la fecha no se conoce ninguna forma de prevenir la leucemia. Los expertos aconsejan llevar una vida saludable y sin hábitos tóxicos, recomendaciones válidas también para la prevención de otras enfermedades oncológicas y que ayudarían, además, a afrontar en mejores condiciones el tratamiento que requiere este tipo de cáncer, en el caso de que llegue a desarrollarse.
Factores de riesgo:
La reducción del número de plaquetas que conlleva la leucemia provoca asimismo la aparición de manchas en la piel (petequias) y hemorragias esporádicas. Las más comunes son a través de nariz, boca o recto y las más graves son las que pueden producirse en el cerebro, a raíz de una caída grave del número de plaquetas.
Descripción general:
Un linfoma es una proliferación maligna de linfocitos (células defensivas del sistema inmunitario), generalmente dentro de los nódulos o ganglios linfáticos, pero que a veces afecta también a otros tejidos como el hígado o el bazo.
Dicho de otra forma, es un cáncer que se inicia en el tejido linfático. Durante el desarrollo de esta enfermedad se produce una disminución del funcionamiento del sistema inmune, que puede ser más grave cuanto más se haya diseminado la enfermedad. Además, si la médula ósea se ha visto afectada pueden producirse anemia u otros cambios en las células de la sangre.
Síntomas:
Por regla general, los linfomas se presentan como ganglios linfáticos aumentados de tamaño que, cuando aparecen en zonas accesibles como el cuello, las axilas o la ingle se pueden palpar evidenciando su tamaño aumentado. Estos bultos (adenopatías) no suelen ser dolorosos. Cuando aparecen en zonas menos accesibles (abdomen, mediastino, etcétera) pueden pasar desapercibidos, por lo que el diagnóstico es más difícil y solo se consigue cuando aparecen otros síntomas que obligan a realizar estudios más exhaustivos.
Estos síntomas pueden ser fiebre superior a los 38 grados, sudoración nocturna profusa hasta llegar a empapar la ropa y pérdida inexplicable de peso (superior al 10% en seis meses). Asimismo, los pacientes pueden experimentar otras manifestaciones locales como adenopatías periféricas o agrandamiento del bazo, lo que se conoce como esplenomegalia.
Causas:
Hasta la fecha se desconocen las causas que desencadenan los linfomas, salvo algunos casos en los que asocia con una infección originada por bacterias como Helicobacter pylori o Borrelia o por virus como el Epstein-Barr (EBV) .
No se han podido extraer evidencias concluyentes de la influencia de factores como los tintes del cabello, los insecticidas o las radiaciones ionizantes en el desarrollo de este tipo de cánceres.
¿Cómo prevenirlo?:
No existe ningún modo de prevenir el desarrollo de un linfoma. Los expertos coinciden en destacar que llevar un estilo de vida saludable podría reducir el riesgo de presentar este tipo de cáncer, aunque no se ha podido establecer una relación directa.
En general, los especialistas recomiendan evitar la obesidad, el tabaquismo y los factores de riesgo cardiovascular, no tanto porque estos factores pueden prevenir la aparición de un linfoma, sino porque, en caso de desarrollarlo, un paciente sin comorbilidades tiene más posibilidad de éxito de superar un tratamiento tan agresivo como la quimioterapia.
Factores de riesgo:
En términos generales, el 60 por ciento de los linfomas se cura, si bien el pronóstico depende de una serie de factores como la edad y el estado general del paciente, el estadio en que se encuentre la patología en el momento del diagnóstico y, especialmente, el tipo de linfoma del que se trate.
Descripción general:
El lipedema es una enfermedad del tejido adiposo, también conocido como tejido graso, que implica un acúmulo progresivo patológico de células grasas en las piernas, aunque también puede producirse esta acumulación en los brazos. Como consecuencia se produce un aumento de volumen que, además, viene acompañado de determinados síntomas.
Afecta casi exclusivamente a mujeres. Aunque no hay datos oficiales, los expertos calculan que entre un 4% y un 11% del sexo femenino a nivel mundial padece lipedema en diferentes grados.
Síntomas:
Los pacientes pueden experimentar diversos síntomas:
- Aumento de volumen en la zona afectada y desproporción de esta respecto a otras partes del cuerpo.
- Sensación de pesadez y dolores continuos.
- Episodios repentinos de inflamación.
- Aparición de la copa de Cuff, es decir, el volumen graso empieza a acumularse justo encima de los tobillos y no debajo de estos.
- Presión en los gemelos.
- Picor constante.
- Aparición de hematomas.
- Aumento de sensibilidad al contacto.
Causas:
No se conocen con exactitud las causas que provocan el lipedema. Sin embargo, una línea de investigación apunta a que esta enfermedad puede estar provocada por otra llamada permeabilidad intestinal, en donde aparece un cambio inflamatorio en la microbiota intestinal (conjunto de bacterias que viven en el intestino) que provoca que sustancias citoquinas pasen al torrente sanguíneo.
Estas citoquinas, pequeñas proteínas que actúan sobre células del sistema inmune y otras células sanguíneas, llegan a las células de grasa y las inflaman hasta diez veces más de su volumen normal. El cuerpo entonces intenta arreglar este aumento de tamaño produciendo más células con el fin de distribuir la grasa entre todas ellas. No obstante, las citoquinas liberadas a la sangre como consecuencia de la permeabilidad intestinal, llegan a las células de grasa nuevas y las vuelven a inflamar. Por tanto, el lipedema se basa en un aumento, tanto en número como en tamaño, de las células grasa.
Asimismo, más del 99% de los pacientes con lipedema son mujeres. En este sentido, el componente hormonal está relacionado con el desarrollo de la enfermedad, que empieza a manifestarse o se intensifica con los cambios hormonales y la llegada de la pubertad. El embarazo, la menopausia o la toma de anticonceptivos también empeoran los síntomas, ya que parece ser que los estrógenos tienen un cierto papel.
¿Cómo prevenirlo?:
Al desconocerse todavía las causas exactas del lipedema, no existen medidas de prevención concretas. Es cierto que realizar deporte y seguir una buena dieta puede mejorar la enfermedad de forma muy limitada, especialmente en sus estadios más tempranos. Sin embargo, llevarlo a cabo no va a impedir el desarrollo de la patología que desencadena una sensación de frustración y culpa al observar el mínimo volumen de grasa perdido.
Factores de riesgo:
Para saber si el paciente padece lipedema, debe ser examinado por algún experto en esta patología. Se requiere tanto el historial clínico del enfermo para comprobar aspectos como sus antecedentes o evolución, así como un detallado examen físico que determinará si hay lipedema. En caso de que el análisis resulte positivo, se detectará en qué grado de la enfermedad se encuentra el enfermo para decidir el tratamiento a seguir.
Descripción general:
La lipotimia es una pérdida breve del conocimiento debido a una disminución del flujo sanguíneo del cerebro, lo que provoca que podamos perder el conocimiento de manera completa o parcial.
Síntomas:
Cuando una persona va a sufrir una lipotimia presentará una serie de signos característicos:
- Debilidad.
- Palidez.
- Sudoración fría.
- Visión borrosa.
- Pulso débil.
- Pérdida momentánea de la conciencia.
Causas:
A muchas personas, las emociones fuertes como la ansiedad, el exceso de calor, la fiebre, permanecer en un sitio cerrado o el estrés les puede producir lipotimias. Asimismo, las personas que se realizan extracciones de sangre o las que tienen la presión arterial baja pueden ser más proclives a padecer lipotimias.
¿Cómo prevenirlo?:
Para prevenir una lipotimia es fundamental hidratarse durante todo el día, especialmente los días de mucho calor, y evitar los lugares cerrados. Además, los especialistas aconsejan que las personas que han sufrido episodios de lipotimia tengan cuidado con los movimientos que realizan y posturas que adoptan.
Factores de riesgo:
Ante un episodio de lipotimia, es fundamental que la persona se tumbe en un lugar fresco con las piernas en alto. Cuando hayan desaparecido los síntomas, se le debe ayudar a incorporarse lentamente, revisando que no tiene ningún golpe o lesiones.
Si la víctima no recupera la conciencia, se debe tumbar de lado para que no se ahogue si tiene que vomitar. No obstante, se aconseja acudir al especialista para que valore la situación.
Descripción general:
La listeriosis es la infección que puede producirse cuando una persona ingiere alimentos que han sido contaminados por la bacteria Listeria monocytogenes, presente en animales salvajes y domésticos, también en el agua y en los suelos.
Síntomas:
Generalmente los síntomas suelen ser:
- Confusión o problemas de equilibrio.
- Fiebre o escalofríos.
- Dolor de cabeza.
- Dolores musculares.
- Náuseas o diarrea.
- Convulsiones.
- Rigidez en el cuello.
Causas:
En la mayoría de los procesos estas bacterias originan una enfermedad gastrointestinal. En algunos casos se puede producir una septicemia (infección en la sangre) o una meningitis bacteriana (inflamación de las membranas que cubren el cerebro). Estas bacterias pueden producir la enfermedad en muchos animales y conducir a un aborto espontáneo o partos de mortinatos en animales domésticos.
En adultos la enfermedad puede tomar distintas formas, dependiendo del órgano o sistema de órganos afectados, como:
- Endocarditis.
- Neumonía.
- Septicemia.
En una forma más leve puede ocurrir:
- Gastroenteritis.
- Erupción cutánea.
- Abscesos.
¿Cómo prevenirlo?:
Los expertos recomiendan lavarse bien las manos después de haber tenido contacto con animales y cocinar bien los alimentos, a altas temperaturas. Las personas de alto riesgo deben evitar el consumo de quesos blandos y de alimentos refrigerados, como pescados o mariscos, leche cruda o verduras congeladas sin cocción, a menos que estos se calienten a una temperatura de 70ºC o que hiervan.
Factores de riesgo:
Las siguientes personas que están en mayor riesgo son:
- Personas mayores.
- Adultos con un sistema inmunitario debilitado (pacientes oncológicos, VIH positivo, etc.)
- Fetos en desarrollo.
- Recién nacidos.
- Mujeres embarazadas.
Descripción general:
La litiasis renal, también denominada urolitiasis o nefrolitiasis, es una enfermedad causada por la presencia de cálculos o piedras en el interior de los riñones o de las vías urinarias (uréteres o vejiga).
Los cálculos renales se componen de sustancias normales de la orina, pero, por diferentes razones, se han concentrado y solidificado en fragmentos de mayor o menor tamaño.
Síntomas:
Las formas de presentación clínica en la litiasis renal son variables dependiendo del tamaño, composición y de la situación de los cálculos en el aparato urinario. Algunos pueden pasar desapercibidos.
- Cólico nefrítico: Dolor en la zona lumbar o espalda baja que se irradia hacia el abdomen anterior y hacia los genitales; se produce por el taponamiento de la salida de orina del riñón y a veces provoca un dolor muy intenso.
Es un dolor intermitente que se asocia a náuseas, vómitos, sudoración y sensación de hinchazón abdominal. No suele provocar fiebre.
- Hematuria: Se produce por las lesiones que provoca el cálculo en su paso por la vía urinaria.
- Infecciones de orina: Los cálculos renales pueden ser causa o consecuencia de infecciones frecuentes de la orina o cistitis.
Causas:
Se pueden formar cálculos renales si la orina está saturada de sales que pueden producirlos, o bien, porque la orina carece de los inhibidores naturales de este proceso. Esto puede tener relación con otros factores:
- Una disminución del volumen urinario.
- Un incremento en la excreción urinaria de sustancias químicas que impiden la disolución de las sales que contiene la orina.
¿Cómo prevenirlo?:
Una de las formas de prevención de esta afección es la corrección de los eventuales excesos de aporte de calcio, fosfato, oxalato y purinas.
Además, varias medidas dietéticas generales pueden permitir un mejor control de la enfermedad, como el incremento en la ingesta de líquidos, preferentemente agua (la primera y más simple de las medidas para prevenir la patología).
Es esencial seguir una dieta baja en calorías, con poca sal, limitando las proteínas animales, los azúcares y el alcohol. Tampoco son recomendables alimentos como el cacao, el café, el té, los frutos secos, etcétera.
Factores de riesgo:
Los cálculos renales son dolorosos, pero en la mayoría de los casos, pueden ser eliminados del organismo sin causar daño en el mismo. Sin embargo, estos cálculos reaparecen con bastante frecuencia, sobre todo, si no se trata la causa que ha llevado a su aparición.
En estos casos en los que no se recibe el tratamiento adecuado, el paciente puede tener el riesgo de padecer infecciones urinarias o daño en el riñón, en los casos más graves.
Descripción general:
Dolor localizado en la parte inferior o baja de la espalda, cuyo origen tiene que ver con la estructura músculo-esquelética de la columna vertebral. También se conoce como lumbago.
Síntomas:
Las manifestaciones más comunes de la lumbalgia son el dolor local o irradiado, la inflamación y la presencia de contracturas musculares.
Por otra parte, según el grado de afectación y compresión radicular se pueden producir alteraciones de la sensibilidad (hormigueo) y alteraciones del movimiento como parálisis, entre otras.
Causas:
Las causas más frecuentes son las de origen mecánico: alteración de la estática vertebral (escoliosis), contracturas musculares (por sobrecarga mecánica o tensional), problemas degenerativos del disco intervertebral o de las articulaciones posteriores vertebrales, fracturas por osteoporosis o traumatismos violentos. Otras causas menos frecuentes son las enfermedades inflamatorias de las estructuras vertebrales.
¿Cómo prevenir?:
Para evitar un lumbago, es recomendable hacer ejercicio o mantenerse físicamente activo, evitar el sedentarismo, mantener una buena postura y realizar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento lumbar.
Descripción general:
El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad reumática sistémica y crónica, es decir, puede afectar a muchos órganos y/o sistemas: a las articulaciones, músculos, piel, riñón, pulmón, corazón..., aunque casi la mitad de los pacientes tienen afectación casi exclusiva de la piel y las articulaciones.
En líneas generales, cuando una persona está diagnosticada con lupus, las células del sistema inmune agreden a las propias del organismo, provocando inflamación y daños en los tejidos. El lupus actúa produciendo anticuerpos que sobreestimulan los linfocitos B (las células que producen los anticuerpos).
Síntomas:
Al tratarse de una enfermedad multisistémica afecta a varios órganos. Por un lado, presenta síntomas generales: cansancio, pérdida de peso inexplicable, fiebre prolongada que no se debe a ningún proceso infeccioso y alteraciones de la temperatura.
- Síntomas articulares y musculares: Se encuentran dentro de las manifestaciones clínicas más frecuentes. El 90 por ciento de los pacientes con lupus padecen dolor e inflamación en las articulaciones (artritis) en manos, muñecas, codos, rodillas y pies con más frecuencia. También es posible que aparezca rigidez articular por las mañanas. La artritis puede ser migratoria o episódica.
Estos síntomas suelen producirse al principio de la enfermedad y durante su evolución.
- Síntomas dermatológicos: La lesión más conocida, aunque no la más frecuente, es la denominada “eritema en alas de mariposa”, que consiste en un enrojecimiento y erupción de la piel de la cara, en las mejillas y la nariz. Estos síntomas aparecen en el 80 por ciento de los pacientes y muchos de ellos empeoran con la exposición al sol.
También es frecuente la caída del cabello cuando la enfermedad está activa. Por otro lado, los enfermos de lupus presentan hipersensibilidad a los rayos ultravioletas. Si se exponen sin protección la enfermedad puede reactivarse.
- Síntomas cardíacos y pulmonares: Aproximadamente un 25 por ciento de los pacientes pueden padecer afecciones relacionadas con el corazón. Esto se debe a que la capa de revestimiento del corazón (pericardio) se inflaman por la enfermedad. Esta inflamación también se produce en las membranas de revestimiento de los pulmones (pleura), aunque aquí la incidencia sube al 50 por ciento de los casos. Como consecuencia se origina pericarditis y pleuritis. Ambas tienen síntomas parecidos: dolor torácico y fiebre. En otras ocasiones, el lupus afecta a los pulmones o a las válvulas del corazón ocasionando insuficiencia cardiorrespiratoria.
- Síntomas renales: El lupus afecta a los dos riñones a la vez. La lesión más frecuente es la inflamación (nefritis), que a veces impide que el riñón elimine adecuadamente los residuos del organismo y estos se acumulan en la sangre. Debido a esta inflamación, muchas veces el riñón se ve incapaz de asimilar y retener proteínas. Con lo que se eliminan por la orina y se produce una hinchazón de cara y piernas. Estas afecciones pueden producirse hasta en el 45 por ciento de los pacientes.
- Síntomas neurológicos: Estos son los más variados y graves. Los pacientes con lupus pueden tener trastornos psiquiátricos, cefaleas, estados confusionales, afectación en los nervios periféricos y convulsiones, entre otros. Se manifiesta con dolores de cabeza, depresiones o situaciones de hiperactividad. Son manifestaciones muy frecuentes en la población general y puede deberse a una inflamación cerebral por lupus o por otras muchas circunstancias.
Asimismo, es posible que la depresión no se desencadene por la enfermedad, sino porque el paciente se deprime al saber que se enfrenta con esta patología, de origen desconocido y que puede afectar a tantos órganos del cuerpo.
- Síntomas del aparato digestivo: Son los menos frecuentes pero pueden producirse vómitos, diarrea, pancreatitis, alteraciones hepáticas, peritonitis, etc.
- Síntomas hematológicos: En el lupus se puede producir una disminución del número de todos los tipos de células sanguíneas. Así, la leucopenia, descenso de glóbulos blancos, puede ser muy frecuente. La anemia también aparece con asiduidad en el desarrollo de la enfermedad.
Causas:
La causa del lupus eritematoso sigue siendo desconocida. Sin embargo, al tratarse de una enfermedad autoinmune hay distintos factores que sí se conocen, que pueden influir y provocar la patología. Es probable que el agente que pone en marcha la enfermedad sea un virus, pero se requiere la conjunción de otros factores para que aparezca la patología.
Otras de las causas que se barajan tienen que ver con la genética. Se ha comprobado en gemelos que, si uno ellos tiene la enfermedad, el lupus tiende a aparecen con mayor frecuencia en el otro hermano. Sin embargo, aún se desconoce qué genes concretos son responsables de esta enfermedad.
¿Cómo prevenirlo?:
El desconocimiento de las causas exactas del lupus impide la adopción de medidas para prevenir la aparición de la enfermedad, pero quienes ya la padecen pueden evitar o, al menos, reducir el desarrollo de brotes con un estilo de vida saludable, que incluya una alimentación equilibrada, una protección alta frente a la radiación solar y no fumar.
Factores de riesgo:
El lupus tiene una variabilidad clínica muy importante y el pronóstico variará según la gravedad de la misma. De forma genérica, en las últimas décadas el pronóstico ha mejorado mucho ya que hace 40 o 50 años la supervivencia se estimaba en torno al 50 por ciento y hoy se puede equiparar a la de la población general.
Sin embargo, los estudios demuestran que la calidad de vida de estos pacientes es mucho peor por la cronicidad de la patología, la persistencia de las manifestaciones o la necesidad de tener un tratamiento de forma mantenida en el tiempo.
Descripción general:
También conocida como el paludismo, es una enfermedad provocada por el parásito Plasmodium, un parásito unicelular, que se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados hembra del género Anopheles.
Síntomas:
Los primeros síntomas que presenta una persona infectada no se distinguen de una enfermedad viral leve: fiebre leve e intermitente, dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos, vómitos y síntomas gripales. En caso de que los síntomas no se traten, la enfermedad puede evolucionar y provocar complicaciones graves y, en algunas ocasiones, la muerte.
Las manifestaciones de la enfermedad aparecen transcurridos siete días de la picadura del mosquito (lo habitual es que aparezcan entre el día 10 y el 15).
Causas:
Es una de las enfermedades infecciosas más frecuentes y uno de los principales problemas de salud para los viajeros. El riesgo de infección varía en función del itinerario, la duración del viaje, la época del año (época de lluvias o la temperatura), la inmunidad de la población, la distribución de lugares donde se crían los mosquitos y la prevalencia de las distintas especies.
En el hombre la transmisión se produce por la picadura de mosquitos infectados del género Anopheles, que pican principalmente desde el anochecer hasta el amanecer. También se transmite por transfusiones de sangre o por jeringuillas infectadas. Otra causa, poco probable, es la transmisión en los aeropuertos o los alrededores.
¿Cómo prevenirla?:
En estos casos es recomendable que los viajeros utilicen prendas de manga larga, pantalón largo y sombrero para dejar la menos cantidad de piel expuesta. Si utiliza protector solar es recomendable aplicarlo primero y, a continuación aplicar el repelente de mosquitos.
Dependiendo del riesgo en la zona visitada, los viajeros internacionales deberán tomar medicación preventiva antes, durante y después del viaje. Es importante también utilizar mosquiteras tratadas con insecticidas de acción prolongada para dormir ya que el mosquito suele picar más en la noche.
Factores de riesgo:
Algunos grupos de viajeros, como los niños pequeños, las embarazadas y las personas con el sistema inmunitario debilitado tienen un riesgo mayor de padecer la enfermedad si se infectan. En las embarazadas la malaria aumenta el riesgo de defunción materna, aborto espontáneo, muerte fetal y retraso ponderal del recién nacido, así como muerte en el periodo neonatal.
Descripción:
Melanoma es un tipo de cáncer de piel. Se origina en los melanocitos, las células que dan el color a la piel. Sin embargo también puede presentarse en el interior de la boca o de los ojos.
Es muy importante, porque se trata del tipo de cáncer de piel más agresivo.
Síntomas:
Frecuentemente el primer signo de un melanoma es un cambio en la forma, color, tamaño o la sensación en un lunar antiguo; o simplemente en la aparición de un lunar nuevo con alguna de las siguientes anormalidades:
Forma Asimétrica.
Bordes irregulares.
Varios tonos de Color en su interior.
Diámetro mayor de 6mm.
Cambios en la Evolución del lunar en últimas semanas o meses.
En Colombia a diferencia del mundo, el melanoma afecta mas frecuentemente las palmas de las manos, las plantas de los pies y las uñas de manos y pies. Con frecuencia cuando un melanoma se presenta en las uñas, es confundido con hongos en las uñas y tratado de forma equivocada, sin mejoría. Si esto sucede se recomienda la evaluación oportuna por un Dermatólogo o por un Cirujano de Tejidos Blandos.
A las personas que tienen lunares en esas localizaciones, se les recomienda solicitar una revisión médica y hacer un seguimiento en búsqueda de cambios.
Ante la sospecha de un melanoma está indicado realizar una biopsia con anestesia local. Si se confirma el diagnóstico de melanoma su Dermatólogo le indicará la necesidad de consultar al Cirujano de Tumores de Tejidos Blandos.
El melanoma es un cáncer de piel agresivo, que se puede originar en lunares del cuerpo. Por eso es importante conocer los lunares que tenemos en nuestro cuerpo. Si alguno de ellos presenta algún cambio sospechoso se recomienda consultar oportunamente al médico o al especialista en dermatología.
Cuando un lunar tiene características sospechosas, el médico o el dermatólogo le indicarán la necesidad de hacer una biopsia para estudiarlo al microscopio. Si el estudio de patología informa la presencia de un melanoma con factores de riesgo, el médico o el dermatólogo le remitirán al Cirujano de Tumores de Tejidos Blandos.
El melanoma puede ser curado cuando es detectado tempranamente y manejado de manera adecuada.
Descripción general:
Es una enfermedad que produce unas manchas simétricas principalmente en la cara (frente, mejillas o labio superior). Se produce debido al aumento de melanina a nivel de la epidermis o la dermis.
Síntomas:
Los síntomas más comunes son los siguientes:
- Manchas marrones en la frente, las mejillas o el labio superior.
- Manchas uniformes con bordes difusos.
- Estas manchas no presentan costras.
Causas:
La predisposición personal y hereditaria a padecer esta enfermedad es una de las causas principales.También existen factores desencadenantes como la exposición solar y otros relacionados con los cambios hormonales, como el uso de anticonceptivos orales, el embarazo o los problemas de tiroides.
¿Cómo prevenirlo?:
La prevención del melasma se basa en evitar, en la medida de lo posible, los factores que pueden resultar desencadenantes para la enfermedad, como son las exposiciones solares intensas o el uso de anticonceptivos orales.
Además, es indispensable el uso de protección solar de amplio espectro, con IPS de 30 o más a diario y cremas con despigmentantes suaves y antioxidantes, como vitamina C.
Factores de riesgo:
Es fundamental un diagnóstico correcto de las manchas por parte del dermatólogo que valore, además, la profundidad y el tratamiento más adecuado para cada caso. Además usar protección solar adecuada para cada tipo de piel y cada época del año.
Descripción general:
La meningitis es una enfermedad habitualmente infecciosa provocada por virus o bacterias que provoca la infección e inflamación de las meninges, unas membranas que rodean el cerebro y la médula espinal.
Síntomas:
Una vez contagiada, una persona puede tener los primeros síntomas entre los dos y los diez días posteriores al contagio. En ocasiones tiene un comienzo brusco con síntomas similares a los de un catarro o una gripe. Los más frecuentes y que anuncian la gravedad son:
- Fiebre alta.
- Dolor de cabeza intenso.
- Rigidez de la nuca. Esta rigidez consiste en la resistencia de la musculatura cervical a la flexión activa o pasiva de la cabeza, asociada a dolor local.
- Vómitos bruscos.
- Somnolencia.
- Pérdida de consciencia.
- Agitación, delirio y/o convulsiones.
- Manchas de color rojo-púrpura en la piel (petequias que han evolucionado). Estas implican una mayor gravedad.
Causas:
Las causas más frecuentes de la meningitis son las infecciones, que pueden estar provocadas por virus o por bacterias. La más común, y menos grave, es la infección vírica, que generalmente mejora sin que se la administre ningún medicamento al paciente. Sin embargo, las bacterianas son muy graves y pueden llegar a provocar daños cerebrales e incluso la muerte.
Además de por las infecciones, la meningitis puede aparecer debido a hongos, tumores, y otros virus como el de las paperas, el VIH, el herpes labial y el genital.
¿Cómo prevenirlo?:
La mejor prevención es la vacunación. Hasta hace poco solo existían vacunas contra el Haemophilus influenzae tipo b (Hib), el meningococo tipo A y C y el neumococo, que habían hecho prácticamente desaparecer estos tipos de meningitis en nuestro entorno.
Factores de riesgo:
Si el diagnóstico de la meningitis se hace tarde o el paciente no recibe el tratamiento adecuado, esta enfermedad puede provocar lesiones y secuelas en el paciente. Las más destacadas son:
- Hipoacusia (sordera).
- Hidrocefalia.
- Convulsiones.
- Hemorragia subdural.
- Daño cerebral.
- Edema cerebral.
- Trombosis de senos venosos.
- Parálisis de nervios craneales.
- Crisis epilépticas.
- Choque séptico.
- Insuficiencia renal.
Descripción general:
La menopausia es la etapa de la vida de la mujer que se caracteriza por el fin de la menstruación y por el comienzo de la etapa conocida como climaterio, la transición entre el periodo fértil y la vejez.
Síntomas:
- Cambios de la figura corporal: los cambios metabólicos se asocian con la menopausia provocando el incremento de la grasa corporal, que se acelera si la mujer lleva una vida sedentaria. La manifestación de estos cambios varía según la mujer: en algunas se produce el aumento de peso mientras que en otras, la grasa se distribuye hacia diversas partes del cuerpo. Estos cambios pueden elevar el riesgo de diabetes y de problemas cardiovasculares.
- Insomnio y sofocos: son unos de los principales síntomas y pueden alargarse hasta cinco años. Se detectan porque la mujer empieza a tener calor y ansiedad acompañados de sudoración y palpitaciones. El insomnio está relacionado con los sofocos. Su tratamiento puede mejorar la calidad del sueño.
- Ciclos irregulares: este síntoma es frecuente en la etapa previa a la menopausia y se mantienen hasta la última menstruación. A partir de ese momento empieza la menopausia. Generalmente son la última señal de aviso para la mujer sobre su llegada a esta etapa de la vida. Sin embargo, dependiendo de la mujer, los ciclos menstruales irregulares pueden empezar a producirse desde años antes de que se instaure la menopausia.
- Osteoporosis. Es la descalcificación de los huesos que produce la reducción de masa ósea y que se intensifica por la pérdida de la acción protectora que las hormonas femeninas (estrógenos) ejercen sobre ellos. Para prevenir posibles fracturas óseas los especialistas recomiendan realizar una densitometría ósea de cadera y columna lumbar en mujeres que tienen menopausia precoz (antes de los 40 años).
- Alteraciones del estado de ánimo: cansancio, abatimiento, falta de concentración y de energía, irritabilidad, ansiedad o agresividad. Estos son algunos de los estados por los que puede pasar la mujer durante la menopausia.
- Sequedad vaginal: durante esta etapa disminuyen los estrógenos, lo que hace que disminuya la lubricación vaginal. Algunas investigaciones han vinculado la prevalencia de la sequedad vaginal con la menopausia. Además, la sequedad puede provocar que el coito sea doloroso para la mujer.
Causas:
Esta etapa la pasan aproximadamente el 90 por ciento de las mujeres entre los 48 y los 54 años debido a que comienzan a perder paulatinamente la función ovárica y, como consecuencia, disminuye la producción de hormonas femeninas, estrógenos y progesterona.
Factores de riesgo:
El estilo de vida de la mujer repercute en la menopausia. Sin embargo, existen otros factores que pueden influir en una menopausia temprana:
- El sedentarismo: la ausencia de actividad física es una de las principales causas que podrían adelantar la menopausia. Si la mujer mantiene una vida activa y realiza deporte varias veces por semana puede ganar otros beneficios, como son la prevención frente a la osteoporosis, la diabetes o disminuir los factores de riesgo cardiovascular.
- Tabaquismo: el tabaco está vinculado con la disminución de los estrógenos. Si la mujer es fumadora durante mucho tiempo, podrían tener la menopausia hasta tres años antes que las no fumadoras. Además, el tabaquismo empeora otras patologías como la osteoporosis y aumenta el riesgo de fracturas óseas.
Descripción general:
Es un dolor de cabeza recidivante, pulsátil e intenso que habitualmente afecta a un lado de la cabeza, aunque puede afectar a ambos. El dolor empieza repentinamente y puede estar precedido o acompañado de síntomas visuales, neurológicos o gastrointestinales.
Síntomas:
Alrededor del 20 por ciento de las personas manifiestan síntomas de depresión, irritabilidad, inquietud, náuseas o falta de apetito, que aparecen unos 10 o 30 minutos antes de iniciarse el dolor de cabeza (período denominado aura o pródromo).
Un porcentaje similar de personas pierde la visión en un área específica (denominado punto ciego o escotoma), o perciben luces dispersas o centelleantes; con menos frecuencia sufren una distorsión de las imágenes, como, por ejemplo, cuando los objetos parecen más pequeños o más grandes de lo que en realidad son. Algunas personas experimentan sensaciones de hormigueo o, con menor frecuencia, debilidad en un brazo o pierna. Es habitual que estos síntomas desaparezcan poco antes de iniciarse la cefalea, pero a veces se mezclan con el dolor.
Causas:
Las causas exactas de las migrañas se desconocen, aunque se han estudiado varias teorías. Actualmente se cree que la migraña es un trastorno constitucional con base genética. Las causas desencadenantes son difíciles de identificar y diferentes en cada personas, pero las más frecuentes son:
- Herencia
- Edad
- Estrés y ansiedad
- Hormonas
- Ingestión de alcohol y dieta
- Falta o exceso de sueño
- Factores medioambientales
¿Cómo prevenirlo?:
Puesto que no están claras cuáles son las causas concretas de una migraña, resulta difícil determinar una forma de prevenirla. Sin embargo, se pueden seguir unas recomendaciones relacionadas con algunos de los síntomas frecuentes de los pacientes que sufren migraña, de forma que las probabilidades de que aparezca sean más bajas:
- Dieta
- Higiene del sueño
- Nivel de hormonas: especialmente indicado para las mujeres que sufren migraña durante los ciclos menstruales. Las variaciones de estrógenos que pueden provocar, por ejemplo, los anticonceptivos pueden empeorar los episodios de migraña.
Factores de riesgo:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) cita la migraña como una de las 20 enfermedades más discapacitantes que existen: algo menos de la mitad de las personas que la padecen (un 42,5 por ciento) la sufre en un grado moderado o elevado. Pese a ello, existe entre un 20 y un 25 por ciento de personas con migraña que nunca ha consultado a un profesional médico sobre sus dolencias, y cerca de un 50 por ciento de los pacientes que lo hacen abandona el tratamiento tras las primeras sesiones.
El impacto de la enfermedad no es solo personal sino laboral, ya que el 90% de los pacientes con migraña crónica declaran no poder trabajar ni funcionar normalmente.
Descripción general:
Es un fallo de refracción que hace que los objetos lejanos se vean borrosos, mientras los cercanos se siguen visualizando correctamente. La córnea y el cristalino son partes del ojo que permiten enfocar, pero si su forma impide el enfoque correcto, se producen los errores de refracción.
Síntomas:
El síntoma principal de la miopía es la visión borrosa de lejos. Debido a ello, en ocasiones, los miopes realizan el gesto de cerrar parcialmente el ojo, forzándolo para intentar ver mejor. Otros síntomas que pueden darse como el cansancio ocular y los dolores de cabeza.
¿Cómo prevenirlo?:
La prevención es difícil, puesto que no se sabe realmente cual es la causa de la miopía. Las alteraciones son cada día más habituales debido al exceso de tiempo que pasamos realizando tareas de cerca. Estas disfunciones pueden ser el detonante del incremento de miopías bajas o funcionales en estudiantes, opositores y todo aquel que tenga una excesiva demanda visual en distancia próxima.
Factores de riesgo:
La mayor parte de los ojos miopes se consideran sanos, aunque existe un porcentaje de pacientes que sufre degeneración de la retina. Además de estos casos, pueden darse otras complicaciones como el desprendimiento o degeneración de la retina, aunque es poco habitual. También pueden darse efectos secundarios de las lentes de contacto como las infecciones y úlceras de la córnea.
Descripción general:
La mononucleosis infecciosa es una enfermedad provocada por un virus de la familia de los herpes. También conocida como la enfermedad del beso, causa fiebre, dolor de garganta e inflamación de los ganglios linfáticos, signo que suele producirse en el cuello.
Síntomas:
En términos generales los síntomas son:
- Fiebre, generalmente elevada.
- Astenia: debilidad muscular, a menudo con malestar general y fatiga.
- Linfadenopatía o inflamación de los ganglios linfáticos cervicales u occipitales. Resulta muy dolorosa.
- Faringoamigdalitis: inflamación del revestimiento interno de la faringe y amígdalas, generalmente por infección. Se traduce en dolor de garganta.
- Esplenomegalia (aumento del tamaño del bazo).
- Hepatitis.
- Otros síntomas que pueden aparecer son rinitis o edema de párpados.
Causas:
La mononucleosis o enfermedad del beso está producida por un virus de la familia herpes-viridae llamado virus de Epstein-Barr, que está distribuido por todo el mundo. Se transmite principalmente por las secreciones orales (saliva) mediante intercambio de saliva, es decir, con un contacto personal estrecho, ya que posee un bajo índice de contagio.
¿Cómo prevenirlo?:
En materia de prevención, las medidas que se pueden tomar inciden principalmente en una buena higiene; sobre todo, es importante lavarse las manos con frecuencia. Además, es primordial evitar el contacto con recipientes o utensilios (como vasos, tenedores o cuchillos) que hayan sido utilizados por personas infectadas.
Factores de riesgo:
El pronóstico de la mononucleosis es generalmente bueno. Los casos más graves y que requieren hospitalización suelen ser los que se producen en personas maduras o de edad avanzada.
Descripción general:
La muerte súbita es la parada cardiaca que se produce de forma inesperada y repentina en personas que aparentemente tienen un buen estado de salud. Concluye con el fallecimiento del paciente si no recibe asistencia médica inmediata.
Síntomas:
Las personas que sufren una muerte súbita pierden en primer lugar el pulso y, a continuación, la conciencia y la capacidad de respirar. Las manifestaciones más evidentes son:
- Pérdida de conocimiento.
- Ausencia de respuesta ante cualquier estímulo.
- Dejar de respirar.
- Pérdida del color de la piel. El paciente pasa de un color rosado a un azul violáceo.
Causas:
La muerte súbita se produce en personas con enfermedades o factores de riesgo cardiovasculares. Estas son las patologías que con más frecuencia pueden llevar a la muerte súbita al provocar arritmias durante las cuales se pierde la eficacia de la contracción del corazón y el resultado es como si se parase la actividad del corazón.
¿Cómo prevenirlo?:
Puesto que la muerte súbita está ocasionada por enfermedades cardiacas, la mejor forma de reducir el riesgo de padecerla es actuar sobre los factores de riesgo cardiovascular. Estos son los consejos básicos:
- Controlar el colesterol elevado.
- Vigilar la hipertensión arterial.
- Evitar el sedentarismo y practicar ejercicio.
- No fumar.
- Evitar el sobrepeso y la obesidad.
- Controlar la diabetes.
- Seguir una dieta sana y variada.
- No consumir alcohol.
Factores de riesgo:
Conocer los síntomas puede ayudar a actuar rápidamente e intentar salvar la vida de un paciente en muerte súbita. Cuando se dispone de un aparato con registro de electrocardiograma, se puede observar el trazado característico de la arritmia por fibrilación ventricular que, si no se interviene de forma inmediata, provocará la muerte del afectado.
Descripción general:
Es un trastorno crónico del sueño, que pertenece al grupo de las hipersomnias, caracterizado por una excesiva somnolencia diurna, en ausencia de otras causas que la justifiquen, como por ejemplo la privación de sueño o el síndrome de apneas durante el sueño.
Síntomas:
- El principal síntoma, y normalmente el más incapacitante, es la excesiva somnolencia diurna. Los pacientes la presentan de forma prácticamente continua y especialmente en situaciones monótonas que no requieren de participación activa, pero también se puede presentar en otras situaciones (andando, comiendo, etcétera). En algunos casos, la somnolencia se puede presentar en forma de “ataques de sueño” súbitos e incoercibles.
- Un síntoma muy característico, aunque no está presente en todos los pacientes con narcolepsia, son las cataplejías o cataplexias. Consisten en episodios de descenso o pérdida del tono muscular con la conciencia preservada, que están desencadenadas por emociones fuertes o repentinas y habitualmente positivas, como la risa.
- Un síntoma frecuente son las alucinaciones hipnagógicas/hipnopómpicas. Suelen presentarse al inicio o final del sueño y pueden tener un contenido visual, auditivo y/o táctil, con una sensación similar a la de estar en un sueño.
- Un síntoma también comúnmente referido, que no es específico de la narcolepsia, es la parálisis del sueño en la que los pacientes, a pesar de estar completamente despiertos y conscientes, son incapaces de moverse durante un breve periodo de tiempo.
- Y por último, también es importante mencionar, que el sueño en estos pacientes es un sueño fragmentado habitualmente.
Causas:
El mecanismo fisiopatológico de la narcolepsia consiste en una pérdida de neuronas productoras de hipocretina. La hipocretina u orexina es un neurotransmisor que se encarga de regular el mecanismo de sueño/vigilia.
¿Cómo prevenirlo?:
Hasta el momento, no es posible prevenir este trastorno crónico del sueño.
Factores de riesgo:
Estos ataques pueden aparecer en cualquier momento y en cualquier lugar. Por ello, a las personas que sufren narcolepsia no se les recomienda que realicen viajes largos, que desempeñen trabajos en los que utilicen máquinas peligrosas y que procuren descansar durante cortos periodos de tiempo al día, así como dormir la siesta.
Los estadios de sueño pueden durar minutos o, incluso, una hora, dependiendo de si la postura es cómoda o no.
Descripción general:
Infección en uno o en los dos pulmones caracterizada por la multiplicación de microorganismos en el interior de los alvéolos, lo que provoca que aparezca una inflamación con daño pulmonar. Puede estar causada por múltiples patógenos (bacterias, hongos y virus).
Síntomas:
- Tos con expectoración, en ocasiones con sangre.
- Dolor torácico.
- Fiebre con escalofríos.
- Malestar general.
- Dolores musculares y articulares.
- Cansancio y dolor de cabeza.
Causas:
Las neumonías se desarrollan cuando un germen infeccioso invade el tejido pulmonar. Estos gérmenes pueden llegar al pulmón por tres vías distintas: por aspiración desde la nariz o la faringe, por inhalación o por vía sanguínea.
Las bacterias constituyen la causa más común de neumonía y, especialmente, la bacteria conocida como neumococo. Los virus también son una causa común de neumonía; por ejemplo, la gripa, la varicela, el sarampión o la tosferina.
¿Cómo prevenirlo?:
- No fumar.
- No consumir alcohol.
- Mantener una buena higiene de los dientes y la boca para evitar que se forme placa en la boca y se dé la colonización de la boca por microorganismos.
- Comer adecuadamente.
Factores de riesgo:
En los casos más graves, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (SARS-Cov-2), la Covid-19, provoca neumonía. Entre las complicaciones respiratorias de esta infección destacan la insuficiencia respiratoria y el síndrome de distrés respiratorio agudo, que suelen requerir el empleo de oxígeno y ventilación mecánica.
Descripción general:
Los pulmones poseen unos recubrimientos membranosos denominados pleuras, siendo de dos tipos. La pleura parietal está en contacto directo con el tórax, y la pleura visceral envuelve directamente a los pulmones. Cuando entre ambas membranas se introduce aire, ambas pleuras se alejan, provocando así el neumotórax.
Síntomas:
Entre los síntomas están:
- Dificultad respiratoria.
- Dolor intenso en el área torácica.
- Aceleración del ritmo cardiaco.
- Sudoración excesiva.
- Palidez y tos fuerte, en ocasiones con sangre.
Causas:
Entre las causas del neumotórax podríamos encontrar dos tipos: las intratorácicas y las extratorácicas. Las primeras tienen su origen en el propio pulmón, como la rotura de una burbuja de aire, fibrosis quística, etcétera. En el caso de las causas del segundo grupo, son aquellas que se originan por lesiones externas, como fracturas en las costillas.
¿Cómo prevenirlo?:
No se conoce ninguna manera de poder impedir la aparición del neumotórax; sin embargo, a las personas con antecedentes de esta enfermedad se les recomienda no realizar determinadas actividades como el buceo u otras similares que puedan comprometer a los pulmones.
Factores de riesgo:
En los pacientes con hábitos de tabaquismo, puede ser un poco más alta la probabilidad de sufrir un neumotórax.
Descripción general:
Enfermedad crónica tratable que aparece cuando existe un exceso de tejido adiposo (grasa) en el cuerpo.
Síntomas:
La acumulación del exceso de grasa debajo del diafragma y en la pared torácica puede ejercer presión en los pulmones, provocando dificultad para respirar y ahogo, incluso con un esfuerzo mínimo.
La dificultad en la respiración puede interferir gravemente en el sueño, provocando apnea del sueño, lo que causa somnolencia durante el día y otras complicaciones.
La obesidad puede causar varios problemas ortopédicos, incluyendo dolor de espalda, en las caderas, rodillas y tobillos. La sudoración excesiva es igualmente un síntoma de las personas con obesidad.
Causas:
Además de una mala alimentación o la falta de ejercicio físico, también existen factores genéticos y orgánicos que inducen su aparición.
También pueden influir la existencia de enfermedades que pueden favorecer que la obesidad se manifieste.
Además, algunos tratamientos farmacológicos, la falta de sueño o dejar de fumar también son factores de riesgo de la obesidad. Por último, el estrés o etapas como la menopausia o después de dar a luz pueden coincidir con un aumento de peso que si no se trata, puede acabar provocando obesidad.
¿Cómo prevenir?:
La prevención desde la infancia es imprescindible para reducir las cifras de esta enfermedad. Comer bien es uno de los pilares principales para evitar la obesidad, y podemos iniciar cambiando los hábitos de alimentación y adquiriendo una rutina alimentaria saludable en la que seamos partícipes.
Igualmente, el ejercicio físico debe combinar los ejercicios de fuerza con el trabajo cardiovascular, ya que al mejorar la fuerza también lo hará la capacidad de moverse, aumentará la motivación y la adherencia a ese programa tanto de ejercicio como de nutrición.
Factores de riesgo:
La obesidad es una enfermedad crónica que tiene un gran impacto en la calidad de vida del paciente y es un factor de riesgo de múltiples enfermedades, y cuando se presentan problemas óseos o dolores musculares, la obesidad puede agravar estas condiciones y poner en riesgo la vida del paciente.
¿Cuándo consultar?:
La forma más común de determinar si un paciente padece obesidad es calcular su índice de masa corporal, por el cual se obtiene la cantidad de grasa corporal y, dependiendo de los resultados, cuáles son los posibles riesgos para la salud. A partir de esto, el especialista podrá determinar si se ha producido algún daño colateral en el resto del organismo y diagnosticarlo para su tratamiento.
Descripción general:
En el caso de las mujeres, es un bloqueo en la salida de la orina por su vía normal hacia el exterior del cuerpo por el meato uretral. Esto puede aumentar el riesgo de infecciones urinarias y falla en la función de los riñones y de toda la vía urinaria.
Síntomas:
Puede presentar el chorro urinario más delgado, ganas constantes de ir a orinar, tener que hacer fuerza para orinar o tener ganas de orinar pero ser incapaz de hacerlo (retención urinaria).
¿Cómo prevenirlo?:
Al momento de presentar alteraciones al orinar consultar al médico para detectar la causa y prevenir un daño posterior.
Factores de riesgo:
Traumas, cálculos, alteraciones en la función miccional neurológica, cirugías previas.
Detectar la enfermedad:
La detección es clásicamente sintomática. Hay estudios como cistoscopia, ecografía y urodinamia que ayudan a determinar la severidad y la causa de una forma más objetiva.
¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico. En caso de deseo intenso de orinar y no poder hacerlo debe consultar a urgencias.
Descripción general:
Es un bloqueo en la salida de la orina por su vía normal hacia el exterior del cuerpo desde la vejiga al meato uretral (huequito por donde sale la orina).
Síntomas:
Puede presentarse como ganas constantes de orinar, orinar y quedar con ganas, imposibilidad para orinar así se desee, entre otras.
Causas:
Principalmente está asociado a un cierre completo o incompleto del cuello de la vejiga, es decir, el lugar donde se conecta la vejiga con la uretra. También se relaciona a cálculos o estrechez uretral, trauma, entre otros.
¿Cómo prevenirlo?:
No hay forma, pero sí es muy importante la detección temprana para evitar problemas a futuro.
Factores de riesgo:
La edad (menor de 40 años), cálculos, traumas, tumores, entre otros.
Detectar la enfermedad:
Se sospecha con los síntomas del paicente. Hay estudios como cistoscopia, ecografía y videourodinamia que ayudan a determinar la severidad y la causa de una forma más objetiva.
¿Cuándo consultar?:
Si lleva mucho tiempo con los síntomas o estos son muy severos debe asistir al médico. En caso de deseo intenso de orinar y no poder hacerlo debe consultar a urgencias.
Descripción general:
Es una enfermedad que aparece cuando el globo ocular adolece de la película lagrimal necesaria para humectar los ojos. Diversos factores generan alteraciones en la cantidad y la calidad de la lágrima, lo que aumenta su osmolaridad (concentración de sales) y favorece la inflamación, de forma que la lágrima ya no protege la superficie ocular y empieza a presentar pequeñas heridas que pueden agravarse.
Síntomas:
En un estadio inicial, las primeras manifestaciones de esta enfermedad consisten en la sensación de arenilla en el ojo, ardor, escozor, lagrimeo reflejo, visión borrosa, hipersensibilidad a la luz o picor. En estadios más avanzados, aparecen microerosiones y pequeñas ulceraciones.
En un tercer estadio surgen las úlceras en la córnea, infecciones recurrentes (repetidas) y pérdida en la agudeza visual.
Causas:
Las causas de ojo seco son múltiples:
- La edad avanzada es un factor de riesgo: alrededor de un 75% de las personas mayores de 70 años padece ojo seco en alguna de sus fases.
- Un 25% se debe a alteraciones hormonales. Por esta razón parece aumentar el ojo seco en la menopausia.
- Un 10% de los casos surge por trabajar durante mucho tiempo ante el computador. Los usuarios que pasan largas horas ante los monitores no parpadean lo suficiente para producir lágrima.
- Las lentes de contacto aumentan la posibilidad de sufrir esta enfermedad, ya que su uso suele resecar el ojo.
- La blefaritis posterior o disfunción de las glándulas de Meibomio.
- La diabetes también es un desencadenante, así como la disfunción tiroidea (alteraciones en la tiroides), el asma, el lupus eritematoso sistémico (LES), patologías autoinmunes como el síndrome de Sjögren, y enfermedades oftalmológicas como el glaucoma o las cataratas, en especial si el paciente se ha sometido a una intervención quirúrgica por esta causa.
- Algunos fármacos como los ansiolíticos, antidepresivos, antidescongestivos, antihistamínicos, diuréticos, betabloqueantes y anticonceptivos orales también pueden propiciar la aparición de ojo seco.
Otros factores desencadenantes son de tipo ambiental, como la exposición al humo del tabaco, la contaminación ambiental, el viento, las calefacciones, el aire acondicionado y los climas secos. Estos elementos contribuyen a evaporar la lágrima e inducen la sequedad.
¿Cómo prevenir?:
- Seguir una dieta rica en ácidos grasos omega 3 y baja en omega 6.
- Mantener una postura y distancia correctas delante del ordenador y descansar la vista de forma frecuente mirando a lo lejos en lugar de a la pantalla.
- En el caso de padecer una enfermedad ocular o someterse a algún tipo de intervención quirúrgica en los ojos, seguir estrictamente el tratamiento indicado e incluso prolongarlo si el especialista así lo recomienda.
- Evitar los ambientes excesivamente secos o en los que se utilice con frecuencia el aire acondicionado o la calefacción.
- No fumar y evitar el humo del tabaco indirecto y el viento directo.
Factores de riesgo:
Es aconsejable consultar con el especialista si se tiene dolor o enrojecimiento en los ojos, si aparecen llagas o descamación tanto en los ojos como en los párpados, en el caso de que haya sufrido una lesión ocular o los síntomas se acompañen de rigidez articular o sequedad en la boca.
Descripción general:
La ambliopía, conocida popularmente como ojo vago, es una patología común en los niños. Consiste en la pérdida de visión en un ojo, lo que impide ver claramente a través de este, sin que haya alguna deficiencia estructural en el globo ocular. Esto se debe a que la coordinación entre el ojo y el cerebro para interpretar las señales ópticas no se ha desarrollado lo suficiente.
Síntomas:
La ambliopía puede contar con varios síntomas que deben tenerse en cuenta a la hora de ser diagnosticados:
- Mala visión en un ojo o visión deficiente: es el tipo más frecuente, ya que si el niño ve mal, lo normal es que lo manifieste de alguna forma.
- La acción de entrecerrar los ojos, parpadear de forma excesiva o cerrar un ojo para ver.
- Un ojo desviado hacia fuera o hacia dentro.
- Dificultad a la hora de ubicar los objetos en el espacio.
- Dolores de cabeza: provocados generalmente por la falta de visión.
Causas:
Puede originarla cualquier condición que altere el desarrollo de la visión, aunque la más común es el estrabismo, que consiste en la pérdida de paralelismo de los ojos. También puede deberse a defectos de refracción, como son la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
Otras causas son enfermedades congénitas como cataratas o glaucoma, o una alteración en el sistema de fijación ocular, que causa la oscilación constante de los ojos.
¿Cómo prevenir?:
Las formas de prevenir la ambliopía son escasas. No obstante, se debe realizar una revisión oftalmológica desde una edad temprana y, posteriormente, acudir una vez al año si los resultados de esta han sido de normalidad.
Factores de riesgo:
El uso de distintos dispositivos electrónicos puede acelerar la ambliopía, ya que una exposición prolongada a la tableta o al teléfono móvil generan fatiga visual, lagrimeo e incluso visión borrosa, que exacerba la aparición de los síntomas.
No obstante, la calidad de vida del niño no tiene por qué verse mermada, ya que un diagnóstico rápido evitará futuros problemas de visión. Además, es excepcional la población que ve mermada su visión en la edad adulta por un caso de ambliopía en la niñez.
Descripción general:
La orquitis es la inflamación de uno o ambos testículos, debido a la propagación de una infección bacteriana desde el epidídimo (conducto que conecta el testículo con los diferentes vasos).
Síntomas:
Pueden aparecer los siguientes síntomas:
- Dolor en el testículo.
- Sangre en el semen.
- Secreción del pene.
- Fiebre.
- Dolor en la ingle.
- Dolor al tener relaciones sexuales o al eyacular.
- Dolor al orinar.
- Inflamación del escroto.
- Área inguinal hinchada y sensible en el lado afectado.
- Testículo sensible, inflamado y con sensación de pesadez.
Causas:
Puede ser causada por una infección de diferentes bacterias y virus.
Entre los virus que con más frecuencia pueden producir orquitis se encuentra el de las paperas. En estos casos la orquitis generalmente se desarrolla entre los 4 a 6 días después del comienzo de las paperas.
¿Cómo prevenirlo?:
La mejor prevención es evitar comportamientos sexuales de riesgo. A más parejas más riesgo existe. Además, mantener relaciones sexuales seguras para disminuir el riesgo de sufrir alguna TS.
Factores de riesgo:
Puede contagiarse a la pareja sexual, pero dependerá del tipo de agente infeccioso que la haya provocado, por lo que se recomienda mejor evitar durante un tiempo los encuentros sexuales.
Los factores de riesgo mediante la transmisión sexual son:
- Tener múltiples parejas sexuales.
- Realizar comportamientos sexuales de alto riesgo.
- Poseer antecedentes personales de alguna TS.
- Haber tenido una pareja sexual con alguna TS.
Los factores de riesgo que no se deben a una TS son:
- Ser mayor de 45 años.
- El uso prolongado de una sonda de Foley.
- No estar vacunado contra las paperas.
- Malformaciones congénitas de las vías urinarias que ocurren al nacer.
- Infecciones urinarias regulares.
- Haber realizado una cirugía de las vías urinarias (cirugía genitourinaria).
La mayoría de los casos de orquitis mejoran sin complicaciones. Sin embargo, la orquitis también puede provocar otras complicaciones como la infertilidad o:
- Epididimitis crónica
- Muerte del tejido testicular
- Fístula en la piel del escroto
- Absceso escrotal
Descripción general:
Es un bulto rojo y doloroso ubicado cerca del borde del párpado, que tiene una apariencia similar a un grano o una espinilla.
Los orzuelos suelen contener pus y, normalmente, tienen tendencia a formarse en el lado externo del párpado, aunque no siempre.
Síntomas:
El primer síntoma de un orzuelo es la presencia de un bulto rojo en el párpado. Además pueden aparecer los siguientes signos:
- Dolor de los párpados.
- Lagrimeo de los ojos.
- Legañas alrededor de los párpados.
- Hinchazón de los párpados.
- Sensibilidad a la luz.
- Sensación irritante de tener un cuerpo extraño en el interior del ojo.
Causas:
Las causas principales que pueden provocar la aparición de un orzuelo son:
Esta infección la provocan bacterias que habitan en la piel o en la nariz y que en situaciones normales son inofensivas. No obstante, a veces pueden ocasionar una infección al entrar en contacto con aberturas de la piel o el borde del párpado.
La falta de higiene, como tocarse los ojos con las manos sucias, cambiar los lentes de contacto sin desinfectarlas o dejarse el maquillaje durante la noche son algunas de las razones que pueden provocar esta infección.
También denominada blefaritis crónica. Es una inflamación del borde del párpado que, generalmente, afecta a los dos ojos y provoca irritación y enrojecimiento.
La blefaritis se puede aparecer por delante de las pestañas (blefaritis anterior) o por detrás (blefaritis posterior).
¿Cómo prevenir?:
El primer paso para prevenir la aparición de los orzuelos es mantener una buena higiene y evitar tocarse los ojos con las manos sucias. Además hay que realizar revisiones oftalmológicas anuales y en el caso de tener blefaritis, tratar esta afección.
A estos consejos se suman:
- Desechar los maquillajes y productos cosméticos viejos para reducir el riesgo de infecciones oculares recurrentes.
- No compartir los cosméticos con otras personas.
- No dejar el maquillaje para ojos durante la noche.
- Si usas lentes de contacto, lavar bien las manos antes de manipularlas y seguir los consejos de tu médico para desinfectarlas.
Factores de riesgo:
El riesgo de padecer un orzuelo aumenta en caso de:
- Tocarse los ojos sin lavarse las manos.
- Colocarse los lentes de contacto sin desinfectarlos a fondo o sin lavarse las manos primero.
- No desmaquillar los ojos antes de acostarse.
- Usas productos cosméticos caducados.
- Tener blefaritis.
- Tener rosácea u otras enfermedades de la piel que se caracterizan por enrojecimiento facial.
Descripción general:
Es una enfermedad sistémica esquelética que se caracteriza por una disminución de la masa ósea y un deterioro de la microarquitectura de los huesos, lo que supone un aumento de la fragilidad de los huesos y del riesgo de sufrir fracturas.
Esta patología es asintomática y puede pasar desapercibida durante muchos años hasta que, finalmente, se manifiesta con una fractura.
Síntomas:
Durante años se ha conocido a la osteoporosis como la epidemia silenciosa debido a que esta patología no produce síntomas, aunque el dolor aparece cuando surge la fractura. Los especialistas señalan que algunas fracturas vertebrales pueden pasar desapercibidas puesto que no se producen síntomas. En estos casos se pierde la oportunidad de frenar la pérdida de masa ósea y reducir el riesgo de nuevas fracturas.
Las fracturas más comunes en la osteoporosis son las del fémur proximal, húmero, vértebras y muñecas.
Causas:
El origen de la osteoporosis debe buscarse en los factores que influyen en el desarrollo y la calidad del hueso. El riesgo de padecer osteoporosis vendrá determinado por el nivel máximo de masa ósea que se obtenga en la edad adulta y el descenso producido por la vejez.
Además del envejecimiento, en su aparición intervienen factores genéticos y hereditarios. Las hijas de madres que tienen osteoporosis, por ejemplo, adquieren un volumen de masa ósea inferior que el de hijas de madres con huesos normales, y lo mismo sucede con gemelos univitelinos.
La desnutrición, la mala alimentación, el escaso ejercicio físico y la administración de algunos fármacos también pueden favorecer la aparición de la osteoporosis. Sin embargo, la menopausia es uno de los factores que más influye en su desarrollo en las mujeres, ya que la desaparición de la función ovárica provoca un aumento de la resorción ósea.
¿Cómo prevenirlo?:
La prevención de la osteoporosis es fundamental para evitar el avance de la patología. Estas son algunas recomendaciones para conservar y aumentar la densidad ósea:
- Mantener un consumo adecuado de calcio.
- Practicar ejercicio físico en el que el paciente no tenga que soportar peso corporal. Algunos estudios recientes han demostrado que los ejercicios en los que es necesario que los músculos muevan los huesos mantienen e incluso pueden aumentar la densidad ósea. Uno de los más recomendables en este sentido es el body pump.
- Seguir un tratamiento farmacológico, si lo prescribe el médico.
Factores de riesgo:
Además de la masa ósea, existen otros factores de riesgo independientes predictores de fractura:
- Tener antecedentes familiares de fractura de cadera.
- Haber tenido fracturas después de los 50 años.
- Poseer un índice de masa corporal (IMC) menor a 20.
- Presencia de deformidad vertebral morfométrica.
- Consumir tóxicos, como el alcohol o el tabaco.
Estos factores, unidos a la edad, ayudan a determinar qué personas tienen más riesgo de desarrollar osteoporosis.
Descripción general:
Es un tumor óseo maligno muy poco común que afecta principalmente a niños y a adolescentes. A pesar de su rareza, este es el tumor óseo más frecuente en la infancia seguido del sarcoma de Ewing.
Suele manifestarse entre los 10 y los 16 años, aunque también puede aparecer a partir de los 65 años. Este tipo de tumor se puede localizar en cualquier hueso, siendo frecuente que aparezca en la tibia y el fémur, cerca de la rodilla.
Síntomas:
Las manifestaciones más habituales de los sarcomas óseos son dolor y/o aparición de un bulto en una localización ósea. Estos síntomas no suelen aparecer de repente, sino que habitualmente se han venido desarrollando durante varios meses, con variaciones a lo largo del tiempo.
Causas:
Los osteosarcomas aparecen de forma esporádica y en la mayoría de los casos se desconocen las causas que los provocan. No existe ninguna relación genética que vincule este tumor con otras patologías o factores de riesgo,
¿Cómo prevenir?:
En la actualidad no existe ninguna medida que pueda prevenir la aparición del osteosarcoma. Las personas con riesgo, como los niños con historial familiar con tumores de ojo, los pacientes que han recibido radioterapia en un hueso o aquellos que tienen ciertos tipos de tumores benignos, como la displasia fibrosa y la enfermedad de Paget, deben realizar seguimientos médicos para controlar la posible aparición.
Factores de riesgo:
Los pacientes que tienen osteosarcoma con metástasis tienen un pronóstico malo. No obstante, en algunos casos la cirugía y la quimioterapia pueden ayudar a que el paciente viva más tiempo.
Para conseguirlo es fundamental que la enfermedad se controle mediante cirugía y/o radioterapia. La mayor probabilidad de alargar el tiempo de vida lo tienen los pacientes con metástasis en el pulmón (entre un 30 y un 50%) y la menor, aquellos que tienen metástasis en los huesos.
Descripción general:
Es una inflamación del oído causada, generalmente, por una infección. El tipo más común de esta afección es la denominada otitis media, que está provocada por la inflamación del oído medio, que se encuentra en la parte posterior del tímpano.
Síntomas:
En la forma aguda de la enfermedad existe dolor de oído (otalgia), fiebre, tinnitus e irritabilidad. Con menos frecuencia se puede presentar otorrea (supuración), vértigo y, muy poco frecuentemente, parálisis facial.
Causas:
La trompa de Eustaquio se encuentra entre el oído medio y la parte posterior de la garganta y su función es drenar el líquido que se produce en el oído medio. La infección se ocasiona cuando esta estructura se ve bloqueada y, por lo tanto, acumula el líquido, dando lugar a una disfunción tubárica.
Además de las bacterias, también juegan un papel muy importante en la patogenia de la otitis media los virus, siendo los más frecuentemente implicados el virus respiratorio sincitial, el virus influenza, el virus parainfluenzae, adenovirus, rinovirus y enterovirus.
Otras posibles causas son la infección de la vía respiratoria alta, problemas alérgicos y trastornos de la función ciliar del epitelio respiratorio de la vía respiratoria alta.
¿Cómo prevenir?:
Para reducir el riesgo de padecer esta enfermedad, los especialistas recomiendan lavarse las manos con frecuencia, en el caso de los niños, vacunarlos cuando proceda y, sobre todo, no abusar de los antibióticos ya que se puede generar una resistencia a ellos que reduzca o impida su efectividad.
Factores de riesgo:
La otitis media es una de las enfermedades más frecuentes de la infancia y una de las causas de pérdida de audición en casos extremos. Aproximadamente el 70 por ciento de los niños han tenido algún episodio de otitis media.
Descripción general:
Es una inflamación del páncreas y puede ser aguda o crónica.
Síntomas:
El síntoma principal de la pancreatitis es un dolor en el cuadrante superior izquierdo o medio del abdomen. Respecto a este dolor los especialistas señalan que:
- Puede empeorar en cuestión de minutos después de comer o beber, especialmente si los alimentos tienen un alto contenido de grasa.
- Se vuelve constante o más intenso y dura varios días.
- Puede empeorar al acostarse boca arriba.
- Puede propagarse a la espalda o por debajo del omóplato izquierdo.
- Las personas con pancreatitis aguda a menudo tienen fiebre, náuseas, vómitos y sudoración.
Otros síntomas que pueden estar relacionadas con esta enfermedad abarcan:
- Abdomen lleno de gases.
- Hipo.
- Indigestión.
- Leve coloración amarillenta de la piel y la esclerótica de los ojos (ictericia).
- Distensión abdominal.
Causas:
En cuanto a las causas de la pancreatitis crónica, además del consumo desmesurado de alcohol destacan episodios repetitivos de pancreatitis aguda. Pero además de estas, existen otras afecciones que se encuentran asociadas:
- Patologías de carácter autoinmune: Cuando el sistema inmunitario ataca al cuerpo.
- Obstrucción del conducto pancreático o del conducto colédoco, conductos que drenan las enzimas del páncreas y la bilis.
- Complicaciones de una fibrosis quística: Provoca acumulación de moco espeso y adherente en los pulmones, el tubo digestivo y otras áreas del cuerpo.
- Altos niveles de triglicéridos en la sangre.
- Hipertiroidismo: es un trastorno en el cual las glándulas paratiroides del cuello producen demasiada hormona paratiroidea.
- Uso de ciertos medicamentos, como sulfamidas, diuréticos tiazídicos o azatioprina.
¿Cómo prevenir?:
Para prevenir esta enfermedad es importante tener en cuenta cuales son los posibles factores de riesgo. Los pacientes que deben tener un cuidado especial son:
- Las personas con sobrepeso y obesidad.
- Aquellas que consumen excesivo de alcohol y alimentos ricos en grasas.
- Las personas que padecen de cálculos en la vesícula y vías biliares que deben ser detectados precozmente para poder ser tratados.
- Aquellos que tienen niveles de triglicéridos muy elevados.
Por lo tanto, las recomendaciones para prevenir su desarrollo se resumen en evitar el consumo de alcohol (o tomarlo en cantidades mínimas), una dieta saludable y equilibrada, evitar la obesidad y controlar los niveles de triglicéridos en sangre.
Factores de riesgo:
La pancreatitis es una inflamación del páncreas y puede ser aguda o crónica. En la primera se produce una inflamación aguda del páncreas que se resuelve de dos maneras: por un lado, en los casos más frecuentes, la inflamación cesa y va seguida de un proceso de reparación y cicatrización, o bien, en los casos menos frecuentes, la inflamación comienza a afectar a otros sistemas (circulatorio, respiratorio o excretor renal), dando lugar a un fallo orgánico o incluso el fallecimiento del paciente.
La pancreatitis crónica se produce por la agresión continuada de la glándula, lo que provoca una lenta destrucción del tejido pancreático funcional y su sustitución por tejido fibroso.
Descripción general:
La parotiditis (paperas) es la inflamación de las glándulas parótidas, que son las glándulas salivales más grandes y están situadas a ambos lados de la cara.
Síntomas:
Inicialmente aparece dolor y endurecimiento en la zona correspondiente a la glándula parótida (entre el lóbulo de la oreja y la mandíbula), generalmente debido a la inflamación de la zona. Característicamente el lóbulo de la oreja suele elevarse.
Tras el contagio, el aumento del tamaño de la glándula salival alcanza su máximo volumen a los dos o tres días. Normalmente, se inflama primero un lado y, en el transcurso de dos días, el otro, pero es posible que sólo afecte a uno de ellos.
Suele, además, asociarse a fiebre, dolor muscular y dolor de cabeza.
Causas:
La parotiditis no es una infección tan contagiosa como la varicela o el sarampión. La infección por paramyxovirus o virus de la parotiditis habitualmente proporciona inmunidad de por vida.
Las personas infectadas pueden propagar el virus al toser, estornudar, hablar, compartir utensilios (vasos, cubiertos...) o por contacto directo con la saliva. La enfermedad se contagia desde antes de que las glándulas salivales comiencen a inflamarse y hasta 5 días después del comienzo de la inflamación.
¿Cómo prevenir?:
La mejor forma de prevenir las paperas es mediante la vacunación. La inmunización frente a esta infección es una vacuna combinada, conocida como triple vírica, que protege frente a tres enfermedades víricas: sarampión, rubéola y parotiditis. Es una vacuna eficaz y muy segura y la pauta de administración son dos dosis: generalmente, la primera a los 12 meses y una dosis de recuerdo a los 2-4 años de edad.
Factores de riesgo:
El pronóstico para esta infección suele ser bueno, aunque se vean afectados otros órganos del paciente. Aunque es raro que la enfermedad se presente en adultos, cuando lo hace es más grave y suele presentar complicaciones con más frecuencia.
Las complicaciones son poco frecuentes, pero posibles, e incluyen la inflamación de las meninges (meningitis) y el encéfalo (encefalitis), del epidídimo o la inflamación del testículo (orquitis), del ovario (ooforitis), del riñón (nefritis), del músculo cardíaco (miocarditis) o de las articulaciones.
Descripción general:
La parálisis del sueño consiste en una imposibilidad transitoria de moverse y de hablar generalizada y completa. Ocurre en cualquier momento de la noche, generalmente en un despertar y, aunque menos frecuente, a veces en siestas
Síntomas:
La parálisis del sueño produce los siguientes síntomas:
- Incapacidad transitoria de moverse y hablar en un despertar.
- Ojos cerrados con más frecuencia, el paciente parece dormido. A veces, aunque es más raro, puede tener ojos abiertos y emitir sonidos y hacer alguna mueca al intentar salir de la parálisis.
- Sensación de angustia muy frecuente, con sensación de opresión y muerte inminente frecuente, sensación de falta de respiración por miedo o angustia.
- Más frecuente boca arriba y más angustiosa, y a veces más larga, en esta postura durmiendo.
- Puede acompañarse de fenómenos alucinatorios táctiles, cenestésicos (como volar o levitar), visuales o auditivos. La causa es que la actividad onírica -los sueños muy vivos que se producen en la fase REM- se escapan momentáneamente a la vigilia, y entonces los episodios son más angustiosos, a veces terroríficos.
Causas:
Las causas de parálisis del sueño pueden clasificarse como intrínsecas y extrínsecas:
- La causa intrínseca es un estado disociado sueño-vigilia, en el que aparecen elementos propios de la fase de sueño REM en vigilia. Lo más frecuente es que sea en un despertar, en una transición rápida, brusca o anómala desde la fase de sueño REM a la vigilia. No es lo fisiológico o habitual despertarse directamente desde el sueño REM. A veces es lo contrario, una transición anómala de la vigilia al sueño, con aparición de fenómenos del sueño REM. En sueño REM existe atonía o falta de tono muscular para no representar los sueños, y en una transición brusca o anómala desde REM a vigilia (o a veces viceversa), dicha falta de tono muscular se mantiene o aparece momentáneamente en la vigilia y provoca el fenómeno. Se paralizan todos los músculos salvo el diafragma (implicado en la respiración) y, a veces, los músculos oculares.
- Causas extrínsecas predisponentes pueden ser: mala higiene o privación de sueño de cualquier causa, consumo de alcohol, café y otras bebidas excitantes, consumo de drogas y estrés.
¿Cómo prevenir?:
- Tener una buena higiene de sueño, sobre todo evitando privaciones de sueño continuadas en el tiempo.
- Si se tiene un problema de sueño, hay que intentar controlarlo o solucionarlo acudiendo a un especialista.
- Evitar o moderar el consumo de alcohol, bebidas excitantes y tóxicos.
- Intentar dormir siempre de lado, evitando dormir boca arriba, si los episodios son relativamente frecuentes y angustian al afectado.
Factores de riesgo:
En personas sanas, puede ocurrir de manera anecdótica en el contexto de privación de sueño y horarios irregulares. Cuando se produce de forma repetida y aislada existe un trastorno del sueño llamado parálisis del sueño aislado recurrente.
También puede formar parte de la sintomatología de la narcolepsia, una enfermedad neurológica rara caracterizada por somnolencia diurna, episodios de cataplejía (pérdida de tono muscular brusca asociada a una emoción intensa) y alteración del sueño nocturno. Es más prevalente en personas con estrés postraumático y con trastornos de ansiedad.
Descripción general:
La enfermedad de Parkinson consiste en un desorden crónico y degenerativo de una de las partes del cerebro que controla el sistema motor y se manifiesta con una pérdida progresiva de la capacidad de coordinar los movimientos, entre otros síntomas. Se produce cuando las células nerviosas de la sustancia negra del mesencéfalo, área cerebral que controla el movimiento, mueren o sufren algún deterioro.
Síntomas:
Los síntomas típicos son los siguientes:
- Temblor: Consiste en un movimiento rítmico hacia atrás y hacia adelante. Generalmente comienza en la mano aunque en ocasiones afecta primero a un pie o a la mandíbula. Se agudiza en reposo o bajo situaciones tensas y tiende a desaparecer durante el sueño. Puede afectar sólo a un lado o a una parte del cuerpo.
- Rigidez: Se manifiesta como una resistencia o falta de flexibilidad muscular. Todos los músculos tienen un músculo opuesto, y el movimiento es posible porque, al activarse un músculo, el opuesto se relaja. Cuando se rompe este equilibrio los músculos se tensan y contraen causando inflexibilidad y debilidad.
- Bradicinesia: Se trata de la pérdida de movimiento espontáneo y automático y conlleva la lentitud en todas las acciones. Esta lentitud es impredecible y es el síntoma más incapacitante, porque el paciente no puede realizar con rapidez movimientos habituales que antes eran casi mecánicos.
- Inestabilidad: La inestabilidad de la postura hace que los enfermos se inclinen hacia adelante o hacia atrás y se caigan con facilidad. La cabeza y los hombros caen hacia delante y la forma de andar empeora. El enfermo da pasos cortos y rápidos para mantener el equilibrio; o se queda literalmente "plantado" a mitad de camino, sin poder moverse. Existen una serie de síntomas secundarios que, aunque no afectan a todos los enfermos, provocan trastornos importantes ya que empeoran los síntomas principales y agravan las condiciones físicas y psicológicas del paciente.
- Pérdida de expresividad: el rostro pierde expresividad y aparece la denominada "cara de pez o máscara", por falta de expresión de los músculos de la cara. Además, tienen dificultad para mantener la boca cerrada.
- Acinesia: Consiste en una inmovilidad total que aparece de improviso y puede durar desde algunos minutos a una hora.
- Hiposmia: Consiste en la mala distinción de los olores o la reducción de la capacidad para percibirlos. La hiposmia aparece en un 80 por ciento de los pacientes con Parkinson según la SEN.
- Depresión
- Dificultades para tragar y masticar
- Problemas urinarios
- Estreñimiento
- Trastornos del sueño
- Aumento o pérdida de peso
Causas:
De momento se desconoce el origen de la enfermedad, exceptuando los casos inducidos por traumatismos, drogodependencias y medicamentos, y algunas formas hereditarias en ciertos grupos familiares. Existen numerosas teorías que intentan explicar el deterioro neurológico que produce esta patología.
Se cree que algunos pesticidas y toxinas, junto a cierta predisposición genética, podrían ser los desencadenantes de la enfermedad. También se estudia la posibilidad de que el origen se encuentre en los radicales libres, moléculas que desencadenan un proceso de oxidación que daña los tejidos y las neuronas.
El genético es otro de los factores estudiados como causantes de esta patología.
¿Cómo prevenirlo?:
Las causas del Parkinson son desconocidas hasta la fecha, por lo que no existe una forma de prevenir la enfermedad.
Factores de riesgo:
El Parkinson afecta por igual a hombres y mujeres de todas las razas. Su desarrollo está relacionado con la edad: aparece generalmente a partir de los 50 años y la media de inicio de los síntomas se sitúa en los 60. Sin embargo, en los últimos años se ha registrado un aumento considerable de los casos de Parkinson precoz y se estima que cerca del 10 por ciento de los pacientes tienen menos de 40 años.
Descripción general:
El pie de atleta es una infección causada por hongos, que normalmente aparece en los dedos de los pies. El hongo ataca especialmente esta zona porque los zapatos crean un ambiente cálido y húmedo.
Síntomas:
Los síntomas más comunes del pie de atleta son:
- Piel seca en escamas.
- Picor.
- Enrojecimiento.
- Mal olor.
- Inflamación.
- Ampollas.
Además, si el hongo se encuentra en las uñas suelen presentar decoloración, engrosamiento e incluso podrían desprenderse.
Causas:
El pie de atleta es contagioso y se puede transmitir por contacto directo, por los zapatos y calcetines, así como en piscinas o duchas. Al ser común la infección entre los deportistas que utilizan estas instalaciones, el término pie de atleta se ha popularizado.
El riesgo puede aumentar al llevar zapatos cerrados, si se mantienen los pies húmedos por un largo período de tiempo y cuando hay una lesión en las uñas o en la piel.
Los hongos que provocan el pie de atleta son de la familia de los dermatofitos y se caracterizan porque se nutren de la queratina de la piel.
¿Cómo prevenir?:
Para prevenir las infecciones causadas por hongos como el pie de atleta, los especialistas aconsejan:
- Lavar los pies a diario con agua y jabón.
- Mantener los pies secos, especialmente entre los dedos.
- Usar calcetines limpios de algodón. Además, cambiarlos las veces que sea necesario para conservar los pies secos.
- En las piscinas o duchas públicas es fundamental usar chanclas.
- Los zapatos deben estar bien ventilados y fabricados de un material natural como el cuero, que permita la transpiración.
- Al ser una enfermedad que se transmite por contacto directo con los hongos, hay que evitar que se propaguen, ya que en algunos casos puede llegar a afectar a las manos si después de rascarse o tocarse los pies no se efectúa una higiene adecuada.
Factores de riesgo:
Cuando el pie está hinchado, caliente al tacto, con pus o el contagio se propaga a la pierna se debe acudir al médico, ya que puede deberse infecciones más graves.
Las complicaciones que a veces surgen pueden tener que ver con infecciones bacterianas asociadas a la patología, que deben ser tratadas con antibióticos, o bien con la extensión de la infección fúngica a las uñas de manos y pies (onicomicosis), a las manos e, incluso, a las ingles, que deben ser tratadas también con medicación contra los hongos.
Descripción general:
La poliomielitis, también conocida como polio, es una enfermedad viral infecciosa e incurable que afecta al sistema nervioso. La mayor incidencia de la enfermedad se produce sobre todo en los menores de 5 años.
Se puede contagiar entre personas, y que, en aquella minoría de personas con su afectación más grave, puede provocar importantes lesiones neurológicas incluyendo parálisis, dificultad para respirar o para tragar, o incluso, la muerte.
Síntomas:
En la gran mayoría de los pacientes la infección va a pasar desapercibida, permaneciendo en más del 90% de los casos asintomáticos. En torno a un 5% de los pacientes van a tener un cuadro leve de la enfermedad denominada polio abortiva. Tras un periodo de incubación de 4 a 10 días, pueden sufrir síntomas inespecíficos comunes a otros procesos virales, con fiebre, dolor de cabeza o de garganta, náuseas o vómitos, cansancio y malestar general.
Causas:
El virus de la polio se transmite por vía oral, mediante alimentos y bebidas contaminadas por el virus y a través del contacto con la saliva o las heces de una persona infectada. Se puede adquirir en la naturaleza o por transmisión entre humanos generalmente por vía fecal-oral, es decir, por agua contaminada, aunque también en ambientes con más higiene, se produce la transmisión oral-oral, es decir, por gotas de saliva.
Tras la infección, el virus penetra en el tejido linfoide de la orofaringe y del tubo digestivo, produciendo un periodo de viremia y posterior diseminación. La enfermedad se produce si la infección no es controlada por el sistema inmune, pudiendo en un pequeño porcentaje de pacientes llegar el virus a alcanzar el sistema nervioso central, dañando principalmente las neuronas motoras en la médula espinal y pudiendo también afectar al encéfalo.
¿Cómo prevenir?:
La poliomielitis es una enfermedad que se puede prevenir. Los niños tienen incluida en su calendario vacunal infantil la vacuna del polio, altamente eficaz. En el caso de los adultos, se recomienda en el caso de viajes al extranjero a países donde no esté todavía erradicada, acudir a un centro de vacunación internacional donde se valorará la conveniencia de su recibir vacunación.
Factores de riesgo:
En los casos más graves puede ser necesario el empleo de respiradores artificiales durante en caso de parálisis de la musculatura respiratoria, así como prevenir y tratar otras complicaciones como las infecciones, o el desarrollo de trombosis por el encamamiento.
Descripción general:
La preeclampsia es una enfermedad del embarazo que afecta a diferentes órganos y sistemas y se manifiesta principalmente por la tensión arterial alta. También puede ocasionar proteinuria (presencia de proteínas en la orina) y lesiones en órganos como el riñón o el hígado. Generalmente se produce en la segunda parte de la gestación, a partir de la semana 20 y, sobre todo, de la semana 34 en adelante.
Síntomas:
La hipertensión es el síntoma más característico de la preeclampsia, pero no es el único y, en algunos casos, la tensión no está excesivamente elevada. Otros posibles síntomas son:
- Proteinuria (proteínas en la orina).
- Dolor de cabeza.
- Alteraciones visuales (ver luces, destellos, visión borrosa).
- Zumbidos en los oídos.
- Dolor en la boca del estómago (epigastralgia).
- Náuseas, vómitos.
- Insuficiencia respiratoria.
- Edema (hinchazón), sobre todo en manos y cara.
- Menor producción de orina.
- Plaquetas bajas en sangre (plaquetopenia o trombocitopenia).
- Transaminasas altas en sangre, que indican alteración de la función hepática.
- Aumento de peso repentino.
Causas:
El origen de la preeclampsia, sobre todo de las formas más graves y precoces, está en la placenta, que no siempre resulta suficiente para alimentar al feto. Cuando está poco oxigenada porque su implantación en el primer trimestre ha sido defectuosa, se inflama y los marcadores inflamatorios que emite son los que acaban produciendo una inflamación global de los diferentes órganos y sistemas de la mujer y se producen los síntomas típicos de la preeclampsia.
La hipertensión que se genera en esta situación sería un mecanismo compensatorio, según el especialista del Hospital 12 de Octubre, ya que como resultado de ella se consigue perfundir mejor la placenta, es decir, que entre más sangre y alimente mejor al feto. En definitiva, la placenta siempre trata de favorecer al feto.
¿Cómo prevenir?:
La prevención de la preeclampsia es complicada, ya que se trata de una enfermedad que depende de numerosos factores. No se ha demostrado que medidas de estilo de vida encaminadas a mejorar el estado general de la embarazada, como una dieta específica o la práctica de ejercicio físico, incidan favorablemente en el riesgo de desarrollar preeclampsia, pero sí hay algunas estrategias que se han mostrado eficaces.
Factores de riesgo:
Hay algunas características y circunstancias de la gestante que incrementan el riesgo de que desarrolle preeclampsia. Estas son las más importantes:
- Edad (si tiene más de 40 años).
- Obesidad.
- Primer embarazo.
- Embarazo múltiple.
- Raza negra.
- Diabetes o diabetes gestacional.
- Hipertensión crónica.
- Enfermedad renal.
- Trombofilias.
- Lupus.
- Embarazo por reproducción asistida y, especialmente, con donación de óvulos.
Descripción general:
Es una inflamación de la próstata, que puede estar asociada o no a una infección bacteriana.
Síntomas:
Los síntomas pueden diferir entre si la prostatitis es causada por un origen bacteriano o por un origen no bacteriano. Pero ambos, comparten los comportamientos de:
- Sensación de ardor, escozor o picor al orinar (disuria).
- Poliaquiuria (necesidad frecuente al orinar).
- Sangre en la orina.
Además la prostatitis puede causar fiebre y escalofríos. En la prostatitis bacteriana crónica también pueden darse otros síntomas como:
- Molestias en los testículos.
- Eyaculación dolorosa.
- Sensación de presión y/o dolor en la región púbica y parte baja del abdomen.
- Tirones y dolores en la ingle.
- Disfunción eréctil.
- Pérdida de la líbido.
Causas:
Las causas de la prostatitis son diversas y dependen del tipo de agente patógeno que ha provocado la inflamación de la próstata. Éstos pueden ser de origen bacteriano o no bacteriano.
¿Cómo prevenir?:
No todos los tipos de prostatitis se pueden prevenir. Generalmente la prostatitis se consigue prevenir con un tratamiento médico temprano y con una buena higiene personal ya que ésta puede impedir que las bacterias se extiendan a la próstata y provoquen su inflamación.
Factores de riesgo:
Se cree que la prostatitis es un problema común, que afecta hasta el 25 por ciento de todos los hombres; sin embargo el diagnóstico y el tratamiento pueden ser difíciles.
Descripción general:
Es una enfermedad inflamatoria de la piel, que ocasionalmente también afecta a las articulaciones, y que provoca enrojecimiento, descamación, dolor e hinchazón.
Síntomas:
Puede manifestarse de forma lenta o aparecer de forma repentina. Además, los síntomas pueden desaparecer durante un periodo de tiempo y volver a aparecer.
Las manifestaciones más habituales son lesiones cutáneas en forma de placas cuyo tamaño puede variar y que se caracterizan estar enrojecidas y recubiertas por escamas blanquecinas de forma y tamaño diferentes, algunas pueden tener el tamaño de la uña del dedo meñique, pero otras pueden extenderse hasta cubrir grandes superficies del cuerpo, adoptando una forma de anillo o espiral.
Las ubicaciones más frecuentes son los codos, las rodillas, el cuero cabelludo, la espalda y las nalgas. Otros síntomas menos frecuentes son:
- Dolor.
- Lesiones genitales en los hombres.
- Modificaciones en las uñas que van desde el color (tonalidades entre el amarillo y el marrón), grosor (más gruesas y el desprendimiento y separación de la piel).
- Caspa.
Causas:
Aunque se desconoce el origen concreto de la enfermedad, sí se sabe que es una enfermedad genética. También se sabe que es una enfermedad hereditaria. Si uno de los dos padres es psoriásico, uno de cada ocho hijos puede sufrirla; si son los dos progenitores los afectados, la probabilidad asciende a uno de cada cuatro. Sin embargo, no por el hecho de ser psoriásico, los hijos van a serlo. Además puede ocurrir que se herede la alteración genética, pero no se desarrolle la enfermedad, porque también intervienen factores exógenos (externos) en su aparición.
Dentro de los factores externos que pueden desencadenarla destacan:
- Infecciones crónicas.
- Estrés nervioso.
- Obesidad.
- Consumo de alcohol.
- Enfermedades como la artritis reumatoide.
- Cambios hormonales.
- Traumatismos (heridas, golpes, quemaduras solares, etc.).
¿Cómo prevenirlo?:
En la actualidad no se conoce ningún método que ayude a prevenir la aparición de esta patología. Los especialistas aconsejan mantener la piel humectada y limpia, así como evitar los desencadenantes anteriores.
Factores de riesgo:
La psoriasis es una enfermedad crónica que se mantiene durante toda la vida. Si el paciente recibe el tratamiento el impacto sobre su calidad de vida no será muy alto. Es fundamental que los pacientes con psoriasis mantengan una higiene adecuada en la piel para evitar que se produzcan infecciones que pueden originar lesiones y un nuevo brote de la enfermedad.
Descripción general:
Por definición general, sabemos que una quemadura es una lesión en la piel debido al contacto o exposición de un agente peligroso, como son el calor, el frío, la electricidad, las radiaciones del sol o ciertos productos químicos.
El cuerpo humano tolera temperaturas de hasta 40º C; por encima se pierde la capacidad natural de la piel de regenerarse.
Síntomas:
Una quemadura puede ser dolorosa o no, dependiendo de su grado. El grado de una quemadura está determinado por su localización en el cuerpo y por la profundidad a la que llega en la piel. Así, podemos diferenciar entre quemaduras de primer grado, segundo grado o de tercer grado, las más graves:
- Primer grado: Solo afectan a la capa más superficial de la piel, y se caracterizan por un enrojecimiento de la piel que duele al contacto, comúnmente las encontramos cuando la persona ha tenido una exposición prolongada al sol. Son las más frecuentes de encontrar, sobre todo en el verano.
- Segundo grado: Son un poco más profundas, y su característica principal es la aparición de ampollas. Las ampollas son un sistema de defensa ante la quemadura: protege de las infecciones y, con el líquido que contienen, hidratan la herida y ayudan a la cicatrización. Estas quemaduras son muy dolorosas. También se conocen como quemaduras de espesor parcial.
- Tercer grado: En estas quemaduras podemos ver tejido carbonizado, las terminaciones nerviosas encargadas de transmitir el dolor se destruyen, de ahí que se diga que las quemaduras de tercer grado no duelen. Se llaman también quemaduras de espesor total. Pueden requerir injertos.
¿Cómo prevenir?:
- Reducir la temperatura del agua.
- Evita los derrames de sustancias calientes.
- Bloquea el acceso a la estufa, la chimenea, los calentadores y los radiadores. No dejes a un niño desatendido en una habitación cuando estos objetos estén en uso.
- Guarda los objetos que generan calor, como planchas para ropa o rizadores de cabello, desconectados y fuera de alcance.
- Ten cuidado cuando calientes alimentos o líquidos en el microondas porque podrían calentarse de manera irregular.
- Identifica los cables y los tomacorrientes. Cubre los tomacorrientes que no se utilicen con una tapa de seguridad y mantén los cables eléctricos fuera del paso para que los niños no los tiren ni los mastiquen.
- Reemplaza los cables eléctricos deshilachados, rotos o desgastados.
- Evita exponerte al sol sin protección solar.
- Prestar atención a las parrillas, los fogones y las fogatas.
- Evita los fuegos artificiales.
- Tener precaución con velas, cigarrillos, encendedores y fósforos.
Factores de riesgo: Las quemaduras son muy peligrosas debido a las complicaciones que pueden acarrear. Una leve quemadura de primer grado no supone una gran amenaza, pero una piel que ha sufrido quemaduras recurrentes puede llegar a causar problemas mayores como puede ser el cáncer de piel. Por eso es muy importante prevenirlas con una buena protección solar adecuada a nuestra piel.
En cuanto a quemaduras de segundo y tercer grado, las complicaciones afectan a la mayor parte del organismo, desde dificultad en la respiración hasta daño cardíaco. Por este motivo debemos aprender a reconocerlas con rapidez y actuar con decisión, así no solo prevenimos daños posteriores sino que además podemos salvar una vida.
Descripción general:
Son lesiones quística única o múltiples de carácter benigno que afectan el hígado.
Síntomas:
Asintomáticas la mayoría de las veces o con síntomas mecánicos asociados.
Causas:
Son de carácter congénito que puede ser dominante o recesivo o como aparición ocasional sin componente familiar.
¿Cómo prevenir?:
Diagnostico precoz en los que tienen componente familiar para vigilar la progresión.
Factores de riesgo:
Antecedentes familiares
Descripción general:
La rabia es una enfermedad vírica aguda mortal que afecta al sistema nervioso central, y que se transmite al hombre normalmente por la saliva a través mordeduras o arañazos de animales domésticos o salvajes que están infectados. Hasta en el 99 por ciento de los casos por rabia, el virus se transmite por perros domésticos.
Síntomas:
Las manifestaciones clínicas pueden variar dependiendo de las distintas formas que adopte la enfermedad. Generalmente el periodo de incubación de la rabia suele ser de uno a tres meses aunque cabe la posibilidad de que oscile entre menos de una semana y más de un año, esto dependerá siempre del punto infectado y la carga vírica. Entre los síntomas más comunes destacan:
- Hinchazón o enrojecimiento.
- Dolor de cabeza.
- Fiebre.
- Malestar en general.
- Náuseas.
Normalmente entre las primeras manifestaciones se encuentra la fiebre.
Causas:
Es una enfermedad que afecta a diferentes animales domésticos y salvajes, la infección en humanos se produce por mordedura y/o arañazos.
¿Cómo prevenir?:
La mejor forma de prevenir la rabia, según la OMS es a través de la inmunización humana preventiva, es decir, vacunarse, administrándose la vacuna.
Factores de riesgo:
La rabia se ha convertido en un grave problema de salud en zonas como Bangladesh, Bolivia, China, Ecuador, Etiopía, México, India, Filipinas y Tailandia. Por este motivo los expertos recomiendan que las personas que viajen a países con mayor exposición a la enfermedad debe vacunarse un mes antes de la visita.
Descripción general:
El rectocele o prolapso vaginal es una herniación del recto hacia la vagina. Una hernia se produce por un descenso o caída de un órgano hacia otro orificio y, en este caso concreto la caída del recto hacia la vagina.
Es una afección fundamentalmente de carácter femenino causada por una pérdida de la calidad de los tejidos vaginales y del soporte pélvico, lo que puede dar lugar a un debilitamiento y desgarro de los tejidos que soportan el recto y la vagina.
Síntomas:
En la mayoría de las ocasiones, el rectocele supone una afección de carácter leve y, por lo tanto, no presenta síntomas. En los casos en los que sí se presentan manifestaciones, éstas incluyen alteración en la defecación, presión en la zona pélvica o disfunción sexual.
Otros síntomas son la presencia de un bulto blando de tejido que puede sobresalir por la abertura vaginal, estreñimiento, pérdida de evacuaciones intestinales por el recto, dolor en la parte inferior de la espalda que desaparece al acostarse, presión en la vagina al orinar y mantener relaciones sexuales o la sensación de que el recto no se ha vaciado por completo tras defecar.
Causas:
La causa principal por la que se produce esta afección es porque los músculos y los ligamentos se debilitan y no pueden dar el apoyo suficiente a la vagina y el recto.
Concretamente, esto sucede en el tabique rectovaginal, que es el que separa el recto de la vagina y es el que puede llegar a debilitarse causando un rectocele. Esta debilidad puede deberse a diferentes razones, tales como la edad (sobre todo después de la menopausia), la genética, la obesidad o como efecto secundario de una cirugía pélvica.
Además, el parto, el estreñimiento crónico o levantar objetos muy pesados puede aumentar el riesgo de padecer esta afección.
Normalmente, esta patología suele desarrollarse en mujeres de edad avanzada pero, ocasionalmente, puede presentarse en mujeres jóvenes que no han tenido partos.
¿Cómo prevenir?:
Dentro de las medidas preventivas que recomiendan los especialistas para evitar padecer esta afección se encuentra:
- Evitar la presión en el abdomen reduciendo la fuerza con la que se evacua el intestino.
- Además, también se recomienda evitar levantar objetos muy pesados con excesiva continuidad.
- Hacer ejercicios para fortalecer el suelo pélvico con, por ejemplo, la realización de los ejercicios de Kegel.
- Beber una mayor cantidad de líquido de la habitual para ayudar a evitar el estreñimiento.
- Mantener un peso saludable a través de una dieta equilibrada y una rutina de ejercicios.
- Ingerir más alimentos ricos en fibra, como las frutas frescas o las verduras, que pueden ayudar a ablandar las evacuaciones intestinales.
Factores de riesgo:
Por último, podría ser necesaria una intervención quirúrgica para curar la afección. Esta solo se realizará si la paciente presenta síntomas y, por lo tanto, el rectocele se presenta como grave.
Descripción general:
El retinoblastoma es un tipo raro de cáncer que afecta a los tejidos de la retina del ojo. Se forma en la capa de tejido nervioso posterior al ojo, que detecta la luz del exterior y envía las señales al cerebro. Es un tumor maligno intraocular común en niños, con una incidencia de uno por cada 15 mil nacidos vivos, por lo que se considera el segundo tumor intraocular más frecuente.
Síntomas:
El retinoblastoma puede afectar a uno o ambos ojos. Los signos más característicos de este cáncer son:
- Leucocoria o presentar la pupila de color blanco o con manchas blancas.
- Estrabismo o desviación de uno de los ojos.
- Visión doble de los objetos.
- Ojos desalineados.
- Pupila rojiza y dolor en los ojos.
- Falta de visión.
- Diferentes colores en el iris.
- Dolor óseo si el retinoblastoma se ha diseminado.
- Agrandamiento de la pupila del ojo afectado.
Causas:
La mitad de los pacientes que padecen este tipo de cáncer suelen ser de temprana edad y no tienen antecedentes familiares de retinoblastoma. Se diagnostica frecuentemente en niños menores de seis años, entre uno y dos años es la edad más común. Pero el retinoblastoma también tiene un componente genético y hereditario; en estos casos los hijos de los pacientes tienen un 50 por ciento de posibilidades de contraer esta patología y de que aparezca en ambos ojos.
¿Cómo prevenir?:
El factor genético es una de las causas más relevantes. De hecho, el seguimiento de las personas dentro del grupo de riesgo es una medida eficaz para prevenir el retinoblastoma.
Factores de riesgo:
La supervivencia de los pacientes de retinoblastoma es elevada, más del 90 por ciento lo superan. La causa de mortalidad está estrechamente relacionada con la diseminación de este tumor y su metastatización sistémica. Se seguirá de cerca, por lo tanto, a la familia con miembros que lo padezcan (tanto a los hermanos como a los hijos), para poder facilitar de esta forma un tratamiento óptimo y eficaz.
Las complicaciones derivadas de esta patología pueden ser diversas, sumadas a los problemas vinculados con el tratamiento al que se somete el paciente.
Descripción general:
En algunas ocasiones, la diabetes produce una alteración en los vasos sanguíneos del ojo y provoca un daño en la retina, que se conoce como retinopatía diabética.
Esta enfermedad puede derivar en una ceguera si no se detecta a tiempo, por lo que es importante que las personas diabéticas controlen su visión con regularidad.
Síntomas:
A menudo no se producen síntomas durante las primeras etapas de la retinopatía diabética. No obstante, con el avance de la afección, la visión podría volverse borrosa o perderse por completo. Pero incluso, en los casos más avanzados, la enfermedad podría progresar sin señales de alarma durante un tiempo prolongado, de ahí la importancia de realizarse exámenes oculares periódicos.
Entre los síntomas más comunes, también se incluye, la percepción de sombras o áreas de visión perdidas o dificultad para ver de noche y en situaciones donde haya poca luz.
Causas:
La principal causa es un control inadecuado de la glucemia (glucosa en sangre) en los pacientes que padecen diabetes. Sin embargo, otros factores como el tabaco, la obesidad o la hipertensión arterial (los mismos que pueden causar diabetes), también contribuyen a que aparezca esta enfermedad.
¿Cómo prevenir?:
La mejor forma de evitar la retinopatía diabética consiste en controlar la diabetes y mantener la presión arterial a niveles normales. Las personas diabéticas deben someterse a exámenes visuales anuales cinco años después de que se les diagnostique la diabetes. De esta manera, el tratamiento puede aplicarse precozmente y se pueden evitar problemas graves de visión.
Los especialistas recomiendan controlar los niveles de glucosa en sangre consumiendo alimentos saludables, haciendo ejercicio con regularidad y tomando los medicamentos para la diabetes prescritos por el médico.
Factores de riesgo:
Además de la retinopatía, en las personas con diabetes se pueden presentar otras enfermedades, tales como las cataratas (el cristalino del ojo se vuelve opaco), glaucoma (aumento de la presión del ojo) o edema macular que provoca visión borrosa.
Además, es posible que se produzca desprendimiento de la retina debido a una mala cicatrización.
Descripción general:
Es un trastorno que afecta a la mucosa nasal y que produce estornudos, picor, obstrucción, secreciones nasales y, en ocasiones, falta de olfato. Estos síntomas se presentan generalmente durante dos o más días consecutivos y a lo largo de más de una hora la mayoría de los días.
Síntomas:
Los afectados pueden notar en la nariz, el paladar, la parte posterior de la garganta y los ojos un picor que empieza de forma gradual o bruscamente. Por lo general, los pacientes presentan ojos llorosos, estornudos y la caída de agüilla clara por la nariz. Algunas personas pueden tener dolor de cabeza, tos, y jadeos. Además pueden estar irritables y deprimidas; pierden el apetito y tienen dificultades para conciliar el sueño.
Causas:
El principal factor que causa la rinitis son los aeroalérgenos, que suelen clasificarse como agentes de interior, exterior y laborales. En el caso de los primeros, los más importantes son los ácaros del polvo doméstico (unos parásitos más pequeños que la punta de un alfiler que se encuentran por centenares en el interior de los colchones y alfombras de las casas), así como la saliva, los epitelios u orina de animales (gatos, perros, hámsters).
Los agentes de exterior son algunas especies de hongos atmosféricos y pólenes.
¿Cómo prevenir?:
La principal acción para prevenir la rinitis es evitar el polen. Las recomendaciones son:
- Evitar las horas del día donde las cantidades de polen son más altas, especialmente las horas de la mañana.
- Descartar las salidas al campo y pasar cerca de parques y zonas verdes.
- Cuando los árboles, las flores y el moho están floreciendo los especialistas recomiendan no realizar actividades al aire libre.
- Mantener las ventanas cerradas de casa para evitar que entre el polen. La primera hora de la mañana es la mejor para ventilar.
- Viajar en coche con las ventanillas cerradas y evitar utilizar la bicicleta y la moto.
- Usar gafas de sol.
- No realizar o intentar no practicar actividades al aire libre los días calurosos de verano.
- Limpiar los filtros de los aparatos de aire acondicionado de manera regular.
- Evitar objetos que pueden almacenar polvo: cortinas y alfombras, sobre todo en los dormitorios.
- Si el paciente tiene una mascota que suelte pelo debe aspirar la casa con frecuencia y evitar que el animal esté cerca de cortinas, alfombras y los dormitorios.
Factores de riesgo:
La rinitis alérgica se produce por la interacción entre los genes y el entorno. Los principales factores de riesgo de la enfermedad son:
- Los hijos de padres alérgicos tienen más riesgo de desarrollar la patología.
- La exposición a los factores ambientales. Los especialistas señalan que existe una teoría, denominada hipótesis de la higiene, que defiende que las infecciones y el contacto antihigiénico podrían ofrecer protección frente a la alergia, mientras que un entorno estéril fomentaría su aparición.
- Está demostrado que la contaminación afecta al desarrollo de la rinitis. Ésta es más frecuente en personas que viven en regiones con mucho tráfico de vehículos.
Descripción general:
Es una enfermedad de la piel que produce que la cara se vuelva de color rojo. A veces puede confundirse con acné.
Síntomas:
Los pacientes que presentan la enfermedad suelen haber padecido antecedentes de episodios de enrojecimiento facial, como rubor, y también aumento de la temperatura de la piel en respuesta a estímulos como líquidos muy calientes o la ingesta de alcohol.
Causas:
Por el momento sus causas se desconocen, aunque se sabe que aparece presente sobre todo en mujeres entre los 30 y los 50 años con piel sensible.
Cómo prevenirlo:
Al desconocerse sus causas, tampoco existe un tratamiento de prevención concreto. No obstante, evitar los factores desencadenantes como las comidas calientes, el alcohol o el estrés puede ayudar a prevenir la enfermedad.
Factores de riesgo:
Entre las complicaciones más comunes a causa de la rosácea están:
- En la nariz puede causar hipertrofia de la nariz.
- También puede producir metofima, inflamación e hipertrofia de la almohadilla de la frente.
- Inflamación de los párpados.
- Inflamación de los lóbulos auriculares.
- Inflamación del mentón.
Descripción general:
Es una enfermedad infecciosa que causa en los afectados gastroenteritis o infección intestinal. Se caracteriza por ser extremadamente contagioso y resistente. Esta infección es considerada como un problema de salud pública, sobre todo en los países en vías de desarrollo.
Síntomas:
Los principales síntomas del rotavirus son diarrea, fiebre y vómitos. Es muy importante controlar la hidratación de los infectados por esta enfermedad, ya que las diarreas que provoca suelen ser severas. La deshidratación en el caso del rotavirus es más común que en otras infecciones y en casos extremos puede provocar la muerte, especialmente en bebés y niños pequeños. El dolor abdominal, junto con los otros síntomas, también puede ser un indicio de infección por rotavirus.
El virus tiene un periodo de incubación de dos días, aproximadamente, antes de que se manifiesten los síntomas. La diarrea suele durar entre cinco y diez días y la fiebre suele ser leve. Aunque la infección por rotavirus puede causar la muerte por deshidratación, la mortalidad en los países desarrollados es muy baja
Causas:
Esta infección se transmite al entrar en contacto con las heces del infectado de forma oral, ya que el virus puede sobrevivir durante varias horas en las manos y durante días en superficies sólidas, como pañales, ropa, sábanas, etcétera. Además, también puede transmitirse a través del consumo de alimentos o agua infectados con el virus.
¿Cómo prevenir?:
En la actualidad existen vacunas contra esta infección, que se administran, de forma oral, a partir de las seis semanas de vida.
El rotavirus es muy contagioso, por lo que, una vez confirmada la infección, se debe proteger al infectado en todo momento y se debe procurar mantener el menor contacto posible. Las aulas, guarderías y los lugares públicos pueden ser el escenario de brotes epidémicos.
A pesar de que lavarse las manos no garantiza evitar contagiarse por el virus, una buena higiene reduce las posibilidades de contraer la enfermedad.
Factores de riesgo:
El rotavirus es la causa más común de gastroenteritis aguda en el mundo y afecta principalmente a niños y lactantes.
La Organización Mundial de la Salud cifra entre 450.000 y 550.000 las muertes infantiles al año en todo el mundo causadas por esta infección.
Descripción general:
La rubéola es una infección vírica contagiosa que afecta, principalmente, a niños y a adultos jóvenes.
Síntomas:
Los síntomas comienzan entre los 14 y los 21 días después de la infección. La rubéola se caracteriza por la aparición de pequeñas erupciones en la piel de un color rosáceo que se inician en la cabeza y progresan hacia las extremidades, haciéndose más numerosas en el tronco. Estas erupciones no provocan picores ni molestias y suelen desaparecer en pocos días. Suelen mostrarse uno o dos días después del contagio.
Junto a las manchas rojizas, los síntomas de la rubéola son bastante similares a los de un síndrome gripal, con malestar general, fiebre poco intensa, enrojecimiento de los ojos, dolor de garganta (faringitis) e inflamación dolorosa de los ganglios, del cuello sobre todo, alrededor de la nuca y en la región posterior de las orejas.
Causas:
Se transmite a través de estornudos, tos o el contacto con superficies contaminadas (pañuelos, vasos, o manos). Las posibilidades de que una persona no vacunada adquiera la enfermedad si convive con alguien que la tiene son del 90 por ciento.
Cuando el virus se introduce en el organismo, pasa a la sangre atacando a los glóbulos blancos, que a su vez transmiten la infección a las vías respiratorias, la piel y otros órganos. Una vez que se padece la enfermedad, el paciente adquiere inmunidad permanente, por lo que no vuelve a ser afectado por el virus. En el caso de los bebés infectados antes del nacimiento, éstos pueden ser contagiosos durante muchos meses después de nacer.
El periodo de incubación de la enfermedad, tiempo que transcurre desde que el virus entra en contacto con una persona hasta que comienzan a desarrollarse los síntomas, suele oscilar entre dos y tres semanas.
A su vez, una persona infectada por el virus de la rubéola puede transmitir la enfermedad a otras personas dos días antes de que los síntomas se muestren, no desapareciendo el riesgo de contagio hasta una semana después de la aparición de los signos de la enfermedad.
¿Cómo prevenir?:
La vacuna triple vírica, que protege frente a la rubéola, el sarampión y las paperas, es eficaz en casi la totalidad de las personas a las que se les administra. Es una vacuna combinada que se recomienda en la niñez y es aconsejable administrar la primera dosis cuando el niño cumple 15 meses, aunque en algunos casos no proporciona la inmunidad adecuada.
En estos casos, se suele facilitar una segunda dosis antes de la escolarización (entre los cuatro y los seis años) o antes de la adolescencia (entre los once y los trece años). En cualquier caso, también se recomienda la vacunación en personas adultas no inmunes.
Factores de riesgo:
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la rubéola puede ser grave para las mujeres embarazadas, debido al denominado síndrome de rubéola congénita (SRC). Una mujer infectada durante las primeras 16 semanas (sobre todo las primeras 8 o 10 semanas) del embarazo puede abortar, dar a luz un bebé muerto o que éste nazca con defectos congénitos.
Descripción general:
La salmonelosis es un tipo de intoxicación alimentaria causada por la bacteria salmonella (bacterias que por lo general viven en los intestinos de los animales y humanos y se expulsan a través de las heces). Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) son los reptiles junto a los pájaros los portadores principales.
Síntomas:
Pueden ser:
- Cólicos.
- Sensibilidad o dolor abdominal.
- Escalofríos.
- Diarrea.
- Fiebre.
- Dolor muscular.
- Náuseas.
- Vómitos.
Causas:
Cualquier alimento puede estar infectado por la bacteria salmonella, si es manipulado por una persona infectada con las manos sucias o si el alimento entra en contacto con otros que están contaminados, es lo que se denomina como “contaminación cruzada”. Generalmente la mayoría de personas se infecta por comer alimentos que han sido contaminados.
Al tratarse de una infección intestinal, la bacteria también se encuentra en las heces de personas infectadas, por eso la higiene personal cobra especial relevancia durante y después de pasar la enfermedad, ya que el no lavarse las manos después de ir al baño y manipular alimentos puede ser el origen de infecciones en otras personas.
Dado que las altas temperaturas favorecen el crecimiento y desarrollo de estos microorganismos, la mayoría de los casos suelen producirse en verano.
¿Cómo prevenir?:
La OMS aconseja el control en todas las etapas de la cadena alimentaria, desde la producción agrícola hasta la elaboración, fabricación y preparación de alimentos, tanto en establecimientos comerciales como en los hogares.
En las casas la prevención comienza con un buen almacenamiento de los alimentos y continúa con aspectos como lavarse las manos antes de cocinar y usar guantes al manipular los excrementos de los animales domésticos.
Factores de riesgo:
El peligro de la enfermedad dependerá de los factores propios del huésped y de la cepa de salmonella en cuestión. Para confirmar la intoxicación por salmonella se podrá llevar a cabo el cultivo de una muestra de heces del individuo.
Una vez la enfermedad ha sido detectada, pueden llevarse a cabo más pruebas para que pueda ser clasificada y determinar qué tipo de tratamiento es el más adecuado. Puede llevarse también un análisis sanguíneo completo y una ecografía del abdomen para descartar cualquier otra patología.
La OMS, señala que la salmonelosis es una de las enfermedades de transmisión alimentaria más comunes y ampliamente extendidas, además que la mayoría de los casos de salmonelosis son leves, aunque, en ocasiones, la enfermedad puede causar defunción.
Descripción general:
El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa causada por la infección del virus del sarampión (de la familia paramyxoviridae del género Morbillivirus), que en ausencia de vacunación afecta principalmente a niños, pero también pueden infectarse personas de cualquier edad no inmunizadas.
Cuando una persona padece esta infección queda inmunizada para toda la vida. No obstante, la inmunización es crucial porque puede tener afectaciones y secuelas graves.
Síntomas:
Los principales síntomas del sarampión son la fiebre alta y el exantema maculopapular, que consiste en erupciones con puntitos blancos, rodeados de un halo de inflamación rojo. Otros posibles síntomas son la tos, rinitis, conjuntivitis, dolor de garganta…
Se pueden distinguir tres fases consecutivas:
En adultos puede acompañarse de gastroenteritis y afectación hepática y también puede generar complicaciones neurológicas importantes. En general, tal y como pasa con muchas otras, esta enfermedad les sienta un poco peor a los adultos que a los niños.
El lapso de tiempo en el que una persona puede transmitir la enfermedad a otras comienza aproximadamente cuatro días antes de que aparezca la erupción y finaliza cuatro días después de ese momento. Por lo tanto, el periodo de contagio dura unos ocho días.
Causas:
Generalmente, el sarampión se contrae durante la infancia, entre los 12 meses y los 4 años. La causa es la infección por el virus del sarampión. Se trata de una enfermedad muy contagiosa, que se transmite a través del contacto directo con una persona infectada, o bien por el aire, con las gotitas de diminutas secreciones expulsadas al hablar, estornudar o toser que tienen capacidad para transmitir determinadas infecciones.
¿Cómo prevenir?:
La vacuna contra el sarampión es la única medida que existe para prevenir la aparición de la enfermedad.
Factores de riesgo:
Las complicaciones más frecuentes del sarampión son las infecciones bacterianas, como la otitis media o la neumonía, esta última sobre todo entre los lactantes.
La encefalitis o inflamación del encéfalo es otra de las posibles complicaciones del sarampión, que puede producir déficits neurológicos. Sin embargo, este tipo de enfermedades no suele aparecer en niños bien nutridos y su incidencia es muy escasa.
Descripción general:
Los sarcomas son un grupo de cánceres poco frecuentes que tienen su origen en las células del tejido conjuntivo, también conocido como conectivo o de sostén. Este tejido forma la estructura del cuerpo humano y de sus órganos y puede adoptar distintas cualidades, según el tipo de células que lo formen: grasa, músculo, vasos sanguíneos, cartílagos, tendones y huesos, entre otros.
Síntomas:
Se puede sospechar de la aparición de un sarcoma ante una masa de tejido que sea palpable. No obstante, estos tumores están a menudo situados profundamente y pueden no ser fácilmente palpables. Inicialmente, estos bultos no suelen generar dolor en el paciente y pueden crecer de forma muy rápida. Sin embargo, cuando los tumores aumentan de tamaño el dolor puede manifestarse, ya que la masa hará presión sobre los músculos y las terminaciones nerviosas y, en algunos casos, puede llegar a comprimir los órganos que rodean la zona afectada.
Si la masa se encuentra en el interior del abdomen, el paciente puede estar asintomático hasta que el tumor ha crecido notablemente.
Causas:
Las causas de los sarcomas de partes blandas se desconocen. Además, la mayoría de los casos que diagnostican no están asociados a ningún factor de riesgo conocido de tipo genético o relacionado con el estilo de vida. Por lo tanto, son esporádicos.
Únicamente en un porcentaje muy bajo de estos tumores se han hallado hay ciertos factores de riesgo:
¿Cómo prevenir?:
El desconocimiento de las causas y los factores de riesgo lleva a que, al menos en la actualidad, no exista ninguna medida que pueda prevenir la aparición de los sarcomas.
No obstante, dado que se ha observado que las personas con enfermedades raras como la neurofibromatosis, el síndrome de Gardner, el síndrome de Werner, el síndrome de Li-Fraumeni y la esclerosis tuberosa tienen más riesgo de desarrollar este tipo de tumor, los especialistas recomiendan que se realicen exámenes periódicos.
Factores de riesgo:
Estos tumores pueden manifestarse en cualquier parte del cuerpo: piernas, brazos, tronco, cabeza, cavidad abdominal, órganos internos...
Se caracterizan por su gran variedad: se han descrito más de 150 tipos distintos. En cuanto a su prevalencia, se calcula que representan, aproximadamente, el 1% de todos los cánceres. Aunque pueden aparecer en cualquier edad, muchos de los afectados son adolescentes, adultos jóvenes o niños.
Descripción general:
La sífilis es una infección de transmisión sexual (ITS) causada por la bacteria espiroqueta Treponema pallidum. Esta infección se manifiesta en la zona genital, los labios, la boca o el ano, entre otras zonas, y puede producirse tanto en hombres como en mujeres.
En términos generales, se suele contagiar al mantener relaciones sexuales con una persona infectada o, en el caso de los bebés, si su madre la tiene durante el embarazo.
Síntomas:
Los síntomas se dividen en 3 fases:
En la primera etapa de la enfermedad, aparece una llaga en la zona donde se originó el contagio, pero es probable que existan más. En términos generales, esta llaga es dura, redonda e indolora y por esta última característica suele pasar desapercibida para el paciente.
Estas llagas suelen durar entre 3 o 6 semanas en el cuerpo y se curan independientemente de que se reciba el tratamiento o no, ya que, si aparecen estas llagas, es fundamental que el enfermo acuda al especialista para evitar que la infección pase a la segunda etapa.
En la fase secundaria son comunes las erupciones en la piel e incluso la aparición de llagas en la boca, la vagina o el ano, también denominadas lesiones de la membrana mucosa.
Estas erupciones pueden aparecer cuando la llaga inicial se está curando o han pasado varias semanas desde que desapareció y se caracterizan por un aspecto de punto duro, de color rojizo o marrón que se localiza en la palma de las manos o en la planta de los pies.
Normalmente no causan picores y en muchas ocasiones son tan poco visibles que es probable que el paciente no perciba que las tiene.
Otros síntomas de esta fase pueden ser: fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, pérdida parcial del pelo, dolor de garganta y de cabeza, pérdida de peso o dolor muscular y fatiga.
La fase latente y avanzada comienza cuando los síntomas anteriores han desaparecido y, en el caso de no haber recibido tratamiento, es probable que el paciente siga estando infectado sin presentar ningún síntoma.
Esta fase se desarrolla entre los 10 y 30 años después de haberse contagiado y sus síntomas más comunes son: dificultad a la hora de coordinar los movimientos, parálisis en ciertas partes del cuerpo, entumecimiento, demencia y ceguera.
Si la enfermedad está muy avanzada puede dañar órganos internos y causar la muerte.
Causas:
La bacteria Treponema pallidum causa la infección al penetrar en la piel o en las membranas mucosas con soluciones de continuidad que, por lo general, se localizan en los genitales.
Esta enfermedad puede ocurrir en cualquier zona del mundo, siendo más común que aparezca en las zonas urbanas. En los últimos años está aumentando más rápidamente en los hombres homosexuales. La población con más riesgo de contraerla está entre los 15 y 25 años, pero en la actualidad el organismo humano no puede combatirla.
¿Cómo prevenir?:
Para evitar contraer esta enfermedad, los especialistas recomiendan las siguientes medidas de precaución:
- No mantener relaciones sexuales con personas contagiadas.
- Mantener relaciones con una pareja a la que le hayan realizado pruebas de la ITS y hayan salido negativas.
- Usar medidas de precaución a la hora de mantener relaciones sexuales: condones de látex, por ejemplo.
Factores de riesgo:
Las personas que tienen infeccionas de sífilis “tempranas” son las que pueden provocar la infección de forma más fácil a sus parejas sexuales.
A pesar de recibir el tratamiento correcto con antibióticos, los que ya haya causado esta enfermedad no podrán revertirse.
Descripción general:
Conocido también como trombosis de las venas suprahepáticas, es un trastorno raro, generalmente causado por coágulos de sangre que obstruyen, parcial o completamente, las grandes venas que drenan el hígado.
Síntomas:
Los síntomas del síndrome de Budd-Chiari pueden comenzar repentinamente y ser devastadores, pero, en general, se presentan gradualmente. El hígado se llena de sangre y se vuelve doloroso. El líquido se filtra desde la superficie del hígado aumentado de volumen hacia la cavidad abdominal. Puede producirse dolor abdominal y una leve ictericia. La acumulación de sangre en el hígado aumenta la presión en la vena porta, aunque las consecuencias de esto, tales como las hemorragias de las varices en el esófago, pueden tardar semanas o meses en aparecer.
Causas:
En general, la causa de la aparición del síndrome de Budd-Chiari no se conoce. En algunos casos existe algún proceso que aumenta la probabilidad de aparición de coágulos de sangre, como por ejemplo el embarazo o la drepanocitosis. Se ha asociado a la administración de estrógenos, y a la administración de quimioterapia para el tratamiento del cáncer y en enfermedades asociadas a un estado de hipercoagulabilidad de la sangre.
¿Cómo prevenir?:
Evitar consumo de estrógenos sin vigilancia médica y asistir a revisiones médicas si se sufre de enfermedades que son de riesgo.
Factores de riesgo:
Embarazo o la drepanocitosis. Se ha asociado a la administración de estrógenos, y a la administración de quimioterapia para el tratamiento del cáncer y en enfermedades asociadas a un estado de hipercoagulabilidad de la sangre.
Tips para detectar la enfermedad:
Dolor agudo y aumento del perímetro del abdomen.
Descripción general:
Es una enfermedad neurológica caracterizada por el desarrollo de tics motores y fónicos persistentes y cambiantes en el tiempo. En algunos casos, los tics son el único síntoma y pueden llegar a interferir de forma grave en la calidad de vida de los pacientes. En otros, lo más significativo son los problemas cognitivos, de atención y de conducta que experimenta un porcentaje significativo de los afectados.
Síntomas:
Los síntomas definitorios del síndrome de Tourette son los tics, pero no siempre son los únicos. Los niños con este trastorno no tienen tics estables, sino que van teniendo diferentes tipos de movimientos repetitivos, ya sean motores o fónicos, que son cambiantes y variables en el tiempo en frecuencia y en intensidad. Estos son algunos de los tics más habituales:
- Cierre repetitivo e involuntario de ojos.
- Movimientos de la boca.
- Elevación de hombros.
- Movimientos laterales del cuello.
- Movimientos de las manos y las piernas.
- Tocar a otra persona.
- Oler objetos.
- Tocarse la nariz.
- Escupir.
- Imitar gestos o acciones de otro.
- Sorber.
- Gruñir.
- Carraspear o aclararse la garganta.
- Gritar.
- Soplar.
- Toser.
- Silbar.
- Gemir.
- Eructar.
- Coprolalia (tendencia a decir palabrotas o frases inapropiadas).
- Palilalia (el afectado repite varias veces la última palabra dicha por él mismo).
- Ecolalia (el afectado repite lo que está diciendo su interlocutor).
- Tararear.
- Hacer ruidos de animales.
Además, un porcentaje significativo de los pacientes tienen, además de los tics, otros problemas cognitivos o conductuales, como trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o trastorno obsesivo compulsivo (TOC).
Los tics se pueden exacerbar por nerviosismo, ansiedad, estímulos ambientales tóxicos o por la administración de determinados fármacos, pero también pueden aparecer en situaciones de relajación.
Causas:
El síndrome de Tourette es una enfermedad con la que se nace. En concreto, es un trastorno del neurodesarrollo que tiene su origen en la zona del cerebro denominada estriado ventral, que se encarga de filtrar los movimientos que son más adecuados para cada contexto social. En los afectados, esta zona está hiperactiva, lo que les impide inhibir distintos tipos de movimientos.
No es una enfermedad psiquiátrica ni la consecuencia de un estado de ansiedad. Es cierto que puede tener algunos síntomas psiquiátricos, pero es una enfermedad neurológica que, además, tiene una cierta heredabilidad, es decir, se puede presentar en diferentes miembros de una misma familia. De hecho, diversos grupos de investigación están realizando estudios encaminados a desentrañar las bases genéticas de este síndrome.
¿Cómo prevenir?:
Al tratarse de una enfermedad congénita cuyo desarrollo no parece depender de factores ambientales, no existen medidas específicas para prevenirla.
Factores de riesgo:
El pronóstico del Tourette es muy variable: hay personas que pueden llevar una vida prácticamente normal y otras que padecen unos síntomas que afectan de forma significativa a su vida. La enfermedad comienza, generalmente, entre los 6 y los 8 años de edad y muchas veces empeora entre los 12 y los 16.
Descripción general:
El síndrome del túnel carpiano se produce cuando el nervio mediano se comprime a su paso a través del túnel del carpo, que es un canal formado por los huesos de la muñeca y cerrado por un ligamento que se encuentra en su cara palmar, por el que pasan también los tendones de los músculos flexores de los dedos y del pulgar. El nervio mediano es, junto con el cubital (en el codo), uno de los encargados de que podamos coger cosas y de aportar sensibilidad a la mano.
Síntomas:
Algunos de los primeros síntomas son dolor en la muñeca y el antebrazo, acompañado de calambres y hormigueo en los dedos. El síndrome puede empeorar si no se trata, provocando debilidad y atrofia en ciertos músculos de la mano. Estas son algunas de las principales manifestaciones:
- Dolor en la cara ventral de la mano, en los dedos pulgar, índice y medio y en la mitad del dedo anular.
- Este dolor se agudiza al efectuar determinadas actividades, como sujetar el volante para conducir o un libro para leer.
- Además, debido a la pérdida de sensibilidad del nervio mediano, se puede producir sensación de torpeza.
Causas:
El lado dominante suele ser el más afectado, pero es muy frecuente (en el 40-50% de los casos) que afecte a ambas extremidades superiores, es decir, que sea bilateral. Aun así, la gravedad tiende a ser mayor en el lado dominante. Tienen más riesgo de padecer el síndrome del túnel carpiano las personas con las siguientes condiciones y enfermedades:
- Quienes realizan movimientos repetidos de muñeca y dedos y mantienen posturas forzadas de la muñeca, como ocurre en trabajos de oficina por el uso de teclados y ratón no adaptados.
- Trabajadores de cadenas de montaje.
- Los sujetos que desempeñan trabajos que implican movimientos repetidos de presión y de pinza manual o de golpeteo repetido con el talón de la mano, como en los trabajos que implican utilizar maquinaria vibratoria o herramientas con empuñadura en el talón de la mano. Por ejemplo, en la construcción.
- Es dos veces más frecuente en mujeres que en hombres y la media de edad se sitúa en torno a los 50 años.
- Personas que hayan sufrido fracturas de muñeca, con callos de fractura o artrosis secundaria de muñeca que comprometa el espacio del túnel del carpo.
- Pacientes con enfermedades raras de depósito, como la amiloidosis.
- Afectados de enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide o la gota.
- Personas con trastornos del contenido lipídico o de líquidos, que pueden darse en caso de obesidad, embarazo, toma de anticonceptivos orales, mixedema (inflamación de las piernas) y acromegalia.
- Se asocia a enfermedades como la diabetes y el hipertiroidismo.
¿Cómo prevenir?:
Se recomienda cuidar las manos cuando se desempeñan actividades que puedan ponerlas en peligro. También hay que hacer hincapié en la prevención y el tratamiento de las dolencias que predisponen a padecer el síndrome del túnel carpiano, como la obesidad, la diabetes, el tabaquismo o el alcoholismo.
En el caso de las personas que trabajan con ordenadores durante muchas horas, se recomienda que el teclado se ajuste a la altura de los antebrazos para evitar la flexión de muñecas durante períodos prolongados.
Factores de riesgo:
En casos casos avanzados, afecta tanto que la pérdida de musculatura del área de la palma de la mano es evidente.
Descripción general:
La sinusitis es la inflamación de la mucosa de los senos paranasales que puede ser causada por un hongo, una bacteria o un virus, o bien por una alergia. Los senos paranasales son pequeños huecos llenos de aire; se dividen en senos frontales (están en la parte frontal del cráneo, situados encima de la nariz, es decir, en la frente), senos etmoidales (se sitúan en los laterales de la nariz, entre los huesos) y senos maxilares (localizados en las mejillas). En situaciones normales, el aire pasa a través de los senos sin problema; sin embargo, las personas que padecen sinusitis tienen bloqueados estos espacios y sufren molestias y dificultades a la hora de respirar.
Síntomas:
Los principales síntomas de esta enfermedad son:
- Dolor y presión detrás de los ojos y en la zona maxilofacial.
- Secreción y congestión nasal.
- Pérdida parcial o total del sentido del olfato.
- Fatiga y sensación de malestar general.
- Cefalea o dolor de cabeza.
- Fiebre.
- Dolor de garganta y goteo entre la nariz y la faringe.
- Tos, que tiende a empeorar por la noche.
Causas:
Las causas principales de esta patología son las infecciones, ya sean víricas (las más frecuentes), bacterianas y fúngicas. Existen otras causas relacionadas con los mecanismos inflamatorios y del sistema inmune del propio paciente, que pese a estar ampliamente demostradas sus implicaciones, todavía se desconoce del mecanismo exacto.
Existen factores que predisponen a la sinusitis:
- Variaciones climáticas: las estaciones más frías y el aumento de la humedad predisponen a una mayor probabilidad de padecer sinusitis.
- Tabaco: Tanto ser fumador activo como estar expuesto a su humo es un factor predisponente en esta patología.
- Exposiciones ambientales o laborales a la contaminación, a irritantes utilizados en la industria y a la exposición al humo.
- Variaciones anatómicas individuales (desviaciones septales y del tabique nasal, falta de desarrollo de los senos paranasales, un espolón óseo nasal o la presencia de pólipos nasales).
- Alergias: relación no clara con las sinusitis agudas, pero sí demostrada en el caso de la sinusitis crónica, junto con el asma.
- Enfermedades asociadas: alteraciones del aclaramiento mucociliar (los cilios o vellos que se sitúan en el interior de las aberturas paranasales no logran sacar el moco debido a alguna afección), fibrosis quística, vasculitis.
- Tener un sistema inmunológico débil, debido al virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) o a tratamientos como la quimioterapia.
- Hipertrofia de adenoides (tejido linfático que se encuentra en las vías respiratorias entre la nariz y la parte posterior de la garganta).
- Sometimiento a fuerzas como la gravedad y la presión: volar, bucear, montañismo, etcétera.
¿Cómo prevenir?:
Aumentar la humedad del cuerpo y de las vías sinusales mediante la ingesta de líquidos, especialmente agua, y el uso de un humidificador.
- Atajar rápidamente y de forma eficaz las alergias.
- Evitar el humo y espacios contaminantes.
- Administrar descongestionantes si se sufre una infección de las vías respiratorias.
Factores de riesgo:
La mayoría de las complicaciones que pueden aparecer a partir de una sinusitis son debidas a las estructuras adyacentes a los senos paranasales. También se pueden presentar:
- Erosión ósea o infección/inflamación del hueso que rodea los senos paranasales.
- Formaciones de mucoceles (quistes).
- Infecciones de la piel facial.
- Complicaciones orbitarias: celulitis orbitaria, abscesos orbitarios, alteraciones de la agudeza visual o de la movilidad ocular.
- Complicaciones cerebrales: meningitis y abscesos cerebrales.
- Crisis de asma: la sinusitis crónica puede desencadenar dificultades respiratorias y ataques de asma.
- Problemas de visión: si la infección se propaga al ojo, puede causar pérdida de visión o incluso ceguera.
- Aneurismas o coágulos de sangre: la sinusitis puede ocasionar problemas en las venas que rodean los senos paranasales, interfiriendo el suministro de sangre al cerebro y poniéndolo en riesgo de sufrir un derrame cerebral.
Descripción general:
El sonambulismo es un trastorno del sueño que se caracteriza porque las personas caminan o realizan alguna otra actividad estando todavía dormidas.
Síntomas:
Los síntomas del sonambulismo se caracterizan por:
- Cuando despierta, el sonámbulo puede estar confuso y desorientado.
- Si alguien lo despierta puede tener una actitud agresiva.
- Normalmente la expresión facial permanece ausente.
- Suelen abrir los ojos durante el sueño.
- No recuerdan el episodio cuando salen de él.
- Hablan dormidos y dicen frases inconexas y sin sentido.
- Levantarse y caminar.
- Realizar actividades físicas.
Causas:
Existen determinados factores que pueden precipitar un episodio de sonambulismo, sin embargo, por regla general no se conocen las causas exactas que originan los episodios de sonambulismo aunque existe la sospecha de que en muchos casos puede ser hereditario.
En los niños está asociado con la privación de sueño (haber dormido mal la noche o las noches anteriores), la fatiga y la ansiedad. En los adultos las principales causas son:
- El consumo de alcohol.
- Determinados medicamentos.
- Afecciones médicas, como las convulsiones.
- Trastornos mentales.
¿Cómo prevenir?:
El sonambulismo es relativamente frecuente en niños. Se puede prevenir con la adopción de hábitos saludables que incluyan unos períodos de descanso nocturno normales dentro de un horario regular. En los adultos, es recomendable dormir ocho horas diarias, así como reducir el estrés y la ingesta de alcohol.
Factores de riesgo:
El escape violento de la cama puede ocasionar choques o tropiezos contra la pared o el mobiliario produciéndose lesiones con frecuencia.
El adulto puede desarrollar un auténtico miedo a lo que pueda ocurrir durante la noche y crear barreras alrededor de la cama para no sufrir daños en caso de salidas, o cerrar puertas y ventanas para evitar escapar de la casa inadvertidamente.
En los casos en los que los sueños violentos se acompañan de conductas anormales y salidas de la cama se debe consultar con el especialista, ya que el diagnóstico es sencillo y se puede tratar con tranquilizantes y otros fármacos.
Descripción general:
Es la inflamación de un tendón, la estructura fibrosa que une el músculo con el hueso. Generalmente, se producen por sobre uso de los tendones. La tendinitis puede afectar a cualquier tendón del cuerpo.
Síntomas:
Las principales manifestaciones de esta patología son:
- Dolor y sensibilidad en la movilización del tendón. Estos síntomas se agudizan en las zonas cercanas a las articulaciones.
- Intensificación e incremento del malestar y el dolor con el movimiento o la realización de alguna actividad.
- Dolor durante la noche.
En las fases iniciales las tenditinis solo molestan después de la actividad física. Cuando son de grado 2 también duelen durante el ejercicio; en el grado 3 molestan durante la práctica de deporte, pero no obligan a parar. Finalmente, se habla de grado 4 cuando incapacitan para hacer ejercicio.
Causas:
El principal motivo por el que surge la tendinitis es como consecuencia de una sobrecarga muscular o por una lesión. Sin embargo, también puede producirse debido al desarrollo de otra patología o por la edad, ya que con el envejecimiento los tendones van perdiendo elasticidad y se puede producir su degeneración.
Las tendinitis se pueden producir en cualquier tendón del cuerpo. Entre las áreas más comunes se encuentran los hombros, los talones, los codos y las muñecas.
¿Cómo prevenir?:
No curar bien una tendinitis puede llevar a que se produzcan problemas a largo plazo. Si la inflamación se prolonga durante mucho tiempo, aumenta el riesgo de lesiones y de roturas del tendón.
Además, si no se sigue el tratamiento y las recomendaciones médicas, los síntomas pueden reaparecer.
Algunas de las recomendaciones de los especialistas para prevenir esta patología son:
- En las actividades deportivas, es fundamental realizar un buen calentamiento antes de empezar.
- Evitar movimientos repetitivos que puedan sobrecargar el tronco superior y el inferior. En el caso de realizar una práctica deportiva basada en las repeticiones conviene alternar estas series con periodos de descanso y recuperación.
- Ejercitar todos los grupos musculares para mantener la flexibilidad y la fortaleza.
- Mantener una buena hidratación.
Descripción general:
El tétano es una enfermedad grave provocada por la toxina de una bacteria llamada clostridium tetani. Esta toxina actúa como un veneno que afecta al sistema nervioso central.
Síntomas:
El tiempo entre la infección y la manifestación del primer síntoma puede variar de entre 7 a 21 días. Los síntomas de la enfermedad suelen comenzar con espasmos leves en los músculos de la mandíbula, además pueden darse espasmos en otras partes del cuerpo.
Los espasmos musculares en la espalda pueden causar arqueamiento. También pueden afectar a músculos que ayudan a la respiración dando lugar a problemas respiratorios. Pueden darse también otros síntomas como:
- Babeo.
- Sudoración excesiva.
- Fiebre.
- Espasmos de la mano o del pie.
- Irritabilidad.
- Dificultad para deglutir.
- Defecación incontrolable.
Causas:
La bacteria clostridium tetani se encuentra en el suelo, en las heces y en la boca de los animales. En forma de espora, la bacteria puede permanecer inactiva en el suelo, aunque puede seguir siendo contagiosa por más de cuatro décadas.
La enfermedad se adquiere cuando las heridas se infectan por la bacteria. Las esporas se vuelven activas y se diseminan en el cuerpo produciendo un tóxico llamado toxina tetánica. Esta toxina bloquea las señales nerviosas de la médula espinal a los músculos pudiendo causar espasmos musculares.
¿Cómo prevenir?:
El tétano es una enfermedad completamente prevenible por medio de la vacunación, la cual consta de tres dosis.
Factores de riesgo:
Son varias las complicaciones que pueden presentarse a raíz del tétanos como:
- Paro respiratorio.
- Insuficiencia cardíaca.
- Neumonía.
- Daño muscular.
- Obstrucción de las vías respiratorias.
- Daño cerebral debido a la falta de oxígeno durante los espasmos.
Descripción general:
Se denomina tortícolis a una contractura de la musculatura cervical unilateral que genera una actitud mantenida del cuello en rotación y lateralización. Es decir, el cuello queda girado y lateralizado de manera sostenida en el tiempo.
Síntomas:
Los síntomas de la tortícolis son de fácil detección. Normalmente, los pacientes sufren dolor cervical, movimiento limitado en la zona del cuello y rigidez del músculo esternocleidomastoideo. Además, se observa una postura anormal de la cabeza.
Otros síntomas característicos de la tortícolis suelen ser el dolor de cabeza y un ligero temblor de esta e hinchazón de los músculos del cuello, lo que provoca la limitación en los movimientos.
Causas:
Las causas de la tortícolis son múltiples, pero todas ellas pueden resumirse en la existencia de una contractura mantenida de la musculatura de un lado de la columna que genera la desviación cervical. La causa en sí dependerá del tipo de tortícolis:
- Las congénitas suelen asociar acortamientos del esternocleidomastoideo.
- Las distónicas se deben a una disfunción del sistema nervioso.
- Las simples son debidas a contracturas por malas posturas.
¿Cómo prevenir?:
Dado que normalmente esta patología se adquiere por malas posturas, se recomienda tener especial cuidado en situaciones que puedan originarla, como al utilizar almohadas demasiado altas o bajas a la hora de dormir.
Además, se aconseja prestar especial atención al realizar actividades cotidianas como pasar mucho tiempo hablando por teléfono con una postura forzada y poco ergonómica o si llevamos a cabo movimientos bruscos del cuello.
Las técnicas de relajación y los estiramientos regulares de la zona cervical reducen el peligro en pacientes propensos a padecerla.
Factores de riesgo:
Puede tener múltiples causas, que van desde las contracturas por malas posturas sostenidas, por ejemplo al dormir, hasta ser la manifestación de patologías como la distonía cervical, enfermedad neurológica en que se produce una contracción mantenida constante de un grupo muscular. También puede darse al nacer por malas posturas dentro del útero (la llamada tortícolis congénita).
Descripción general:
Es una enfermedad infecto-contagiosa aguda que afecta al aparato respiratorio.
Síntomas:
Inicialmente las manifestaciones clínicas de la tos ferina son semejantes a los que aparecen con un resfriado común. Estos síntomas suelen aparecer cuando ha transcurrido una semana desde la exposición a la bacteria. Entre 10 y 12 días más tarde pueden comenzar los episodios más graves de tos. En el caso de los niños, todo termina en la mayoría de los casos en un estertor, un sonido que se produce cuando el paciente trata de tomar aire. Es raro que éste aparezca en menores de 6 meses y en personas adultas.
La tos puede provocar que los pacientes tengan vómitos e incluso que los pacientes lleguen a perder el conocimiento. De hecho, es frecuente que los episodios de asfixia y las pausas largas de la enfermedad al respirar aparezcan en los bebés.
Otros síntomas comunes son:
- Diarrea.
- Fiebre leve.
- Rinorrea.
- Periodo de incubación: Dura entre 1-2 semanas. En este periodo el paciente no suele presentar síntomas.
- Periodo catarral o de inicio: Dura 2 semanas con síntomas catarrales inespecíficos: rinitis, estornudos, febrícula, lagrimeo, tos leve, seca e irritativa, que se va haciendo cada vez más intensa, de predominio nocturno y que puede provocar vómitos. La tos comienza a ser en accesos provocados por el mínimo estímulo.
- Periodo de estado convulsivo o asfíctico: Dura unas 4-6 semanas. La tos se vuelve convulsiva en accesos o “quintas”. El enfermo, encontrándose bien, nota que va a tener un acceso, realiza una inspiración profunda y comienza con una tos a golpes, ininterrumpida, atropellada, que dificulta la respiración, por lo que el niño estira la cara y el pecho hacia delante, saca la lengua, se va poniendo colorado, cianótico y con ojos llorosos y tiene una gran sensación de angustia.
Al terminar la crisis aparece una inspiración ruidosa (al pasar el aire por una faringe muy estrecha) que es lo que se llama “gallo” de la tos ferina. En este momento la tos va cediendo y al final de acceso se expulsa un esputo mucoso blanquecino y con mucha frecuencia vómitos. El enfermo está agotado. El número de “quintas” diarias y su intensidad varían dependiendo de la agresividad del germen, así como del carácter del paciente (más frecuente en nerviosos e irritables).
Tras unos días la cara está abotargada, edematosa y con los párpados hinchados. Debido a las “quintas” de tos pueden aparecer pequeñas hemorragias subconjuntivales, petequias en cara, epistaxis, pérdida de conciencia (si la apnea o falta de respiración es prolongada, ulceración en el frenillo de la lengua (al golpearse con los dientes), incontinencia de orina, prolapso rectal, etc.
- Periodo de convalecencia o remisión: Dura entre 1-3 semanas. Las “quintas” se van haciendo menos frecuentes hasta desaparecer. Pueden aparecer nuevas crisis de tos convulsiva después de varios meses, ante la presencia de un catarro banal.
Causas:
La tos ferina o tos convulsiva es una infección bacteriana aguda que afecta a las vías respiratorias altas. Esta enfermedad la causan las bacterias Bordetella pertussis o Bordetella parapertussis, patógenos exclusivamente humanos que pueden afectar a individuos de todas las edades y provocar discapacidad permanente en los bebés e incluso la muerte.
Cuando una persona con el virus estornuda o tose, pequeñas gotas que contienen la bacteria se mueven a través del aire favoreciendo la propagación de una persona a otra. El tiempo medio de la enfermedad suelen ser seis semanas aunque puede durar hasta diez.
¿Cómo prevenir?:
La vacuna contra la tos ferina es la opción más eficaz para controlar la transmisión de la enfermedad en la población.
Factores de riesgo:
La tos ferina es una de las enfermedades infecciosas más contagiosas, que afectan principalmente a los lactantes menores de seis meses, a adolescentes y adultos, si bien es el primer grupo el más vulnerable.
Descripción general:
Es una enfermedad infecciosa ocasionada por el parásito intracelular, llamado Toxoplasma gondii. Puede aparecer en animales, principalmente en los gatos y animales de granja, y en humanos. Muchas personas pueden padecerla sin tener conocimiento de ello, puede estar latente en el organismo una o dos semanas, o tener síntomas similares a otras patologías. Hay que tratar de prevenirla especialmente en el embarazo.
Síntomas:
La mayoría de los pacientes que tienen toxoplasmosis son asintomáticos. Las manifestaciones de esta enfermedad pueden ser muy inespecíficas, atribuibles a otras patologías. Pueden variar dependiendo de algunos factores:
- Toxoplasmosis en pacientes con sistema inmune competente o sano: los infectados por el Toxoplasma pueden presentar fiebre, dolor de cabeza, muscular o de garganta. También pueden padecer inflamación de los ganglios linfáticos de la cabeza y el cuello, modificación de su tamaño o sensibilidad de estos al tacto y coriorretinitis.
- Toxoplasmosis en pacientes inmunodeprimidos: puede manifestarse de forma similar, con dolor de cabeza o fiebre. Estos síntomas pueden ir acompañados de otros, como visión borrosa debida a una inflamación en la retina, convulsiones y psicosis. Algunos pacientes presentan problemas de vista, habla, motricidad o pensamiento.
- Toxoplasmosis congénita: es la transmisión al feto del Toxoplasma gondii, previamente contraído por la madre a través de la placenta. Las consecuencias para el niño pueden ser considerables, por eso es de gran importancia la prevención para evitar el contagio.
Causas:
Las principales causas para contraer esta patología son establecer contacto con animales infectados o sus excrementos, transfusiones de sangre, trasplante de órganos o ingesta de carne (generalmente cerdo o cordero) cruda o poco hecha que contenga Toxoplasma.
Comer frutas, verduras u hortalizas poco lavadas o cocinadas, que hayan estado en contacto con estiércol infectado, otro factor de riesgo, aparte de la ingesta de tierra con este parásito. Se puede contraer esta patología por beber agua contaminada o manipular tierra y plantas con el toxoplasma. Otra vía de contagio posible es por vía materno-fetal durante el embarazo.
¿Cómo prevenir?:
La prevención de esta enfermedad es posible. Es recomendable evitar ingerir carnes mal cocidas y mantener una higiene adecuada de las manos a la hora de cocinar y después de manipular excrementos de animales. A las personas que tengan Sida, se les aconseja hacerse un análisis de sangre para comprobar que no padezcan toxoplasmosis.
Factores de riesgo:
El Toxoplasma gondii se puede contagiar al feto durante el embarazo a través de la placenta, causando al bebé secuelas considerables. En las mujeres con un sistema inmune competente, no suelen presentar un cuadro sintomático específico, la mayoría de los casos se diagnostican por cribado para el diagnóstico precoz.
La probabilidad de que se transmita la enfermedad aumenta cuanto más avanzado esté el embarazo. A las 40 semanas de gestación, la probabilidad se incrementa en un 80 por ciento de casos de contagio. La toxoplasmosis en el feto se denomina Toxoplasmosis congénita y ocasionar los siguientes síntomas:
- Tamaño anormal del cerebro.
- Fiebre.
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
- Ictericia por la concentración de bilirrubina en la sangre (aspecto amarillento de piel y ojos).
- Erupciones en la piel.
- Anemia.
- Hematomas.
- Hepatomegalia (hígado más grande) o esplenomegalia (agrandamiento del bazo).
Algunos bebés pueden presentar anomalías en el sistema nervioso que pueden provocar convulsiones, bajo tono muscular, retraso de las capacidades mentales o pérdida de audición.
Descripción general:
Enfermedad mental crónica que afecta a los mecanismos que regulan el estado de ánimo. Se manifiesta en forma de episodios recurrentes que van desde la alegría o euforia, hasta la depresión o tristeza. Estas variaciones anímicas influyen de forma significativa en los aspectos sociales, familiares, académicos o laborales de la persona afectada.
Síntomas:
El patrón sintomático no es el mismo en todas las personas con trastorno bipolar. Entre los síntomas de la etapa de alegría están:
- Aumento de energía, pensamientos y habla rápida.
- Negación de los problemas.
- Fácil distracción.
- Escasa necesidad de dormir.
- Abuso de drogas y alcohol.
- Alta deseo sexual.
- Poco control del comportamiento.
- Sentimientos excesivamente eufóricos.
Y entre los síntomas de la fase depresiva se encuentran:
- Tristeza o estar deprimido diariamente.
- Problemas para concentrarse, recordar o tomar decisiones.
- Pérdida de peso o, por el contrario, aumento de peso por el consumo elevado de alimentos.
- Fatiga.
- Baja autoestima.
- Alejarse de amigos o actividades que disfrutaba.
- Dificultad para conciliar el sueño o dormir demasiado.
- Pensamientos de muerte o suicidio.
- Sentimientos de culpabilidad.
- Sentimientos de desesperanza o pesimismo.
Causas:
Se desconoce la causa exacta que produce el trastorno bipolar, aunque se presenta con mayor frecuencia en personas que tienen familiares que padecen esta enfermedad. Todo parece indicar que esta enfermedad tiene un origen genético y biológico.
¿Cómo prevenir?:
El trastorno bipolar no se puede prevenir, no obstante hacer cambios de estilo de vida ayudará a controlar los ciclos de comportamiento. Evitar las drogas y el alcohol, rodearse de personas positivas, hacer ejercicio con regularidad, tener una alimentación saludable y dormir lo suficiente son cruciales para evitar que los síntomas empeoren.
¿Cuándo consultar?:
El diagnóstico del trastorno bipolar es exclusivamente clínico. La entrevista con el psiquiatra sigue siendo el único método disponible.
Descripción general:
El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es una enfermedad mental que se calcula que afecta a un 2-3% de la población. Este trastorno se caracteriza por:
- Obsesiones: son ideas, pensamientos, imágenes o impulsos recurrentes y persistentes que no son experimentados como producidos voluntariamente, sino como intrusos, que invaden la conciencia y son vividos como repugnantes o sin sentido.
- Compulsiones: son conductas repetitivas y aparentemente finalistas, que se realizan según determinadas reglas de forma estereotipada. El acto se realiza con una sensación de compulsión (obligatoriedad de hacerlo) subjetiva, junto con un deseo de resistir a la compulsión, por lo menos inicialmente.
Síntomas:
Las obsesiones pueden clasificarse, básicamente, en 4 temas:
1. Contagio de enfermedades o contacto con la suciedad. Se trata de miedo a contraer una enfermedad y a veces, simplemente, a la sensación de estar sucio.
2. Miedo de cometer un error y que se derive alguna cosa negativa. Se traduce en dudas y necesidad de comprobación.
3. Necesidad de orden o de simetría.
4. Cuestiones de contenido sexual o religioso y muchas veces también de tipo agresivo. Puede tratarse de miedo a blasfemar, a insultar, el miedo a agredir sexualmente a alguien.
Las obsesiones y compulsiones más frecuentes en personas con TOC incluyen:
- Temor a contaminarse.
- Temor a causar daños a otros o a que le pase algo a los padres, familia...
- Ideas agresivas o de contenido sexual.
- Escrupulosidad /religiosidad excesiva.
- Pensamientos prohibidos.
- Necesidad de simetría.
- Necesidad de decir o confesar.
- Lavarse continuamente.
- Repetir una acción hasta hacerla bien.
- Asegurarse de haber cerrado la puerta, de haber cerrado el agua...
- Tocar.
- Contar objetos o hasta un determinado número.
- Ordenar.
- Acumular (no poder tirar nada).
- Rezar.
Causas:
Se desconocen las causas del TOC, aunque sí se sabe que no surge como respuesta a un supuesto conflicto intrapsíquico ni tampoco por un conflicto sexual reprimido.
¿Cómo prevenir?:
Es muy difícil prevenir un trastorno cuyas causas no se conocen. Lo que sí se puede hacer es fomentar el diagnóstico precoz. Los psiquiatras insisten en la necesidad de tratar cuanto antes esta patología porque se ha comprobado que mejora significativamente el pronóstico.
Factores de riesgo:
El TOC es más frecuente de lo que se creía hace años. En niños comienza entre los 7 a 10 años y tiene una prevalencia de entre 0,3 al 1,9 por ciento en niños y adolescentes. Un 33 por ciento de los adultos con TOC dicen que sus síntomas empezaron en la infancia. Frecuentemente el niño se avergüenza de sus compulsiones porque no son lógicas, pero no las puede evitar, por miedo a que algo mucho peor suceda. A veces los síntomas afectan mucho al niño en el colegio. Otras veces sólo están presentes en casa, y los padres puede creer que el niño los hace para fastidiarles.
Hay otro pico de inicio de la enfermedad ya en la edad adulta, en torno a los 18-25 años. Es raro que se inicie un TOC después de los 30 años; hay que hacer un estudio porque a veces hay enfermedades neurológicas, como tumores, que pueden cursar con esos síntomas.
Descripción general:
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es el trastorno psiquiátrico más frecuente en la infancia. Tiene un origen neurobiológico y sus síntomas más habituales son, tal y como indica su denominación, la inatención, la hiperactividad y la impulsividad.
Es una afección crónica que frecuentemente se diagnostica en la infancia y en muchos casos persiste en la edad adulta. Puede generar problemas en múltiples áreas de funcionamiento, afectando al desarrollo social, emocional y cognitivo.
Síntomas:
Los niños con TDAH son muy inquietos e impulsivos y tienen problemas para prestar atención y concentrarse. A pesar de intentarlo, son incapaces de escuchar correctamente, de organizar sus tareas, de seguir instrucciones complejas, de trabajar o jugar en equipo. Actuar sin pensar (la conducta impulsiva) les provoca problemas con padres, amigos y profesores.
Esta patología puede afectar negativamente al rendimiento de los niños en el colegio, así como a otros aspectos de su vida familiar y social. Las manifestaciones pueden dividirse en tres grupos:
El principal síntoma consiste en que los niños no son capaces de mantener la atención que se espera para su edad durante mucho tiempo. Además, a estos niños les cuesta ponerse a hacer todas las tareas que suponen un esfuerzo mental.
El principal lugar donde se aprecian estas manifestaciones es en el ámbito escolar, pero también aparecen en casa cuando un niño tiene que organizar sus cosas o cuando se muestra muy despistado.
En general suele caracterizarse por:
- No atiende detalles, comete errores.
- Dificultad para mantener la atención.
- Sordera ficticia.
- No sigue instrucciones, no termina las tareas.
- Dificultad para organizarse.
- Evita tareas que requieren esfuerzo continuado.
- Olvida y pierde cosas necesarias para su actividad.
- Fácil distracción por estímulos externos.
- Olvidadizo en las actividades diarias.
La hiperactividad es más evidente en niños de menor edad y va desapareciendo con el crecimiento. Se manifiesta de forma diferente dependiendo del niño, aunque suele caracterizarse porque están siempre en movimiento, corren, saltan, tienen dificultades para estar quietos, se levantan cuando deberían estar sentados, corren y saltan en situaciones inapropiadas…
Aquí tiene cabida todo lo que hace referencia a las situaciones en las que los niños actúan sin pensar en las consecuencias de sus actos. Los niños con TDAH suelen ser personas muy impacientes que a veces corren riesgos innecesarios y sin pensar en las consecuencias negativas que tienen. Con frecuencia responden al profesor antes de que finalice la pregunta, tienen dificultades para guardar el turno en actividades de grupo, etc.
Causas:
Se produce principalmente por alteraciones en una región del cerebro llamada corteza prefrontal, donde se realizan funciones mentales tan importantes como la concentración, el control de impulsos y la memoria a corto plazo, también llamada memoria de trabajo.
La mayor principal causa es la genética y existe un componente hereditario, pero existen multitud de causas ambientales que pueden producir disfunción en esta parte del cerebro, y por lo tanto, TDAH. Entre otras, alteraciones neonatales como alcoholismo o adicción a otras drogas durante el embarazo, traumatismos, tóxicos ambientales, meningitis, sufrimiento fetal durante el parto... Es decir, cualquier elemento que puede dañar el correcto desarrollo de la corteza prefrontal puede acabar causando TDAH.
No se puede hablar de uno, sino de múltiples genes que intervienen en la aparición de este trastorno, hay varios genes candidatos, como por ejemplo los relacionados con la dopamina y la noradrenalina.
¿Cómo prevenir?:
El TDAH es una disfunción cerebral que no se puede prevenir. No obstante, los cuidados generales de salud a lo largo del embarazo y las campañas de prevención de consumo de alcohol y tabaco en la gestación, así como un parto bien asistido, podrían ser una fuente de prevención, casi la única.
Por otro lado, lexiste otro tipo de prevención que se podría denominar secundaria: empezar el tratamiento lo antes posible una vez que la patología está diagnosticada. De esta forma podrían prevenirse otras complicaciones asociadas al TDAH.
Factores de riesgo:
La calidad de vida del paciente es muy variable. Hay niños con TDAH con síntomas poco intensos que toman su tratamiento por la mañana y hacen una vida completamente normal. Sin embargo, hay otros que sí presentan muchos síntomas y enfermedades como la depresión, puede tener una calidad de vida mermada.
Descripción general:
Es una enfermedad causada por la obstrucción de la vena porta hepática. Este vaso sanguíneo aporta una importante cantidad de sangre y nutrientes al hígado, por ello cuando la luz del vaso se cierra por trombosis se produce atrofia hepática.
Síntomas:
En la fase aguda puede existir dolor abdominal, fiebre y en ocasiones isquemia intestinal que precisa cirugía urgente para extirpar el segmento de intestino necrótico. Sin embargo, es frecuente que en la fase aguda no se presente ningún síntoma, por lo que la enfermedad puede pasar desapercibida hasta llegar a la cavernomatosis portal antes descrita. En fase crónica el síntoma principal es la hipertensión portal que provoca diversas manifestaciones, entre ellas varices esofágicas, ascitis, aumento del tamaño del bazo (esplenomegalia) y hemorragia digestiva por rotura de varices esofágicas
El diagnóstico puede sospecharse por los síntomas y los antecedentes patológicos, sin embargo el diagnostico de certeza solo puede alcanzarse mediante pruebas complementarias, entre ellas angio-TAC, angio-resonancia magnética y ecografía Doppler.
Sospecha precoz en paciente con factores de riesgo.
Descripción general:
Es una infección persistente causada por el Mycobacterium tuberculosis, que afecta a diversos órganos, pero particularmente los pulmones.
Síntomas:
Los síntomas más frecuentes son:
- Cansancio intenso.
- Malestar general.
- Sudoración abundante, especialmente al caer el día.
- Pérdida de peso.
- Sangre en las expectoraciones.
- Tos seca, persistente.
- Temperatura corporal que oscila entre los 37 y 37,5 grados.
Causas:
Entre los humanos se transmite a través del aire, por minúsculas gotas que contienen los bacilos y que las personas infectadas sin tratamientos, o que se encuentran en los primeros días de incubación, eliminan al toser, estornudar o hablar. La transmisión por vía alimentaria no es frecuente, aunque la leche no pasteurizada puede ser fuente de contagio en los países en los que la tuberculosis es muy frecuente.
¿Cómo prevenirlo?:
La prevención pasa por la detección precoz de la enfermedad, de manera que se pueda evitar la transmisión al resto de la gente. La OMS recomienda la vacunación con BCG a todos los recién nacidos con alta incidencia de tuberculosis, incluyéndola en el calendario infantil de forma sistemática.
En cuanto a la alimentación, si viaja a una zona afectada por la enfermedad absténgase de tomar leche o cualquier producto lácteo que no haya sido pasteurizado. En caso de contacto prolongado con una persona infectada que no está en tratamiento acuda lo antes posible a un médico y sométase a la prueba de la tuberculina.
Factores de riesgo:
El consumo de tabaco es muy perjudicial para la tuberculosis ya que, si se fuma cuando se padece esta enfermedad, la curación es mucho más complicada, se sigue expectorando durante mucho más tiempo y, al durar más, se eleva el riesgo de contagio de otras personas.
Si el paciente es adicto a la heroína, las complicaciones pueden dificultar la curación de la tuberculosis y empeorar la enfermedad. Los efectos que causa la sustancia (anemia, pérdida de peso, insomnio) y los hábitos de los consumidores, así como el desarrollo de infecciones ligadas a las condiciones higiénicas del consumo, harán que la curación sea más lenta y compleja.